✔ 𝗔𝗡𝗢𝗧𝗛𝗘𝗥 𝗟𝗢𝗩𝗘 ━━━━ Stephen Strange

18. Vestido y traje.

Gwen entró a la habitación de Stephen poniéndose sus aretes.

—¿Ya estás listo?— cuestionó acercándose a él con sus tacones resonando por el lugar, normalmente ella no era mucho de usar ese tipo de calzado pero debían ir formal y ese era el único par de zapatos que no eran un par de tenis o unas botas.

—Ya casi— respondió Stephen resoplando al no poder terminar de hacerse la corbata.

La mujer le sonrió divertida y avanzó hasta quedar frente a él, lo tomó de los hombros y lo giró un poco para quedar frente a frente para después ayudarle con su corbata.

Stephen solo se dedicó a observarla como lo hacía.

—Ahora sí— canturreo Gwen terminando de hacer el nudo —Te ves muy apuesto de traje.

—Y tú muy hermosa con ese vestido— el conjunto de la hechicera se trataba de un vestido casual de color verde oscuro con un corte en el pecho y unos guantes verdes en sus manos.

Gwen solo se limitó a sonreirle y Stephen imitó el acto mientras la daba el brazo para que ambos salieran de allí el cuál ella lo aceptó gustosa.

Su relación iba por buen camino, aún no tenían nada serio pero era bastante cómodo y agradable tenerse uno al otro.

Strange creyó que asistir a la boda de su ex novia y a la mujer que más amo en su vida sería difícil pero ahora no lo creía así, sentía cierta felicidad por ella y por el hecho de que pudo rehacer su vida así como él lo estaba haciendo con la peliverde.

No tardaron mucho en llegar a la iglesia aunque él insistía en ocupar un portal ella se decidió por usar un taxi, así era mejor ya que trataban de equilibrar una vida normal y una magica a la vez.

Bueno, al menos él lo hacía.

Al llegar al lugar ambos entraron con los brazos entrelazados viendo a todas las personas que se encontraban allí, algunas volteaban a ver al hechicero ya que él todavía era mayormente conocido a diferencia de ella la cuál se había borrado de la memoria de todos la última vez del incidente en Westview.
Ahora se arrepentía de haber tomado esa decisión ya que además de haber perdido a Wanda ese dia también perdió a los pocos amigos que le quedaban.

La pareja se sentó en dos lugares vacíos que quedaban junto a un hombre solitario el cuál Stephen conocía pero no se saludaron hasta que el hombre rompió el silencio con un simple saludo.

—Doctor Strange.

—West— se limitó a contestar en un inútil intento de hacer que la conversación no siguiera.

—Tanto tiempo sin verte— prosiguió.

—Si, salvando el tiempo convertido en polvo durante cincos años— respondió con cierto tono sarcástico haciendo que Gwen se removiera en su asiento al recordar esos terribles y a la vez lindos años —Así que...

—Eso nos pasó a muchos— tomó la palabra haciendo que el ambiente se volviera algo incómodo —Mientras yo no estuve, gracias por preguntar— soltó con ironía —Dos de mis gatos murieron.

—Que triste— se metió Gwen a la conversación con falso tono deprimente haciendo que Stephen volteara a verla, ella se dio cuenta que el hombre comenzaba a querer reclamarle a Stephen por lo sucedido y eso la fastidio, tenía poca paciencia últimamente.

—Y mi hermano— terminó por decir haciendo que Gwen resoplara.

—Lamento oírlo— exclamó Stephen tomando la mano de Gwen para hacer que se relajara y no volviera a hablar sin pensarlo dos veces.

—Ahora... Lo que no me deja dormir por las noches es una pregunta ¿Era la única opción que había?— un momento detonador sucedió con la peliverde ante esa última oración que salió de la boca del hombre.

"Es la única opción" lo último que le dijo su amiga Romanoff antes de morir saltando por un precipicio, antes de dar su vida a cambio de una estúpida gema.
Antes de decirle alguna respuesta dolorosa Stephen tomó la palabra.

—No, esa era la única opción que tenia— aseguró con severidad tratando de tener la vista al frente e ignorando el peso de sus palabras.

—Claro que sí, él mejor cirujano y el mejor súper héroe— soltó nuevamente con reproche.

Eso fue todo, ella no iba a permitir que un simple hombre llegara a reprocharles por no poder salvar a todos.
Gwen se enderezó un poco mientras se hacía para delante para poder ver mejor al hombre y hablarle directo a la cara.

—Cuando el destino de todo el universo está en tus manos y estás peleando contra un loco en busca de un genocidio tu mente no te da la oportunidad de pensar mucho— Stephen notó como los ojos de Gwen destellaban furia y le dio un apretón en su mano para que no siguiera pero fue inútil —¿Crees que si hubieramos tenido otra opción no la hubieramos hecho? No eres el único que perdió algo, al igual que tú nosotros los súperhéroes— dijo palabra haciendo comillas con sus dedos —tenemos familia, la diferencia es que a nosotros nos toca verla morir sin poder hacer nada ó por una decision que incluía salvar a la mitad del universo ¿Aún crees que si hubieramos tenido otra opción no la hubieramos llevado a cabo?

El hombre se quedó callado y dirigió su vista al frente con una mueca en su rostro.
Gwen se volvió a sentar derecha aún con su mano entrelazada con la de Stephen.

La música comenzó a sonar indicando que la novia iba a entrar haciendo que los presentes se levantaran para resivirla.