Otra Versión De La Historia.

«57»

[Avery Snape]

—Buen día, chicos —saludo a Pansy y Luke cuando llego al sillón donde siempre estamos en las mañanas antes de salir.

—Buenos días, serpiente durmiente —me saluda Luke, con diversión.

Aquí falta algo.

Alguien, mejor dicho.

—¿Dónde está Draco? —pregunto, frunciendo el entrecejo— Un momento, Maddie tampoco está.

—Ah, él se fue al Gran Comedor hace un rato —responde Pansy, con una mirada que me dice que tampoco sabe el por qué.

—Maddie fue con él, no sé por qué la verdad —responde Luke, al ver mi confusión.

—Pero siempre subimos juntos —murmuro— ¿Por qué se fueron sin nosotros?

—Están molestos —dice Pansy— O por lo menos eso parecía.

—¿Quieres que sea directo o dulce? —cuestiona Luke.

—Primero, tú nunca eres dulce —sonrío porque sabe que tengo razón— Segundo, eres mi mejor amigo, siempre quiero que seas directo aunque sea feo lo que tengas que decir.

Él abre la boca sin decir absolutamente nada.

—¡Soy tu mejor amigo! —se impacta.

—Luke, concéntrate —le doy un golpe en la mejilla izquierda que lo devuelve o lo lleva a otra realidad.

—Claro —sacude su cabeza— Si, Draco está molesto contigo, pero no sé por qué. Y tampoco sé por qué Maddie decidió irse con él.

Entrecierro los ojos.

—Es raro —los vuelvo a poner normal— ¿Les hicimos algo?

—Les hiciste, porque a mí me hablaron bien hace un rato —me apunta a mí, echándome toda la culpa.

—¡Oye! —mascullo.

—¿Qué pasó con ser directo? —sonríe con arrogancia.

—Idiota —musito.

—Tarada —contraataca.

—Estúpido.

—Babosa.

—Patán.

—¿Qué les pasa? —pregunta alguien detrás de nosotros.

Ambos nos separamos del respaldo del sillón y nos giramos a ver a la persona que habló.

—Theo —sonrío.

—Nott —saluda Luke— Así nos llevamos nosotros.

—Ya veo —sonríe con humor— ¿No van a desayunar?

Nosotros asentimos al darnos cuenta de que todos ya han bajado.

—¿Vamos juntos? —nos invita.

—Claro —acepto levantándome del sillón, Luke detrás de mí.

Comenzamos a caminar fuera de la sala común, hasta que Luke me susurra algo que no escucho.

—¿Qué dices? —susurro de vuelta.

—Que la actitud de Nott es rara, jamás nos ha hablado en los tres años de Hogwarts —vuelve a susurrar.

—Yo lo veo normal, digo, yo hablo así con él, normal —me encojo de hombros.