Capítulo 34.- Solución

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Abro los ojos con dificultad

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Abro los ojos con dificultad. Mi cabeza aún sigue dando vueltas, aunque en esta ocasión no son tantas como al inicio y parece que, a medida que pasan los segundos, va disminuyendo hasta quedar en un simple recuerdo.

Miro a mis alrededores y puedo ver cómo el médico del instituto está dándome la espalda escribiendo en unas hojas. Supongo que son informes, así que sigo mirando por si hay alguien más, en vano.

–¿Dónde están todos? –suelto de la nada, llamando totalmente su atención y automáticamente acercarse a mí.

–Oh, estás despierta, le había dicho a los demás que se salieran hace un rato atrás, ¿quieres que entren?

Lo pienso unos segundos mientras me apoyo en la camilla hasta sentarme con un poco de dificultad debido al cansancio y mi cuerpo adolorido.

–Solo deja entrar al director, por el momento.

Me mira extrañado, aun así, no interpone ningún problema dado que yo mando en este aspecto. Así que, en tan solo unos pocos minutos, me encuentro frente al director, a solas, para al fin hablar del dichoso tema de una vez por todas.

–¿Qué le pasará a Ingrid? –pregunto, seria.

–Hay dos cosas que quisiera aclarar, en primer lugar –se sienta en la silla delante de mí y respira hondo, tratando de hablar lo más pacíficamente posible-. Las amenazas que habéis pasado tú y Mar obviamente se han tomado mucho en cuenta y por ello solo pensábamos expulsarla del instituto, sin embargo...

Veo en su rostro cómo intenta seguir sin éxito alguno, poniéndome por cada segundo más nerviosa.

–¿Sin embargo? –le animo a proseguir.

–Que hayas hecho un directo que todo el mundo ha compartido, visto y oído hasta llegar a nosotros... Sí que es verdad que, por una parte, hemos podido ver con atención todo lo que ha hecho y corroborar la decisión tomada, pero por otra no nos quedará más opción que añadir a la policía en el asunto dado que se trata de amenazas, acoso e incluso maltrato físico y hasta psicológico. También, según la ley, por haber grabado y mostrado su rostro sin su consentimiento puede haber hasta delito de parte tuya.

¿En serio? Pero, no debería ser así, a quien han hecho daño ha sido a mí y a Mar, a quien han maltrato ha sido a nosotras, ¿por qué, entonces, que haya demostrado sus actitudes me pueden poner hasta de delito a mí?

–O sea, ¿lo que me estás queriendo decir es que ahora encima será mi culpa y tendré un delito?

–Solo por ese tema, ya que la ley aclara que, en caso de que no seas declarada culpables, puedas tener una vida tranquila después de ello. Es más bien por protección, por si hay algún caso así, sé que este no lo será, pero te la pueden jugar por ahí si no llegas a un acuerdo amistoso con Ingrid.

–Entiendo.

Suspiro y me quedo con mi vista fija en el suelo, pensando en mi siguiente movimiento. ¿Cómo se supone que voy a hablar de forma "amistosa" con esa? Digo, no va a hacerlo y seguro que conseguirá saber la ley esta e intentará enfocarlo para el bien de ella.

Anónima ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora