Era una mañana fría, tal vez la más fría de todas las mañanas.
Al llegar al puerto de Ocean, la energía de cada ser sobre el barco se ve recargada, algunos han usado la venganza como combustible, otros el amor por sus tierras, o por las persona que la habitan, justo como el grupo de amigos que solo piensan en proteger su hogar y a sus seres queridos.
Todos aguardan la orden del capitán de la nave para desembarcar en las gélidas tierras y comenzar el camino hacia dónde la concentración de miembros de la manada Tomlinson es mayor.
El omega pelinegro luce como un animal enjaulado, paciando de un lado a otro en la cubierta enpuñando su espada con fuerza, un par de ojos miel teñidos de preocupación lo siguen en todas direcciones.
Al principio al partir de la isla los animos estaban bajos, los amigos y pasajeros que decidieron unirse en la lucha y regresar a lo que hace siglos llamaron hogar, se encontaban frustrados, cansados de perder contra la misma mujer que tanto les ha arrebatado durante los últimos siglos.
El barco llega al gélido puerto donde el resto de las brujas se encuentra esperando por ellos, Xylia se encuentra ahí.
—¡Omega!-la voz de la mujer sueña feliz, demasiado feliz para la situación que los rodea.
Sin embargo, Harry sonríe ante la presencia de su vieja amiga, baja rápido del barco ignorando los llamados de su alfa para que no corra.
—Xylia, ¿Qué haces aquí?
—La lucha aún no llega a Erimos, no realmente, las harpías se concentran aquí, en Ocean y vi que llegarías con un regalo.-sonríe la pelirroja bajando su mirada al vientre del rizado.
—Pensé en-suspira el Omega bajando su mano a el pequeño bulto.
—Se lo que pensaste, Omega.-calma la bruja colocando su mano sobre la del menor.—Me alegra que no lo hayas hecho, no será fácil el camino, Omega, pero lo lograrán.-sonríe dejando un beso en su mejilla.
—Hazz, no vuelvas a correr así, hay hielo.-la voz del Alfa castaño suena cerca y es que lo esta. Justo detrás de él.
—Gusto verte, Louis.-saluda la mujer alejándose unos pasos del menor.—Veo que te haz ablandado.-sonríe algo burlona.
Louis gruñe tomando a su Omega de las caderas, sus grandes manos rodeando el vientre del rizado , Harry suelta feromonas para tranquilizar a el Alfa, pues sabe que bajo tanto estrés Vidarr tiende a querer tomar el control.
—No me gruñas, estoy aquí para ayudar.-dice la mujer mirando a la pareja con una sonrisa. Todo estará bien.
—Espero que drogarnos con otro té no sea la clase de ayuda que viniste a ofrecer.-reclama Louis apegando a su Omega embarazado hacia él, besando la marca; la mayoría de las veces no sabe si lo hace para mantener a su Omega calmado o para calmarse asimismo, tal vez ambas.
Xylia rueda los ojos mientras Harry ríe suavemente, no puede esperar a que su vida se reduzca a esto, a pequeños encuentros con viejos amigos y su Alfa a su lado.
—No hay tiempo para esto, debemos irnos.-Xylia se separa se ellos girando hacia la nieve.—¡tempus est!-grita alertando al resto de las brujas, pronto se encuentra reunidas, cinco de ellas incluyendo Xylia giran su mirada hacia la nieve, estirando una mano mientra sque la otra con los dedos en una posición irregular comienza a girarla.
Cinco portales se abren, luces azules rodeando los óvalos en el aire y una guerra aguardándolos del otro lado.
El Alfa castaño gira hacia su Omega. Louis besa su mejilla, con una mano sobre su abultado vientre.
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EVOLUCIÓN
FantasyLouis, un alfa del norte que desea vengar la muerte de su madre. Harry es un lindo omega que se interpone entre un alfa y su venganza. ?Las correcciones se harán una vez que la historia esté terminada, una disculpa de antemano por la falta ortográfi...