Diácono de orejas caídas ABO

Capítulo 21

Cambié el número y envié un mensaje.

-"Dame la dirección y te recogeré".

Yan Yi tiró de las comisuras de su boca, acarició suavemente el pelo gris claro con pequeños tirones y pedaleó sobre las vigas del taburete alto. Sus ojos estaban angustiados y miraron a la pantalla aturdido.

Lu Shangjin se puso en contacto con él con un número diferente y le dijo que lo recogería. Incluso cuando estaban enamorados, Lu Shangjin nunca había mostrado tanta paciencia para persuadirlo.

-"¿Qué has hecho antes?" Yan Yi bajó la cabeza, se cubrió los ojos y las yemas de sus dedos temblaron en la pantalla. Sus labios rosados estaban ligeramente abiertos y sus pequeños dientes blancos mordían sangre en sus labios.

-"Estoy en el bar en el que solíamos quedarnos".

En una breve frase, me quedé en la columna editorial durante tres minutos antes de decidirme a enviarla.

Después de un breve silencio, Lu Shangjin preguntó: "Nos hemos quedado en muchos bares. ¿Cuál?"

Incluso un poco de luz en los ojos de Yan Yi se apagó, y miró hacia abajo al dedo anular de su mano derecha.

Me pregunto si realmente lo hago. Tal vez la gente común realmente no recuerde una cosa tan prescindible.

En el bar crujiente, hay una pared llena de postales dejadas por parejas. En realidad, esto es solo un truco para que los comerciantes ganen dinero y trucos, pero para los amantes que solo se quedan aquí una vez en sus vidas, una postal todavía puede convertirse en un eco indeleble.

Entre los muchos tipos de postales, Yan Yi todavía veía la postal del paisaje descolorido de un vistazo.

Hay una línea de palabras escritas en la postal, marcas ordinarias de bolígrafo, pero es extremadamente nítida y hermosa:

Te quiero hasta el final de tu vida.

Es arbitrario, pero es lo mismo para los adolescentes.

En ese momento, finalmente regresaron de la vida del Triángulo Dorado. En el alféizar de la ventana del ático llamado bar en ruinas, dos adolescentes jóvenes y enérgicos se convirtieron en el amor más agradable de sus vidas.

En ese momento, el anillo todavía estaba aro en el dedo anular, pero la relación íntima había disminuido, como un anillo que ya no era brillante, lleno de cicatrices.

Esa noche, Yan Yi recibió una promesa, un símbolo suave y fuerte de posesión, un anillo que todavía se negó a despegar y un favor que no esperaba perder.

Como una ceremonia, solemne y romántica.

Todavía se ha convertido en un reflejo del colapso en el agua. No se puede sostener y romper limpiamente.

De hecho, Yan Yi sabía que no esperaba que Lu Shangjin adivinara en qué bar estaba pensando, al igual que saber que Lu Shangjin no podía adivinar que quería tocar el piano.

Solo quería confirmar una vez si dejaría algún rastro en el corazón de Lu Shangjin una y otra vez en su sueño.

Olvídalo. Olvídame si lo olvidas. Yan Yi respondió.

-"¿Estás enfadado? No habrías hecho esto antes. No pierdas los estribos. Lu Shangjin parece estar muy inactivo hoy en día, y cada noticia se devuelve tan rápidamente.

Yan Yi apretó el teléfono móvil y lo dejó ir débilmente.

¿No era así antes? Ya no espera que sí mismo, que ha sido roto muchas veces, sea recogido y escrito juntos. No importa lo duro que trabaje duro, no puede compensar las esquinas rotas.