Henry Creel
Me encontraba en mi habitación pensando en ese tal Nikoley Kuznetsov amigo de Lilith, se que tiene algo con ella pero ella no lo quiere.
Y al parecer el no lo entiende, así que si no lo entiende por las buenas yo se lo daré a entender.
- ¿Y ahora qué?, Hasta acá huelo tu miedo - dijo una voz profunda para después materializarse una gran silueta.
- Cállate, Yo no tengo miedo - respondí.
- Por favor somos uno, puedo sentir lo que tú sientes y sientes miedo, miedo de que el ruso te quite a tu amada o ¿Me equivoco? - pregunto.
- En lugar de burlarte, mejor ayudame ¿no crees? - propuse.
- Hasta que tienes una buena idea en tu cabecita, dime, ¿Que quieres que haga? - Pregunto con algo de malicia.
- Atormentalo, hazlo sufrir, quiero que sepa que no se debe meter con lo que me pertenece - ofrecí.
- A tus órdenes Creel - dijo para después desvanecerse.
Nikoley Kuznetsov
- Tu chico me odia Lilith acéptalo - le dije de manera obvia.
- No te odia solo que le cuesta socializar es todo, no debes de preocuparte - dijo tratando de tranquilizarme.
- ¡¿NO SE DEBE PREOCUPAR?!, casi lo mata Lilith - se dirigió a su hermana.
- Bueno ya no importa, pero no esperes que le hable bien después de que casi me rompe las costillas, de verdad quiero ser amable pero el lo complica todo - dije viendo a Lilith.
- ¡DEJA DE CULPARLO DE TODO, TU IGUAL COMPLICAS LAS COSAS! -Grito Lilith saliendo de la habitación.
- No Lilith espera - salí de tras de ella.
Estaba siguiendola cuando su silueta empezó a crecer hasta formar a una criatura muy alta con aspecto de babosa.
- ¿Li~lith? - pregunte asustado, que diablos está pasando.
- ¿Lilith?, Lilith se ha ido y es momento que tú igual pero no te mataré en estos momentos, no, sería muy fácil - dijo para después desaparecer.
Estaba perplejo no sabía que hacer.
Hasta que la voz de mis padres sonaron por todos los pasillos.
- Nikoley, vamos se nos hace tarde - dijo la voz de mi madre.
Cuando volteé ahí estaba ella pero ya no estaba en el laboratorio estaba en mi antigua casa de Rusia.
- Vamos Kuznetsov - se acercó mi padre.
Me estaba dirigiendo hacia ellos cuando me dijeron algo.
- No te acerques, eres un monstruo, incendiaste todo, y tú madre murió por eso - dijo.
En ese momento todo estaba cubierto en llamas.
No esto no puede estar pasando.
- Fue un accidente padre lo juro - me defendí acercándome.
- No tu tienes la culpa - me señalo.
Si mano cambio repentinamente a una alargado con garras y con un aspecto de que se había quemado, sus ojos se volvieron blancos y sus venas estaban tan saltadas que parecía que explotarían en cualquier momento.
Lilith Ivanova
Estaba tratando de despertar a Nikoley estaba de pie, pero parecía estar convulsionando.