Érimos 2

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Alfa y Omega entran a la pequeña cabaña de la mujer, Xylia, es su nombre. Louis se encuentra nervioso realmente no sabe como es que llegó hasta ahí, como esta confiando en el rizado va más allá de su uso de la razón, mientras el castaño de encuentra en un predicamento, Harry se encuentra feliz de volver a ver a su vieja amiga.

—Venimos a-comienza Harry sentado en el sillón de piel solo para ser interrumpido.

—Se a que vinieron, querido.

—¿Cómo?-el Alfa suena incrédulo, listo para acusarla de charlatana.

Harry permanece sentado con un sonrisa en el rostro, sabia que tenían que venir con ella.

—Los árboles murmuran, joven Tomlinson.

Ante eso los ojos del castaño se abren, jamás dijo quien era y no hay manera de que se hayan visto con anterioridad, Louis reconocería su rostro repleto de perforaciones, su piel recubierta con tatuajes, su cabello peculiarmente rojizo y sus ojos azules.

—Pero la luna, su voz es la más fuerte de todas, siempre sabia e imponente.-la mujer comienza a servir algún tipo de té en tres tazas.—El futuro es su especialidad, al parecer te ha murmurado un poco de ello.

—Y-yo-

—Bebe el té.-Xylia no deja a hablar al castaño, en su lugar le entrega la taza y hace lo mismo con el rizado.—Tú también, Omega.

Harry y Louis se voltean a ver, el rizado lleva una de sus manos hasta la pierna del Alfa dando un apretón que pretende contagiar seguridad, después toma la taza de té en su mano y comienza a beber. Louis mira al Omega tomar un primer sorbo y pronto se encuentra a si mismo copiando la acción.

—Pónganse cómodos.-Xylia bebe su té.

Antes de que alguno de los dos hombres pueda preguntar a que se refiere, ambos caen en un profundo sueño.

Louis puede ver a Harry y a la pelirroja a sus lados, pero no están en la pequeña cabaña, están en un bosque cubierto por la nieve, el castaño puede notar la ausencia de frió aún con el tipo de paisaje frente a sus ojos y pronto voltea hace Xylia algo desconcertado.

—¿Dónde estamos?

—En tu subconsciente, justo donde la madre luna dejó huella.

—¿Qué hace él aquí?-pregunta señalando al rizado.

—Mmm bueno pues es tu compañero, necesita estar aquí.

Harry lo voltea a ver con una sonrisa. El rizado siente orgullo de ser su compañero lo que sea que eso signifique.

Louis quiere golpear (o besar) la sonrisa del rizado, como es que puede sonreír en momentos así cuando el castaño esta ¿Nervioso? ¿Asustado? ¿Entrando en pánico dentro de su propio subconsciente?

—Louis, tienes que relajarte, deja que la madre luna te guíe.

El castaño jamás quizo atravesar a alguien con su espada tanto como en este momento.

—¿Vieron eso?

La voz de Harry saca al ojiazul de sus abrumadores pensamientos.

—¿Qué cosa?

—Un lobo blanco.-apunta hacia el bosque nevado.—Justo como tú, Louis.

El castaño se tensa nuevamente hasta que algo pasa por su mente.

—Debemos seguirlo.-externa seguro.

Harry lo voltea a ver con ojos sorprendidos mientras Xylia trata de esconder su sonrisa en la manga de su vestido.

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