𝐄𝐋𝐄𝐂𝐓𝐑𝐈𝐂𝐈𝐓𝐘 - 𝐋𝐑𝐇

⚡prince charming⚡

*** Texto en negritas es diálogo en español.

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Luke Hemmings había llegado a cambiar mi vida de muchas formas. No nada más había encontrado en él ciertas fantasías de adolescente que tenía, como por ejemplo, tener un novio que tocara en una banda, eso más que nada se lo atribuyo al fanatismo que solía tener por Alex Turner por allá del 2014.

Cualquiera que supiera lo que acabo de pensar diría que aún tengo ese fanatismo, y la verdad es que sí pero no tienen porque saberlo. En fin. Luke no solo había llegado a mi vida como la clásica descripción del principe azul llegando a rescatar a la princesa con un beso en los labios, si no que de alguna u otra manera, había llegado a salvarme la vida.

Mi trastorno alimenticio había iniciado años atrás en mi adolescencia, no era algo nuevo y sabía perfectamente el mal que me estaba haciendo pero que, por cuestiones de mi atrofiada salud mental, no podía parar. Estaba estancada en una rutina que me generaba ansiedad constantemente, rodeada de personas que me daban malas caras e incluso familiares que simplemente me decían en la cara lo que debería de hacer con mi vida.

No quiero decir que Luke había ocasionado que mi trastorno empeorara, lo último que quería era eso, pero indirectamente lo había ocasionado. Desde que mi nombre e imagen fueron ligados a su caótica vida Hollywoodense, mi ansiedad creció hasta el cielo.

Bastaba con poner en Google 'Luke Hemmings new girlfriend' y las notas amarillistas de portales despiadados de internet sería lo primero que verías. Los encabezados haciendo alución al pasado amoroso de Luke queriendo ser remplazado por una "nueva" conquista.

La crítica hacia mi persona y oficio en general, la alarmante veracidad con la que daban detalles de mi vida privada como fecha y origen de nacimiento, mi familia directa y mis grados académicos de estudio incompletos.

Me hacían ver como un fracaso y de cierta manera comenzaba a creerlo. Twitter era simplemente despiadado y leer todas y cada una de las palabras que me twiteaban me hacía ver que realmente no tenía mucho en especial.

Eso, hasta que Luke me envolvía en sus brazos, dejaba un beso en mis labios y con sus bellos ojos me decía lo especial que era para mi. Entonces mi corazón se apretaba de emociones y la confusión comenzaba. ¿Por qué si el chico que me quiere me dice lo especial que soy, mi mente no puede evitar sentirse como la basura que los demás dicen que soy?

El día de hoy era bastante complicado no sentir esa ansiedad consumirme con cada minuto que pasaba. Por un momento había olvidado el temor de ver esa pequeña burbuja roja en la equina superior de la aplicación del pájaro azul con el numero aumentando cada vez más y más. Las notificaciones me llegaban como locas y sabía en lo profundo de mi mente que no sería nada bueno.

Había solo una cosa que quería, más bien, una persona.

Ese, metafóricamente hablando principe azul, estaba aterrizando en la capital del país y mientras yo me encontraba en la sala donde llegaría junto a los demás chicos y el staff, yo no hacía más que caminar de un lado a otro esperando. Literalmente esperando a mi principe azul.

No pasaron más de veinte minutos cuando un montón de gente comenzó a entrar a la sala proveniendo del pequeño tunel conectado al avión, mis ojos escaneaban cada una de las personas a través de mis lentes de sol. Tenía que usarlos o el mundo vería esas ojeras que el corrector no podría cubrir.

La ansiedad me estaba carcomiendo, realmente mi mente y corazón necesitaba un abrazo de mi chico porque tenía demasiados sentimientos acumulados y él era tan increíblemente comprensivo que me sostenía entre sus brazos para evitar que me cayera a pedazos.