Capítulo 31: justicia.

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Luego de esperar a que Charlotte contara lo ocurrido aquel día del incendio para poder citar a los cuatro culpables y hacerlos confesar, Hoy, tres semanas después de que Char confesara puedo firmar el último papel, y desde hoy Mike Homs, Gabriel Robinson y Steven Hughes están expulsados del Spencer High School.

Entré a la sala de maestros para preguntarle a Carla sobre Madison y tengo una buena propuesta para hacerle, la cual espero que acepte.

-¿Charlotte? ¿Qué se supone que haces aquí?

-Estoy de vuelta, estoy autorizada por el médico.

-¿Es en serio Tayl?

-Sí, pero que conste que yo le dije que esperase unos días más.

-Por cierto, hoy tengo una reunión con Madison en mi casa.

-¿Madison tú sobrina o Madison italiana?

-¡Basta! –Carla se quejaba. –Fue un besito solamente, todavía no somos nada.

-Madison mi sobrina, con la otra también tengo que hablar.

-¿Qué hice ahora? Espera, ¿estás en contra de que tenga algo con Madison, Sofía?

-No, pero si quieres te lo digo aquí.

-Está bien.

-Quiero que dejes de ser la bibliotecaria de la escuela.

-¿Me estás despidiendo? –Todos me miraban con desaprobación.

-No, me llegó la oportunidad de agregar clases de un tercer idioma, así que pensé que no hay nadie mejor que tú para que de clases de italiano aquí.

-¿Es enserio?

-Sí, solo si aceptas.

-¡Claro!

-Pero podrás comenzar recién el próximo año, dando clases a la tarde como lo hace Cameron, y de ese modo tengo más tiempo para elegir un reemplazo.

-Mi novia es bibliotecaria. –Dijo John.

-¿Sí? ¿Cómo se llama?

-Daphne Burns.

-¡Es mi amiga! Ella estaba en mi grupito de la universidad, con las que me junté aquel día. ¡Y no dijo nada!

-Entonces tendré que hablar con ella, diré que ustedes dos la recomendaron.

Charlotte

Entré al aula de octavo y todos me aplaudieron, estaban sorprendidos de que haya vuelto, y sí, me hicieron cientos de preguntas. Y así en todos los cursos.

-¿Qué tal el primer día amor? –Me preguntó Tayl mientras nos cruzábamos en el pasillo al final del día.

-Fue bueno, no me esperaba que me recibieran tan bien. Eso sí, me pasé toda la clase respondiendo sus preguntas.

-Eso significa dos cosas, que de verdad estaban preocupados y que te quieren, y que no tenían ganas de hacer absolutamente nada. –Miranda pasó corriendo por nuestro lado.

-¿Y a ésta qué le pasa ahora?

-Mir ¿Qué pasa?

-Me mandó un mensaje Catherine, me dijo que fuera rápido al hospital.

-Esperemos que no sea nada grave.

-Concuerdo. –Le contesté.

Miranda

Conduje lo más rápido posible hasta el hospital, subí por el ascensor rápido hasta su piso y entré a la habitación.

-¡¿Qué le pasó a ella Catherine?! –Entré gritando, y casi me infarto al ver la cama vacía.

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