20. (IM)PACIENTES

8.5K 821 724
                                    

Mucha gente dice que las mejores decisiones son las que se toman en un impulso, aquellas en las que no nos detenemos a pensar en qué tan coherentes son ni qué riesgos o consecuencias pueden traer consigo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mucha gente dice que las mejores decisiones son las que se toman en un impulso, aquellas en las que no nos detenemos a pensar en qué tan coherentes son ni qué riesgos o consecuencias pueden traer consigo.

Durante muchos años, he sido extremadamente cuidadosa de cada cosa que digo y hago. Mis movimientos están planeados: las grabaciones, los tours, los posts en redes sociales y más. Estar en el ojo público me ha hecho perder la espontaneidad que solía caracterizarme, esa misma que me llevó a crear mi canal de ViewTube y a subir un primer video sin siquiera editarlo.

Un impulso me trajo aquí y me convirtió en Myre. Otro impulso me hizo pagarle un pasaje a una de mis fans para que venga a Miami sin previo aviso. No le he dado tiempo de empacar, de ir de compras, de pasar por la peluquería ni nada. Escogí el primer vuelo disponible porque temía que, de aguardar a mañana, me arrepentiría.

Así soy yo. Lo impredecible me aterra y, al mismo tiempo, me excita. Añoro recuperar esa parte de mí que se lanza al vacío sin saber qué aguarda en el fondo. La extraño.

Por eso estoy aquí.

Estaciono la motocicleta en el aeropuerto, tan cerca como puedo del sector que recibe vuelos nacionales. El sol ya se está ocultando, pero aquí siempre hace calor.

Me quito el casco y lo engancho al frente del vehículo. Luego, sacudo mi cabello, que ha quedado aplastado y húmedo por el sudor. Me deshago también de la chaqueta de cuero, que siempre me protege del viento cuando conduzco; la coloco en la mochila, que contiene también un segundo casco para Nina. Es muy básico y de color negro, lo compré en el supermercado cuando venía de camino porque había olvidado completamente que lo necesitaríamos.

Reviso la hora en el teléfono y sonrío, llegué justo a tiempo. El vuelo debería estar aterrizando precisamente ahora. Coloco mis manos en los bolsillos del short y camino rumbo a la puerta que tiene el cartel de arribos nacionales.

"¿Qué demonios hago aquí?", comienzo a arrepentirme. No le compré a esta chica un pasaje de regreso porque todavía no sé si quiero que se quede conmigo unos días o toda la temporada. Hace años que no comparto el apartamento con nadie y no sé qué tan incómoda podrá ser la convivencia con ella.

Nina y yo solo hemos hablado un par de veces, que es mucho en comparación con las escasas interacciones a las que acostumbro. En lo poco que la conozco, me ha parecido una buena persona. No sé si sea la amiga o la roomie ideal, pero es la única opción que poseo, así que le daré una oportunidad.

Espero que unas semanas de libertad sacien mis deseos de romper las reglas y que luego las cosas regresen a la normalidad.

Con esta idea en mente, respiro hondo y atravieso el umbral. Paso por aquí a menudo, conozco el edificio de memoria y voy directo a las pantallas que indican el estado de cada vuelo. Busco el de Nina con la mirada y descubro que ya aterrizó hace algunos minutos.

★ (IN)HOOMAN  ★  [BILOGÍA COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora