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Ꮺ ָ࣪ capítulo O8 𓂃

Tazas de café y té, migajas de pan, envolturas de galletas, barras energéticas a medio comer esparcidos por toda la alfombra oscura de la gran oficina del joven Lee.

Para suerte de Jeno, tiene el apoyo de sus dos amigos para poder terminar todo el trabajo atrasado y por fin disfrutar de su precioso fin de semana.

-Jen, no entiendo cómo es que tienes tanto trabajo, si diario estás en la oficina.

-Todo el trabajo que estamos haciendo es la planeación para la nueva sucursal de la empresa en Ankara.

-Ya decía yo por qué se mencionaba eso tan seguido.

-Así es y, por lo mismo, mi amiga Yaşemin vino para ayudarme. - Dijo con una gran sonrisa. -Ella es la mejor mercadóloga que conozco.

Mark y Jisung intercambiaron miradas, no muy contentos con la sonrisa de su amigo, pero concordaron en no decir nada.

-Pues si tú confías en ella. - Suspiró el canadiense ajustando su saco. -Nosotros también.

-Muchas gracias, Mark, y no tienen por qué dudar de Yas, nos conocemos desde la universidad.

-Lo sé y también sé que por mi bien no puedo acercarme a ella o dirigirle la palabra.

-¿Por qué? - Cuestionó el canadiense.

-Es una larga historia. - Dijo el pelinaranja soltando un suspiro. -En resumen, Yaşemin y Chen tuvieron problemas anteriormente.

Jeno formó una mueca mirando hacia otro lado de la oficina, ya que él no está de acuerdo en los rencores que guardaba su primo. Cuando estaba a punto de opinar, el teléfono sonó robando toda su atención.

-Yo contesto. - Se ofreció Mark, poniéndose de pie a la vez que se dirigía al escritorio. -Oficina del señor Lee.

-Soy el Doctor Jung de la clínica de inseminación.

-Un momento, por favor. - Se alejó del teléfono para hablar a su amigo. -Jeno, te llaman de la clínica.

-¿Cuál clínica?

-Cómo que cuál. - Dijo rodando los ojos. - La clínica de inseminación, tonto.

Jen se sorprendió al escucharlo, pero sin dudar se acercó a contestar la llamada.

-Hola, habla con el señor Lee. - Dijo con voz firme ocultando los nervios y preocupación.

-Señor Lee, disculpe que lo moleste, pero hay un problema. - Se escuchó una fuerte respiración antes de que continuara hablando. -Hace dos semanas ustedes y su pareja vinieron por los resultados.

-Sí, lo sé, y llama para saber si queremos volver a intentarlo, déjeme decirle que...

-No, no es por eso, deje terminar, por favor.

-Está bien, adelante.

-Tuvimos un problema en el sistema y varios diagnósticos fueron mezclados, por lo que no estamos 100% seguros de su resultado negativo.

Lee se congeló en su lugar sin saber qué hacer o decir, aquello que había escuchado podía ser la pequeñita esperanza que necesitaba.

-No queremos ilusionarlo, por lo que le recomiendo que vengan para repetir el proceso.

-Por supuesto que iremos. - Dijo entusiasmado.

-Muy bien, aquí lo espero y le ofrezco una disculpa por nuestro error.

Evitando borrar su alegría, prefirió no responder, después se encargaría de eso. Dejando confundidos a sus amigos, salió casi corriendo de la oficina apenas tomando las llaves de su auto y su abrigo.