ƻ°ŦɆMⱣ - 34. ŁȺ SɆÑȺŁ

104 25 50
                                    


Después de que todos felicitasen a Joaquín por haber ganado se dirigieron hacía el rizado que los esperaba riendo cruzado de brazos. Su mejor amigo se lanzó encima de él riendo mientras se abrazaban.

- Tenías que haber visto tu cara Osorio, acojonado por no saber dónde estaba

- Os odio, sabéis el miedo que tengo de que le pase algo - le dijo al pelinegro sin que nadie escuchase

- No vá a volver a pasarle nada malo hermano, te lo prometo - prometió mientras ambos miraban al menor 

Éste se encontraba riendo con Romina y Niko sin percatarse de las dos miradas. Emilio amaba verlo reír y ser feliz, eso era lo mejor que podía pasarle.

Pero esos momentos no eran tan felices cómo parecían ó al menos ellos no lo sabían. A unos cuántos metros de allí, en la penumbra se encontraba ese auto. El auto que había intentado atropellar a Emilio y nadie estaba siendo consciente de que estaba allí detenido. Dentro del auto se encontraba un hombre esperando su señal, la señal que iba a hacer que todo cambiase.

Por otro lado, el grupo de Emilio se encontraba cenando a unos pocos metros de allí, todos estaban en la gran mesa mientras seguían realizándose carreras.

- Me voy familia, es mi turno - comunicó el pelinegro

Nikolás se despidió de él con un beso en los labios y con un "vuelve pronto" susurrado en su oído. Todos los miraron sonriendo y Emilio se acercó con él hasta su auto para darle los últimos ánimos.

- Estate tranquilo, no es una carrera difícil. Gana cómo siempre y patéales el culo hermano - ánimo el rizado

- Gracias Emilio, de verdad. Gracias por darme ésta vida

- Nos conocemos desde niños Eduardo, eres mi familia

- Quien diría que acabaríamos aquí y así... Después de lo mal que nos llevábamos - ambos rieron


 Después de lo mal que nos llevábamos - ambos rieron

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Flashback

Era el primer día de colegio de un pequeño Emilio Osorio. Éste obviamente iba obligado, sólo quería quedarse en casa leyendo sus revistas de coches y motos, pero, sin embargo, tenía que ir a clase con un montón de niños cómo él, bueno... Cómo él no, ningún niño de 5 años sabía cómo cambiar un motor a un coche, sin embargo, Emilio ya casi era un experto por la influencia de su familia. Su padre era dueño de un concesionario de coches ó al menos eso era lo que le decía a su familia y obviamente inculcó a su hijo todos sus conocimientos para que éste fuese cómo él de mayor.

Su madre entró de la mano con él hasta la puerta de la clase.

- Mamá quiero ir a casa - dijo Emilio con un puchero

Clock Street // Adaptación Emiliaco // 1° y 2° Temporada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora