TENEMOS QUE HABLAR

233 24 5
                                    



JULIO

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


JULIO


EMMA

Llegué a la casa un poco tarde, solo hice entrar por la puerta del aparcamiento para entrar a casa. Todo estaba en un total silencio que hasta yo me asusté. Cuando entré a la casa mi madre estaba sentada en la galería delantera con su pijama puesta y una taza que al parecer era té, entré muy tranquila y sin nada que decir.

—Buenas noches. —susurré sonriendo. Ella se quedó observandome dudosa.

—Buenas noches cariño. —dijo muy calmada. Hubiese sido en mis tiempos de colegiala y me hubiese agarrado de los pelos, pero la gran noticia aquí es que mi madre nunca luchó conmigo a la hora de llegar a casa. Nunca salía y tampoco me divertía mucho. Siempre había sido la típica hija aburrida de una abogada influyente.

—¿Tu despierta a esta hora?. —murmuré sentándome con ella. Aunque no era tarde y apenas eran las ocho casi nueve, mi madre tenía una regla estricta a la hora de irse a dormir. Ya a las ocho y treinta estaba en el país de las maravillas y nadie sabía nada de ella.

—Te esperaba a ti. —formuló sonriente. Tenía el ipad con ella y no se que rayos miraba a través de ella porque cuando fui a dar un vistazo quitó sea lo que estuviese viendo y se tensó. Al cabo de segundos me sonrió como si no hubiese ocurrido nada.

—¿Por qué me esperabas?. Nunca lo haces. —dije siendo honesta. Hubo un silencio incómodo donde ella se quedó observandome por varios segundos que yo encontré minutos. La miré a los ojos tratando de descifrar qué pasaba por su cabeza, pero sus ojos no denotaban nada, así era mi madre neutra a la hora de hablar cosas importantes. Lo había aprendido desde pequeña, cuando yo estaba feliz, ella también lo estaba, cuando estaba triste ella también lo estaba pero había momentos donde no descifraba su rostro y siempre venía con algo opuesto.

—¿Qué hiciste durante el día?. —preguntó observandome en cada momento. No entendía nada, mi madre no era así de detective. Carraspee torpemente y sonreí. Tienes que mentir muy bien para que te crea.

—Estuve tomando el aire, fui al museo que te conté. —dije acomodándome en el asiento.

—¿Te tomó todo el dia en eso?. —preguntó dejando el ipad a un lado. Estaba actuando raro. Yo fruncí el ceño, había aprendido a hacer independiente desde que me mudé a Francia.

—No me tomó el día. —dije clara al hablar. —pero creo que tengo la suficiente edad para decidir que quiero hacer ma. —le dije poniéndome de pie.

—Cariño siéntate. —dijo en un tono bastante raro.

—¿Ahora qué quieres?. —le dije abriendo los brazos. —Estas bastante rara, ¿te ocurre algo?. —le pregunté. La vi tragar saliva.

ERES X PARA MÍ  #1 [NUEVA VERSION]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora