soulmates|| carl gallagher

02

Al llegar a casa vemos a Debbie con unas tijeras agujereando la cabeza de una de sus muñecas.

─Eso es turbio─ me susurra Carl al oído haciendo que un escalofrió me recorriera el cuerpo.

─¡Debs!─ le llamo pero ella no despega su vista de la muñeca. Decido dejarla hasta que se le pase, no vaya a ser que me lance las tijeras al ojo.

─Debs, Carl, Li ¿Qué pasa?─ la voz de Lip hace que gire mi cabeza para mirarlo.

─¡Malditas zorras!─ Debbie empieza a apuñalar a la muñeca mas fuerte.

De mientras, Carl, intenta subir la rampa improvisada que hay en el porche conmigo encima aún.

─¿Que tal el ultimo día de cole?─ le pregunta Lip a su hermana menor─¿Algo de lo que quieras hablar al respeto?

─No─ Debbie seguía muy ocupada con su muñeca.

Intento levantarme de encima de Carl para ir a darle una abrazo a Lip pero me lo impide agarrándome de la cintura con fuerza. Iba a protestar cuando alguien habla antes que yo.

─¡Eh, Cabronazo!

─¿Que pasa, Stumpy?─ Lip saluda a quien supongo que será un amigo suyo.

Mi atención se centra en uno de los brazos del castaño que sigue agarrando mi cintura con fuerza. Siento como mi estomago se revuelve pero lo ignoro.

─Tengo que ir a mear Carl─ digo quitando su brazo, el castaño gruñe por lo bajo pero no dice nada─ Debs, no creo que apuñalar a tus muñeca arregle algo─ digo pasando a su lado pero ella me ignora.

Voy al baño y me lavo la cara intentando calmarme, dejo soltar un suspiro antes de salir encontrándome con Carl subiendo las escaleras.

—Dejame, te ayudo— digo acercándome a él y ayudándolo a subir los últimos escalones.

—Gracias rubi— me dedica una sonrisa la cual le devuelvo.

Me gusta cuando me llama así, es una pequeña referencia al color de mi pelo y la piedra rubí.

—Tenemos cena en el trabajo de Fiona ¿no?—pregunto mientras espero a que Carl salga del baño.

—Si— me contesta desde dentro del baño.

Carl sale del baño yendo hacia su habitación.

—¿Que hora es?— me pregunta sentándose en la cama de Ian.

—Las siete, ¿por qué?

—Amm, deberíamos ir yendo ya— suelta un suspiro antes de levantarse y salir junto a mi.

Para bajar las escaleras le ayudo como antes, casi nos caemos por culpa de Carl.

—Carl, juro que voy a matarte— le amenazó abriendo la puerta mientras el coge la silla de ruedas robada y yo río.

—¿Que?

—Nada, nada— digo con una sonrisa de lado y el rueda los ojos devolviéndome la sonrisa.

Cuando llevamos un rato andando Carl suelta un suspiro antes de pararse en seco, cuando voy a girarme para mirarlo noto como me agarra del brazo y me sienta encima suyo cómo ha hecho hace un rato.

—Carl

—Lia— contesta con el mismo tono que yo pero él tenía una sonrisa de lado en el rostro.

—¿Por qué has hecho eso?— pregunto colocándome mejor encima de su regazo y el pone su brazo libre en mi cintura agarrándome para que no me caiga.