Capitulo 11. Al parecer la falta de felicidad te nubla las neuronas.

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🖤

Damon

Camino a la cocina mirándola por última vez, oigo la puerta principal y se que es Eris ya que le pedí que comprara ropa para Alaska, le di dinero pero le dije que no le dijera. La terca ya no iba a usar nada de la ropa que tenía solo por lo que había dicho.

Obviamente mentí, desde que esta Alaska en mi vida le encuentro un sentido a esta pero obviamente no iba a decirle eso a mi madre.

Estaba seguro de que mi madre iba a hacer miserable la vida de Alaska así que tuve que mentirle.

Que mierdas hago por el amor.

El teléfono suena sacándome de mis pensamientos, lo tomo y lo pongo en mi oreja.

- Diga..

- Querido Damon...

- ¡¿Que mierda?! ¡¿Como es que estas vivo, Osiel?!

- ¿Creíste que moriría por solo un disparo?

- Te dispare en el puto corazón, obviamente pensé que morirías. - Escucho como ríe y solo quiero quitarle la felicidad a puñetazos.

- Así que tienes novia..

- Ella no es mi novia.

- Entonces no te importara que la mate ¿cierto?

- ¡No te atrevas a ponerle un dedo encima! Jamás nos encontrarás.

Ríe. - ¿Enserio creíste que escapar era la mejor opción? Tengo ojos en todos lados, recuerda eso, Damon. - Cuelga y yo arrojo el celular lo más fuerte que puedo.

Llamó a Ian. - Ian escúchame bien, necesito que des una orden para que los hombres protejan la casa.

- Ya lo hacen.

- ¡Pues consigue más!

- Bien, gruñón. - Cuelgo pensando en la ladrona, ella es fuerte pero no se de lo que Osiel sea capaz de hacer para llegar a ella.

Por primera vez tengo miedo a que me quiten a mi ladrona. Y peor ahora que estamos peleados. Escucho como Eris baja y sale de la casa.

Oigo pasos a mi oficina y solo actúo de lo más normal cuando ella entra con un lindo top gris con un short del mismo color.

- ¿Qué necesitas?

- Quiero hablar contigo. - Ella pasa y se sienta en el pequeño sofá que está a un lado de mi escritorio.

- ¿De que quieres hablar? - La miro, parece indecisa pero habla.

- Quiero irme. - Dice fuerte y solo la miro. - Se que esto de estar secuestrada trata de no poder estar en casa pero lo necesito.

- No puedo dejarte ir..

- Pero...¡¿por qué?! ¡No me necesitas y lo único qué haces es insultarme o follar conmigo como si fuera una de tus prostitutas!

- ¡Alaska basta! tú no eres una "prostituta" con la que solo pierdo el tiempo. Te estoy protegiendo.

- ¡¿Proteger de que? Me has dicho que me proteges pero no me das otra explicación. ¡Me canse! - Se levanta furiosa.

- ¡Van a matarte y créeme que es lo último que quiero en este momento! - Me levantó ya harto de oírla gritar y reclamar. - No estoy en condiciones para perderte, joder Alaska, es muy obvio que me encantas pero al parecer la falta de felicidad te nubla las neuronas.

Se queda completamente estática en su lugar mientras la miro, mi emociones me controlan en este momento pero no miento. Ella me encanta desde la primera vez que la vi.

- Eres un... imbécil. - Me quedó sorprendido de su reacción, no esperaba algo pero esto fue sorprendente. - ¡Me dices cosas bonitas pero estoy segura que vas a ir con cualquiera a juzgarme o criticarme! No estoy para seguir tus malditos juegos de primaria.

- No son juegos Alaska, si, tal vez pude tirarte mierda con mi madre pero necesitaba hacerlo para que ella no te molestara. Mi madre es un gran grano en el culo cuando se lo propone.

- Damon, ya no quiero estar aquí, ya no quiero estar contigo. Si, tal vez una parte de mi te desee pero otra necesita tiempo.

- No si sepas pero esto de secuestro significa estar encerrada en un lugar desconocido en el cual no quieres estar. Tal vez te di demasiado cuando no lo merecías.

- Damon..

- Vete, a donde quieras pero cuando te hagan daño no recurras a mi. - Sale del cuarto y oigo cómo sube las escaleras. Me tiro en mi silla y me masajeo la sien.

Tenía más cosas que decirle pero sentía que era muy rápido todo. Si ella quiere irse la dejare pero tendré que irme yo también y olvidarla aunque no quiera.

Esta chica me embrujo porque no había sentido esto tan fuerte con alguien más.

Maldita ladrona, te oído pero te deseo a la vez y eso me confunde como no tienes idea.

Alaska

Cierro la puerta de mi habitación y me recargo en ella. Zeus lame mis lágrimas y se recuesta en mi regazo.

Estoy sorprendida y confundida a la vez con todo lo que me dijo Damon. Tal vez él tenga razón, él me dio demasiado cuando no lo merecía y aún así le gusto.

No sabía que en más de una vez mi vida correría peligro pero ahora puedo admitir que por el, mi vida puede correr peligro todo lo que quiera.

Sonrío por el estúpido pensamiento, después de decirle imbécil me sincero conmigo misma.

No sé si me gusta pero de algo estoy segura, si no estoy con él no estoy feliz. Y tal vez la falta de felicidad si me nubló las neuronas.

Me siento demasiado cansada para seguí discutiendo en mi cabeza así que me levanto y junto a Zeus me recuesto en la cama.

Cuando estoy apunto de dormir un fuerte ruido suena desde la parte de abajo, fue un disparo.

Me levanto y tomo un cuchillo que tome desde que llegue a la casa, se que en las películas lo primero que debes hacer es NO ir al peligro pero al parecer eso me vale un kilo de pepino porque bajo con el cuchillo a la planta baja.

No hay ningún ruido, me paro en seco al ver una sombra.

- Damon, esto no es divertido. Sal ya. - Advierto sujetando el cuchillo pero nadie responde y empiezo a preocuparme.

- No soy Damon pero esto si se pondrá divertido. - Me ponen una tela cubriendo mi boca y mi nariz, intento usar el cuchillo pero es en vano, la droga hace que mi cuerpo se debilite y poco a poco pierdo la consciencia.

🖤

Nota de la autora:

Intento publicar varios capítulos ya que ya no podré subirlos muy seguido debido a mis clases

Asu máquina 🤭

Pobrecita de mi Alaskita 💔

Se viene fuerte y creo que van a odiarme un poco 🥲

GRACIAS POR LAS 10k LEIDAS ✨💕

Nat 🦖

Nat 🦖

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OBSESIÓN ✔︎ (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora