Capítulo 12: Curandera

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-¿El príncipe corre peligro? _cuestionó exaltada la anciana_

-Presumo que puede tratarse de lo mismo que padecen tantas personas por estos días. El médico real no sabe qué hacer y tanto yo como el rey hemos recorrido todo el reino en busca de una solución, lo que me ha traído aquí como última alternativa tras escuchar en algunos sitios que una anciana y su nieta trabajaban para buscar una solución. Me sorprendió que los rumores llegasen a oídos de los nobles al ser provenientes de los barrios bajos, resultaba algo inaudito, pero al final me decidí a verificar aquellas palabras por mí misma. Y me alegro de haberlo hecho.

-¿Qué desea que hagamos, alteza?

-¿Podría usted enseñar a los médicos capacitados como llevar a cabo este método tan innovador y efectivo? Serán generosamente recompensadas por tan importante labor. Es urgente que sean capaces de curar a los afectados antes de que el número de víctimas exceda a la cantidad de personas capacitadas para actuar.

-No me opongo, pero debo decir... Incluso yo siendo tan anciana tuve muchísimos problemas para idear cada paso de este procedimiento. No puedo garantizar que la efectividad sea la misma para cada uno de los que ejercen la profesión. Y debo admitir, gran parte de esto fue posible gracias a mi nieta. Yo soy muy anciana y apenas controlo mi propio cuerpo. Ella fue una enorme ayuda con los movimientos delicados gracias a su destreza y conocimiento. Como puede comprender, no creo que esa posible para una sola persona aplicar este método.

-Entiendo... _musitó la reina, había muchas cosas en contra para llevar a delante esta solución, por no contar con el asunto de las herramientas y otros medios específicos_

-En el mejor de los casos podría enseñar a los mejores médicos, confío en que ellos sabrán ejercer de maestros para los más inexpertos y ayudar a simplificar la tarea y ahorrar tiempo _explicó la anciana, ayudando con sus palabras a calmar a la angustiada reina_

-¿Usted lo cree? Sería maravilloso poder acabar lo antes posible con todo esto.

-En efecto. Pero antes, debemos aclararle la causa de esta terrible situación. Tras haber interactuado con las primeras víctimas pudimos figurar que la fuente de todo se halla en el bosque, cerca de la fuente del río.

-¿Cómo pudo llegar un problema tan grande desde un sitio tan lejano?

-A través del río, alteza. _explicó ___, ofreciendo una taza de té tanto a la reina como a su abuela_ Después de oír los testimonios, creemos que hay árboles en cuyos troncos crece una especie de hongo blanco, cuyas esporas viajan por el río y contagian los cultivos. Ya sea consumiendo estos o bebiendo el agua del río, las esporas entran al cuerpo y residen en su interior. Esto hace complicado el proceso de la cirugía, porque también depende de qué órgano ha sido afectado. _argumentó, la reina escuchaba atentamente_ Cada órgano requiere un proceso diferente para no proporcionar más daños de los que ya sufre, algunos son muy delicados, como debe saber y se debe ser especialmente diestro para tratarlos adecuadamente sin poner en riesgo la vida del paciente.

-Comprendo. Por ello resulta en difícil... Respecto a la causa del problema... Si los árboles están infectados lo mejor será talarlos o quemarlos...

-Recomiendo quemarlos, pues las raíces también debe estar infectadas.

-Tendremos que trasladas a los civiles a otro sitio en el que puedan continuar con su día a día. _dijo, demostrando su preocupación por los residentes del entorno_ Entonces... Con respecto al caso de mi hijo, ¿hay algo que pueda hacer?

-Desde luego, alteza. Estaremos complacidas de ayudarle. Pero solo somos dos, así que temo que solo una de nosotros puede ir... Así que, ___... _dijo, esta vez refiriéndose a su nieta, quien casi se atrganta con el té al saber lo que su abuela insinuaba_ ¿Me harías el favor de ir en mi lugar al palacio? Yo, por otro lado, comenzaré a enseñar a los médicos capacitados como efectuar el procedimiento.

-¿Esperas que vaya yo? _cuestionó, alarmada_

-Confío en que has asimilado cada palabra de mi escrito, y lo has llevado a la práctica de forma excelente. Si te asiste el médico real podrás llevar a cabo el procedimiento sin problema.

-Pero yo...

-Te lo ruego _dijo la reina, tomando sus manos súbitamente, haciéndola saltar en su sitio. Su preocupación por el estado de su hijo le hacía temblar de temor a perderle y sus manos eran la prueba de ello. ___ no pudo pronunciar palabra al ver los ojos suplicantes, no de la reina, sino de una madre preocupada_

-De acuerdo... Haré todo lo que pueda... _musitó en respuesta, no podía negarse a la petición después de ver aquellos ojos_

Partieron inmediatamente luego de que ___ se aseguró de llevar en su bolsa de cuero todo lo que necesitaba. Se despidió de su abuela y dejó la casa en compañía de la reina y sus leales guardias, quienes las escoltaron hasta las grandes puertas que daban paso a la zona residencial de los nobles. Un carruaje las aguardaba en las proximidades y llegaron en breve a los jardines del palacio. ___ nunca hubiese soñado siquiera con poner un pie en semejante lugar siendo solo una residente de los barrios bajos, y antiguamente una simple esclava. El rey aguardaba por la llegada de su esposa en las puertas del palacio, a su lado, el consejero real. Se sorprendió enormemente de ver a la reina regresar en compañía de una chiquilla con tal apariencia, pero pronto explicó que era la esperanza de salvar a su hijo. Larga fue la explicación que dio la reina al respecto, sin omitir detalle alguno de toda la información recibida, así como el hecho de que se había creado un método innovador que constituía la única solución viable para la situación. La peli___ fue bien recibida cuando las explicaciones se dieron por finalizadas. El rey le permitió descansar el resto de la noche y usar todo el tiempo posible del día siguiente para preparar todo con el fin de procurar el éxito total de la cirugía que se aplicaría a su hijo.

Step by Step [Prince/PG!Kokichi Ouma x Plebeian!Reader] © RoseSanae55Donde viven las historias. Descúbrelo ahora