DragonBall: Unforgotten (español)

Capítulo 57

Obra original de DemonicHost

Capítulo cincuenta y siete

El punto de poder más grande más grande parecía ser la elección correcta. Tal vez estabas a cinco pies del tipo más grande que hayas visto. Sus manos sostenían fácilmente las cabezas de Trunks y Goten mientras les sonreía perversamente. Gohan entró instantáneamente en el asalto cuando los vio colgando, tratando de luchar contra sus garras. El hecho de que no hubiera aplastado directamente sus cráneos fue interesante para ti. Fue bueno, obviamente, pero si hubiera querido acabar con sus vida, podría haberlo hecho antes de Gohan e incluso tú llegaran allí.

Broly arrojó a Goten y Trunks a Gohan, obligándolo a atraparlos en lugar de atacar. También te diste cuenta de que Videl estaba allí. Parecía haber estado haciendo todo lo posible para que soltara a los chicos. Sus patadas y puñetazos fueron probablemente más relajantes que dolorosas para alguien de su poder y tamaño. Ni siquiera habías sentido su nivel de poder de ella o el de los chicos debajo del de Broly. Tampoco la habías visto al principio, ya que toda su forma ha sido bloqueada por la enorme criatura. Algo te dijo que lo que estabas presenciando ni siquiera era su forma más grande.

De repente entendiste por qué Gohan estaba preocupado por que estuvieras en celo con él en el planeta. Si el tamaño era casi proporcional a la masa corporal, no estabas segura de si incluso estar en celo te prepararía para este tipo. Además de ver que no lo conocías más que por su reputación, dudabas de que se contuviera lo suficiente como para dejarte sana al final. También estaba el hecho de que podría haber estado más motivado para masacrar a todos los demás tipos que lo desafiaran. Goku había golpeado a su propio hijo y casi matado a su aliado porque se habían interpuesto en el camino. Dudabas de que cualquiera de los dos hubiera recibido un tratamiento tan amable de la montaña de rabia frente a ti.

Mientras estabas allí mirando su gran tamaño y poder, notaste algo. En el momento en que tuvo una abertura, arrojó a Videl a una montaña. Efectivamente hizo lo mismo con Gohan, pero fue a Gohan a quien eligió continuar golpeando. Los niños recibieron un tratamiento similar. En comparación con su embestida, Videl había sido tratada con guantes para niños.

Arriesgándote, te teletransportaste junto a Broly mientras continuaba golpeando a Gohan, una explosión de ki que se abría camino por su brazo. Gohan tampoco estaba acostado y soportándolo. La roca a su alrededor se derrumbó mientras liberaba una oleada de energía no dirigida. El viento y los escombros se precipitaron hacia ti mientras Broly se bloqueaba de la explosión de ki. En ese segundo entre asaltos te pones entre Broly y Gohan.

El titán se detuvo mientras te miraba hacia abajo. Sus ojos, blancos de rabia, parecían crueles y frescos al mismo tiempo. Había fruncido el ceño mientras esperaba a que atacaras. Pero no lo hiciste. Y eso parecía desconcertarlo.

"Oye, chico grande," dijiste en un tono que uno podría reservar para un gran canino, un golden retriever, por ejemplo.

Sentiste a Gohan cargando un ataque por detrás de ti. Lo habías oído empezar a hacer un canto que solo conocías demasiado bien.

"¡Gohan! ¡Para! ¡No ataques!"

Broly miró a tu alrededor y la mirada cruel en su cara se endureció. Su cuerpo se tensó y comenzó a avanzar, listo para ignorarte a favor de Gohan. También te moviste despacio, pero te quedaste entre Broly y Gohan. A diferencia de cualquier otra persona hasta ahora, no hizo ningún movimiento para lanzarte a un acantilado. A diferencia de todos los demás hasta ahora, no te habías movido para atacarlo.

"¡Quítate de en medio!" Gohan gritó.

"¡No! ¡Detente y piensa Gohan! ¡Mira!" Dijiste.

Mientras hablabas, la atención de Broly volvió a estar en ti. Dejó de avanzar. Tomando eso como una buena señal, avanzaste muy lentamente. Gohan se mantuvo listo mientras tú estabas en el camino, maldiciendo internamente mientras lo hacía. Tenía la sensación de que si pasaba algo, su padre nunca lo perdonaría. Nunca se perdonaría a sí mismo. No había mucho que pudiera hacer desde su posición actual, ya que eras firme en interponerte en el camino. Su ola de poder se fue cuando se desvaneció; algunos fueron reabsorbidos por su cuerpo.