Capítulo 4 🌼

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Cassie:

Al día siguiente estamos en una tienda de ropa, bebiendo champagne mientras Rebekah se actualiza con la moda. Klaus ofreció comprarme lo que quisiera, llevo un par de vestidos y zapatos. Me he divertido mucho ya que los chicos tienen cara de fastidio, no les agrada salir de compras, y yo me he dedicado a molestarlos.

—Creo que le falta una parte —alega la rubia.

—No, Bex —le respondo, sale del probador—. Te queda hermoso.

—¿Las chicas del siglo XXI se visten como prostitutas? —pregunta, la miro ofendida—. A mi me veían feo cuando usaba pantalones.

—Tu los usaste para que en la actualidad no usaran nada —le responde su hermano.

—En la actualidad se están borrando los estereotipos en ambos géneros, el mundo esta algo más liberal —le digo a la rubia—. Puedes hacer lo que quieras sin importar que seas mujer, tenemos más derechos.

—Eso me agrada —me responde, hace una mueca—. ¿Y esta música? Suena como un accidente tranvía.

—Te puedo enseñar música mejor, agrega Taylor Swift a tu lista —bebo un sorbo—. Tiene canciones de rodo tipo.

—¿Terminaron?

–¿Por qué estás tan gruñón? —pregunta la rubia.

—Es su estado natural —susurro—. Creo que nació de ese modo.

—Necesitaba algo tuyo para que mi bruja supiera el por qué mis híbridos mueren. Tu collar y lo perdiste.

—No lo perdí, solo no aparece desde hace noventa años.

—Es una señal del destino para que dejes tu idea loca de esos bichos raros que quieres crear.

—¿Bichos raros? —escupe ofendido—. Soy uno de ellos.

Me encojo de hombros y sonrío de forma angelical.

—Si te sientes identificado con el término es tu problema.

Stefan sale a tomar aire y me quedo con los hermanos originales. Decidimos irnos al bar al ver que no aparece, después de todo vendrá porque estoy yo. La bruja intenta contactar a quien maldijo a Klaus, me ofrecí a ayudarla, pero el hibrido me lo prohibió, genial. Stefan aparece al rato, justo cuando Rebekah le da su mano a la bruja para localizarlo.

—¿Está buscando el collar? —pregunta Stef despreocupado, a mi no me engaña.

—Puedo sentir algo —habla la bruja luego de un rato, mira a mi amigo disimuladamente—. Apareció, veo a una chica con sus amigas...

—Una chica muerta y amigas muertas si no me devuelven mi collar —interrumpe Bex molesta.

—Debo volverme a meter para ver detalles, necesito tiempo y espacio —mira a Klaus—. Estorbas mi magia.

—Y mi paz —agrego yo.

—Podemos esperar.

—Eso no fue lo que dije...

—Klaus, solo vamos a dar una vuelta —interrumpo a la bruja, coloco una mano en el hombro del híbrido—. Te dejaré hacer de las tuyas, drenar a alguien o que se yo.

Al volver a la bodega hacemos una parada rápida, mi amigo me compra un trozo de pizza con un jugo para que me alimento. Una vez que terminan de beber sangre de humanos, Stefan se va, según Klaus a escribir un nombre en la pared, yo no lo creo.

En eso recibo un llamado de Damon, y salgo a contestar.

Hasta que contestas —me regaña—. A estas alturas pensé que el híbrido bastardo te había asesinado por dejarme ir.

ᴍʏ ᴛᴇᴀʀꜱ ʀɪᴄᴏᴄʜᴇᴛ | ᴋᴏʟ ᴍɪᴋᴀᴇʟꜱᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora