Margareth el éxtasis de la traición

⁓capítulo 25⁓

Los minutos transcurren tan lentos que me parecen horas, Dave ha dejado de hablar con el comisario García y maldecir cada momento, Michael está furioso pero trata de conservar la calma, Jerry está preocupado y es lógico, él era el encargado de cuidarme en la graduación, tal vez lo despidan por mi culpa, y mis padres siguen esperando que salga de la oficina de García. Él muy amable presta atención a todo lo que digo.

—Y así sucedió todo el día de hoy —culmino mi interrogatorio oficial, pero aún me queda el personal, y ese me dolerá.

—¿Desde el día que lo demandó él no mantuvo contacto con usted?

—No, de hecho hace poco tropezamos por accidente en la universidad y no me dijo ni me hizo nada, actuó normal, incluso como un completo extraño.

—Bien señorita Morgan, le diré el procedimiento. El señor Tayler rompió la orden de caución, la maltrató, e incluso lo que hizo en la universidad puede tomarse como un secuestro. Debemos hablar con su abogado y colocar otra demanda, esto ira a un juicio y el juez dictara una sentencia la cual puede terminar con unos años en prisión.

—Entiendo, preferiría que ese tema lo trabaje con mi abogado, yo realmente no quiero saber nada más sobre Matt.

—Perfecto, como usted quiera, de igual manera el señor Carter me pidió que todo lo relacionado al tema Tayler lo trate directamente con él, realmente el señor no quiere que usted se atormente más con este asunto.

—¿Dave le dijo algo más? —murmuro.

—No señorita, él solo no quiere que usted vuelva a saber nada de Tayler.

—Bien entiendo, gracias por su ayuda ¿ya puedo retirarme?

—Por supuesto, y señorita Morgan —él se levanta y me tiende la mano— suerte con el señor Carter.

—Gracias.

Estrecho la mano del comisario y salgo de su oficina, espero no tener que volver a este lugar jamás. Su deseo resuena en mi cabeza ¿Qué habrá querido decir con "suerte con el señor Carter"? ¿Algo más le dijo que se tomó el atrevimiento de advertirme? Creo que estoy en serios problemas.

Mis padres me ven y se levantan de las sillas, ellos me abrazan y por un segundo siento calma, pero la serenidad me dura poco ya que no veo a Dave, y eso me aterra tanto como estar sola con Matt.

Ruth se acerca rápidamente y me abraza, esta tan angustiada como mis padres. Dave lo escuchó perfectamente bien, todos lo hicimos, solo queda esperar la reacción tardía de él. Maldito Matt tenía todo planeado, lograra que Dave se aleje y no quiero, yo lo amo...

Respiro profundo para tratar de disipar mis ganas de llorar, nunca imaginé que el problema con Matt llegaría tan lejos y acabaría con mi alma...

Unos gritos masculinos cerca de nosotros me sacan de la nebulosa en la que he estado por horas.

—¿Qué sucede? —pregunta mi madre.

—¡Dave! —Es su voz, giro alarmada en busca de él— ¡carajo!

Mi corazón se agita y maldigo internamente, lo que tanto evite, lo que rogaba que no sucediera, lo que más temía, está sucediendo frente a mis ojos.

Erick está gritándole a Dave y él se defiende como un lobo. Siento que mis rodillas empiezan a tambalearse, y mi cabeza da vueltas; de repente veo que Michael como un rayo de luz en la oscuridad logra alejar a Dave de Erick y doy gracias a Dios por ello.

Suelto la mano de padre e intento ir hacia ellos, pero él vuelve a sostener mi brazo, lo miro cautelosa él frunce el ceño y sacude la cabeza, maldición no quiero más peleas por mi culpa, las personas presentes los ignoran, creo que ver a hombres pelear aquí es tan común que no le prestas atención.