𝓒𝓪𝓹í𝓽𝓾𝓵𝓸 20

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Otro mes había pasado, el cansancio empezaba a ser más por tantos cambios de horario, lo cual me llevaba a considerar seriamente la idea de tomarme unos meses de descanso tras la finalización del rodaje.
A su vez, que el rodaje finalizara solo significaba que las fiestas se acercaban. Toda la familia junta, con suerte la organización de la boda opacaría la "gran noticia" de mi noviazgo. Si bien Shaun se lo tomaba con gracia -porque Lyla preguntaba por él cada vez que llamaba-, me daba miedo que terminaran por incomodarlo.
Y hablando de incomodidades, no había nada más incómodo que mirar a tu hermana en la elección de vestido a través de una videollamada. No por el hecho de la comunicación, sino porque no pude estar allí en persona.
—¿Y cuándo lo vamos a conocer? —preguntó Lyla por enésima vez mientras esperábamos que Spencer volviera con otro vestido— Tu padre dice que es un caballero y necesito saber si eso es verdad, hija.
Shaun ríe desde el sofá donde estaba sentado en mi trailer. Niego mirándolo con una sonrisa, solo faltaba que se metiera delante de la cámara.
—Cuando así lo queramos, madre.
—Espero que sea pronto, eh —habló amenazante. Nos quedamos en silencio ya que Spence regresó con un vestido corte sirena con mangas y la parte del abdomen con encaje. Incluso a través de la pantalla vi como los ojos de mi hermana se llenaron de lágrimas y sonreía llena de felicidad. Eso emocionaba a cualquiera.
—¡Mi amor! —decía Lyla con la voz quebradiza— ¡Te ves bellísima!
—Mamá tiene razón, Spency —coincidí. Spencer se secó las lágrimas y miró a la chica que las estaban atendiendo.
—Es este mi vestido —afirmó contenta.
—Después de diez vestidos, fue rápido —bromeé haciéndola reír.
Tuve que terminar la videollamada debido a que teníamos que regresar a grabar. En el set nos encontramos con Bonnie, quien repasaba sus líneas acostada en el sofá. Me acerqué a la chica y tomé asiento en uno de los bordes.
—Quiero dormir —se quejó tapándose la cara con el guión. Reí.
—Todos queremos.
Bonnie se sentó de golpe en el sofá haciéndome fruncir el ceño.
—¿Viste los rumores de hoy? —cuestionó seria.
—¿Debería? —Bonnie asintió— ¿Qué pasó?
—Bueno —suspiró acomodándose, apoyando los pies en el suelo—, Constance subió una foto vieja con Shaun diciendo cuánto lo extraña. Obviamente es una estrategia para llamar la atención, lo cual funcionó. Todos ahora se preguntan si volverán o no, yo sé que no; te quiere a ti y de eso no hay duda, pero...
—No es bueno que lo sigan relacionando con ella —interrumpí—. Seguro Hope hablará con él, conociéndola le pedirá que confirmemos nuestra relación.
—Pero eso es decisión de ustedes —contradijo—. Nadie los puede obligar.
Era verdad. Teníamos el poder sobre decidir cuándo o si queríamos hablar sobre nosotros, era obvio que no íbamos a poder mantenerlo en secreto para siempre, mas disfrutábamos de cómo estaba saliendo las cosas. Tal vez era yo quien tenía miedo, sabemos que el mundo de las redes sociales es uno demasiado tóxico. El odio que se lee en cada post sobrepasa límites inimaginables. Por más fuerte que uno sea, esos comentarios molestan y te hacen sentir mal. Es como si olvidaran que somos seres humanos, que tenemos sentimientos y una vida. ¿Por qué es tan difícil de aceptarlo?
Por otro lado, la parte insegura de mí se preguntaba si Shaun había visto la publicación y qué sintió si lo hizo. Quiero decir, ellos estuvieron juntos por años, se iban a casar, se pensaba que ya eran el uno para el otro y que el amor nunca acabaría. ¿Era así? ¿Había terminado de verdad? Eso me preguntaba, más cuando lo veía a Shaun nervioso entre tomas.
Durante uno de los descansos, tuvo una llamada que lo descolocó más e hizo que su actitud cambiase por completo. No trataba mal a nadie, pero se notaba que su humor no era el mejor. Debido a eso, no quise molestarlo y decidí darle su espacio.
Para cuando la jornada terminó, Nick y yo pasamos por un McDonald's para la cena. Mientras comíamos de regreso al departamento, Nicholas me preguntó si Hope ya había hablado con Shaun sobre lo ocurrido.
—Seguramente —contesté agarrando una papita—, pero no le pregunté.
—Nunca entenderé porqué algunas personas reaccionan así de inmaduras —dijo refiriéndose a la publicación de Constance. Ambos la habíamos visto mientras esperábamos el pedido.
—Por lo menos no lo amenaza —solté sin pensarlo, provocando que nos quedáramos en silencio. Ese fue el primer momento en el que Nick empezó a sospechar; sabía que algo andaba mal, que yo no quería contarle aún, pero el decir eso le dio una idea de por dónde empezaba el problema. Meses más tarde, cuando la bomba explotó, me dijo que nunca quiso preguntarle a nadie porque quería escucharlo de mí.
—Te quiere —afirmó interrumpiendo el silencio—, ¿lo sabes, no?
—Sí, sí. Lo sé.
Eso no implicaba que tuviera mis inseguridades al respecto.
Nick y yo entramos en el edificio, nos encontramos con Mike -quien se queda de guardia en las noches- y lo saludamos de lejos. Sin embargo, me detuve cuando me nombró.
—Shaun vino preguntando por usted —informó—. Dijo que esperaría a que llegara.
—Gracias, Mike.
—Por nada, señorita.
Cuando me giré y regresé con Nick, éste suspiró apretando el botón del ascensor.
—Espero que todo esté bien.
—Yo también.
Subir hasta nuestro piso se nos hizo infinito. Me preocupé porque generalmente Shaun siempre avisaba cuando iba a venir así lo esperaba, que llegara de sorpresa era nuevo.
Al salir, lo encontramos apoyado en la puerta del departamento hablando por teléfono. Apenas nos vio, colgó y sonrió en mi dirección.
—¿Tardamos mucho? —cuestionó Nick.
—No, solo media hora —contestó sarcástico haciéndolo reír, luego me dio un casto beso en los labios—. Perdón que vine así, quería hablar contigo.
—Me encerraré en mi cuarto —informó Parker tras abrir la puerta. Ingresé última, cerrando la puerta con llave detrás de mí.
Shaun y yo fuimos a la sala, donde tomamos asiento frente a frente en el sofá. Podía ver los nervios del asiático en sus gestos, se secaba el sudor de las manos en el pantalón y sus mejillas tenían un tono rojizo fuerte. Quise esperar que hablar primero, pero solo entreabría los labios sin poder formular una palabra.
—¿Estás así por lo de Constance? —pregunté. Shaun fijó sus ojos en mí algo sorprendido y asustado— No estoy enojada, si eso es lo que te preocupa.
—¿En serio?
—¿Por qué me enojaría? —reí— Sí, es tu ex y muy bonita, pero no me has dado motivos para dudar de ti. Aunque debo admitir que por un momento me pregunté qué sentiste al ver el testamento que te escribió.
—Tenía miedo de cómo eso te hiciera sentir a ti —confesó tomando mi mano—. Contigo me di cuenta de que no se trata de cuánto tiempo estás con esa persona, sino de la conexión. La que tenemos es una que jamás he sentido antes, pero no sé si tú la sientes también.
—Si fuera así, no estaría considerando en invitarte a pasar navidad conmigo y mi loca familia —yo confesé sintiendo mis mejillas arder. Ambos ya sabíamos que Acción de Gracias sería una celebración con el cast y equipo de producción porque los tiempos no alcanzaban, pero Navidad y Año Nuevo eran otra historia.
Shaun sonrió ampliamente.
—Me encantaría conocer a tu loca familia.
Lo que ven podría catalogarse como dos enamorados empedernidamente. Uno soñaba con un futuro feliz, la otra prefería no pensarlo porque tenía miedo de lo que podría pasar. Nos queríamos; ¡Dios, nos amábamos! Pero también éramos consientes de que todo conlleva decisiones.
—¿Qué te dijo Hope? —pregunté cambiando de tema— ¿Te sugirió algo?
—Algo que —suspiró profundamente—... aún no queríamos hacer.
—Confirmar la relación —él asintió—. ¿Crees que funcionará?
—Ya no le prestarían atención a ella —contestó—, pero todo recaería sobre nosotros.
Y con las decisiones aparecen las consecuencias. Shaun y yo esa misma noche tomamos la decisión de "hacerlo oficial" a través de las redes sociales; eso hizo que las acciones de Constance fueran ignoradas pero, a su vez, provocó que los ojos cayeran sobre nosotros. Nuestros posts se llenaron de comentarios, tanto lindos como extremadamente horrendos. Tratamos de ignorarlos y seguir con nuestras vidas tranquilamente, pero la bomba aún no había estallado. Al menos no hasta el día en el que celebramos Acción de Gracias. 

Cortito, lo sé, pero en el próximo se arroja una bomba! 

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Cortito, lo sé, pero en el próximo se arroja una bomba! 

Qué creen que será? Leo sus teorías!

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-Melany

Las dos caras de Roma.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora