ᴍʏ ᴛᴇᴀʀꜱ ʀɪᴄᴏᴄʜᴇᴛ | ᴋᴏʟ ᴍɪᴋᴀᴇʟꜱᴏɴ

Capítulo 8 🌼

"ᴅᴏɴ'ᴛ ꜰᴏʀɢᴇᴛ ᴍᴇ ᴋᴇᴇᴘ ᴍᴇ ɪɴ ʏᴏᴜʀ ᴍᴇᴍᴏʀʏ, ʟᴇᴛ ᴍᴇ ʙᴇ ʏᴏᴜʀ ꜰᴀᴠᴏʀɪᴛᴇ ᴀɴɢᴇʟ"

Cassie:

Anoche me dormí con Kol, pero desperté un par de horas después y no estaba, solo había una nota que indicaba que volvería a la noche para que nos fuéramos.

Me cambie de habitación para dormir con Stefan, pero resulta que el vampiro no llego a dormir. En la mañana desperté asustada debido a una pesadilla o tal vez una visión.

Vi a los hermanos Gilbert intentando atacar a Kol, él se defendía pero no era suficiente. Casi podía sentir el calor del fuego mientras lo veía quemarse.

Por eso, prefiero ser precavida. Estoy afuera de la cada de los Gilbert haciendo un hechizo, siento mi nariz y ojos sangrar, pues es uno de esos hechizos difíciles y agotadores, espero que funcione por si las cosas salen mal.

Una vez que finalizo marco el número de Kol por milésima vez sin obtener respuesta. Debo admitir que estoy preocupada, sé que es un original y puede cuidarse solo, pero eso no evita que me preocupe por él.

—Sé que dijiste que estarías ocupado, colmillitos —suspiro—. Pero por lo que más quieras, no confíes en los Gilbert.

Finalizo la llamada y recibo un mensaje de Stefan para que acompañe a Klaus mientras cuida a Damon, pues este sigue bajo la hipnosis de mi novio y tiene ganas de matar a Jeremy.

Al llegar a la mansión los saludo rápidamente y bajamos al sótano donde esta mi ex novio encerrado en una celda luego de que Stefan lo desangrara para debilitarlo.

—¿Viniste a romperme el cuello? —cuestiona desde adentro, suena cansado—. Porque desperté sintiéndome muy pacifista. Estoy seguro de que puedes liberarme.

Stefan se limita a lanzarle un fino tubo con sangre por la rejilla de la puerta.

—Hombre, ¿enserio? —se queja—. Prácticamente estoy seco. Podría ser una bolsa, hermano. Tengo sed.

Le entrego la botella de agua a mi mejor amigo y este la deja en la rejilla, hasta el momento Damon no se ha dado cuenta que estoy aquí.

—Eso no es lo que tenía en mente.

Se queja mientras se levanta del suelo y viene a tomar la botella. En ese momento Stefan se hace a un lado dejando que nos vea.

—Hola, amigo —saluda Klaus.

Intento no sonreírle a mi ex novio, pero fracaso en el intento.

—Hola, vampiro malo.

—Cass —pestañea varias veces—. Por un segundo creí que te estaba imaginando.

Me encojo de hombros.

—Soy real.

—Bien —susurra, mira al híbrido con desprecio—. ¿Qué demonios hace él aquí?

—Te estoy cuidando —responde él—. Traje a Kessy para que no nos peleemos.

—Denle una muestra de sangre cada dos horas, para que no se seque —pide Stefan—. Si recupera mucha fuerza o si los molesta, desángrenlo otra vez.

—Ley del silencio, ¿no? —dice Damon mirando a su hermano—. ¿Es lo mejor que puedes hacer? Sigue molesto porque según él estoy jugando con Elena.

—Yo lo descubrí escapando de la cama de Rebekah —informa el híbrido—. Eso me sugiere que ya superó a Elena.

—¿Por qué no disfrutan su convivencia de villanos? —alega Stefan, me mira—. Si te molestan, ponlos a dormir y llámame.