ᴍʏ ᴛᴇᴀʀꜱ ʀɪᴄᴏᴄʜᴇᴛ | ᴋᴏʟ ᴍɪᴋᴀᴇʟꜱᴏɴ

Capítulo 1 🌼

Cassie:

Recibir el llamado de Damon después de años sin vernos me sorprendió demasiado, no quedamos siendo muy amigos, solo nos toleramos por cosas que pasaron entre ambos. De hecho intente matarlo por arruinar un día de campo con Stefan, y mi mejor amigo estuvo a punto matarlo porque el pelinegro casi me rompe el cuello. 

Tendremos una muy buena relación ahora con esos antecedentes.

Solo voy a Mystic Falls porque un híbrido loco que ni siquiera he visto en mi maldita vida, secuestro a Stefan. O más bien dicho mi querido amigo se entrego a cambio de salvar a su hermano de la muerte por mordida de un hombre lobo.

Stefan Salvatore siempre pensando en ayudar a los demás, aunque él tenga que ir al infierno.

Me bajo del deportivo rojo, mis tacos resuenan en la entrada de la residencia Salvatore. Toco un par de veces, me abre una chica castaña que solo había visto en un retrato antiguo.

—¿Qué mierda haces tú aquí? —pregunto algo molesta, retrocede por instinto—. Se supone que Kath...

—Soy Elena, Elena Gilbert —me interrumpe, traga saliva—. ¡Damon, hay alguien aquí!

—Oh, lo siento —susurro—. Así que tu eres la famosa Elena —la miro detenidamente—. Stefan omitió el detalle de que eres una fotocopia de Katherina.

El vampiro aparece a la velocidad de un rayo, me sujeta del cuello y me estampa contra la pared, si fuera otra situación esto me parecería incluso sexy. Sus labios casi rozan los míos y su ceño esta fruncido, siento su aliento en mi rostro.

—Auch —hago una falsa mueca—. Que gran recibimiento, menos mal tu me invitaste a tu casa.

—¿Zanahoria? —pregunta confundido, ruedo los ojos por su apodo—. ¿Cómo llegaste tan pronto?

—Te dije que estaba cerca, idiota.

Me suelta el cuello, le doy una falsa sonrisa antes de seguirlo hasta el sofá. La castaña se sienta junto a él, no me quita la mirada de encima, que fastidio que ambos me miren.

—¿De dónde se conocen? —pregunta con curiosidad—. ¿Conoces a Stefan?

—Es mi mejor amigo desde los diecisiete, ahora tengo más de cien años —le sonrío, me mira asombrada—. Y mi corazón sigue latiendo —le tiendo la mano—. Cassandra Lombardi.

—Presumida —espeta Damon, le saco la lengua en un acto infantil—. Es solo una simple bruja con el don de la inmortalidad.

—Esta bruja, puede clavarte una estaca en el corazón y adiós Damon —me cruzo de brazos—. Dime que pasó con el vampiro que tiene complejo de héroe.

—Klaus Mikaelson es el híbrido original que se llevo a nuestro querido y amado Stefan —comienza a hablar, lo miro mal—. Solo sabemos que son una clase de pareja de crimen, bebe sangre de humanos.

—Dime que no volvió a ser el destripador —suplico, desvía la mirada—. ¿Alguna pista?

—La Sheriff Forbes nos dio otra ubicación —Elena me entrega un papel—. Memphis.

—Otra pista, falsa...

—Cállate —le digo a Damon—. No pierdo nada con ir a ver —me mira mal—. Stefan siempre pone elige a todos sobre él, y yo siempre lo escogeré antes que a los demás.

—Cassandra...

—Él me salvo, más de una ocasión —lo interrumpo—. Y tú solo me arruinaste, ¿lo recuerdas? Verano de 1926 —sus ojos se cristalizan levemente—. Veo que recuerdas habernos roto el corazón, Damon.