La fiesta de cumpleaños de Zhan iba a comenzar. Antes que nada, sus hombres revisaron que no hubiera movimiento en el perímetro y tenían algunas personas en el pueblo cercano para avisar.
Zhan había querido celebrar ese día, pero también quiso hacer algo más.
— Otro trago!
— Jackson... Hoy me embriago con Yixuan. Ustedes no.
— Zhan, solo es el segundo.
Yixuan sacó su arma y disparó al cielo. Los demás le miraron confundidos, pero el golpe que recibió fue de Zhan.
— ¿Eres imbecil? ¿Quieres llamar la atención?
— No me jodas.
Un poco mareado Yixuan tomó la botella entre sus manos. — Solo estoy muy "contento" hoy...
—¿...?
— Wenhan se despertó.
— Sirvan otro trago... Parece que por lo menos hay buenas noticias para alguien.
En seguida todos fueron sorprendidos por Sehun. Estaba encorvado en el asiento por la cabeza gacha.
— ¿Qué mierda te pasa?
Sehun negó y se puso de pie. Haré la guardia. Los ojos inexpresivos del hombre se encontraron con los de Zhan... Así que el pelinegro no le dijo nada.
— Zhan... ¿Puedes dejar ir a Wenhan?
La mirada de Zhan se amargo.
— XuanGe... Eres mi hermano, pero sabes que no puedo hacer eso. Wenhan sabe demasiado.
— Pero... Jefe... Yo le puedo garantizar...
— Yixuan detente! Tu sabes como son las cosas! — Jackson trató de detenerlo.
— A menos que se quede a tu lado. Confío en ti, pero en el no.
— Xiao Zhan! Es demasiado inconveniente! No necesitamos donceles. Las mujeres y los donceles son problemas... Además de que si se llegan a enojar no dudarían en dar información, también se requiere fuerza para protegerlos. No estamos en condiciones de...
Yixuan se había quedado callado.
— Le enseñare a cuidarse.
— Está bien.
— Xiao Zhan! Ni siquiera se puede levantar de la maldita cama...
— ¿Dime que no lo harias si se llamara Yixing?
Zhan brindó. Jackson maldijo sin refutar... Su jefe había perdido la razón.
Cuando se sintió lo suficientemente ebrio, después de haber tomado desde la mañana Jackson acompañó a su jefe a la habitación. No estaba tan ebrio... Pero su cuerpo estaba acalorado. El relajo los musculos de su cuello y al pasar por uno de los pasillos, vio la silueta del rubio yendo hacia la cocina. Llevaba a una bata blanca... Tan tarde y Yibo estaba ansioso. No tenía mucho en lo que usar sus energías así que dormir era un acontecimiento.
— Yibo... — Zhan Musitó.
Jackson vio que su jefe siguió la silueta. Quiso detenerlo pero una mirada de reojo le fue suficiente para saber que no quería entrara.
Ahí estaba el doncel empinando su trasero tratando de alcanzar la nutella del estante. Logró que la bata se levantara lo suficiente para dejar ver un poco de sus muslos y Zhan se recostó justo en la puerta. El estiró su pantalón en su entrepierna...
Yibo empezó a comer de forma desprevenida la nutella incluso embarrandose un poco. Zhan se reacomodo sin hacer ruido alguno...
El doncel lamia la extensión de sus dedos con su lengua roja y al final lo chupó. Le encantaba el sabor del chocolate y le generaba cierto placer que calmaba su ansiedad.
Asi Zhan que aclaró su garganta, realmente pensó que Yibo estaba pretendiendo que no había sentido su presencia ahí. Para el mayor, el doncel estaba actuando con alevosía.
Era evidente que lo estaba seduciendo...
El rubio se congeló y su cara se puso roja cuando se sintió descubierto chupando su dedo embelezado y sus piernas se tensaron sin saber quién podía estar vigilandolo... Estaba oscuro. De repente sintió que la bata era tan corta. El bajo su mano sutilmente y le jaloneo hacia abajo... Sintió su cuerpo tan desnudo que se estremeció.
El trató de mirar de reojo... Y en la oscuridad solo podía ver que era un hombre alto...
La respiración se le entrecorto.
¿Xiao Zhan?