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Eran las 4:37 de la madrugada y yo no podía conciliar el sueño.

Estaba cansado, había trabajado mucho por que había tenido largas vacaciones. y como recompensa Seokjin vino a quedarse en mi apartamento.

Estaba en la sala y solo la lámpara que estaba a un lado del sofá estaba prendida, fotos de Abby era lo que alumbraba.

Tenía un álbum de todo el proceso de Abby de crecimiento, la más reciente había sido hace 2 semanas. Solía agregar muchas cuando iba a visitarla.

Me había marchado hace 4 días y extrañaba a mi hija, me sentía hipócrita. porque, muchas veces me iba por más tiempo y no me sentía así.

Como había discutido con Abby mi conciencia me estaba hechando la culpa de todo.

Jamás, había extrañado tanto a mi hija como en estos 4 días.

Recosté mi cabeza en el sofá cerrando mis ojos suspirando, pude sentir las manos de Jin pasar por mi cuello detrás de mi.

Llevaba una bata de baño solamente, hace tiempo atrás habíamos tenido una noche movida.

+debes intentar dormir-levante mi cabeza y sentí como el camino frente a mi.

-No puedo-mordí mi labio cuando él se sentó en mis piernas-Jin, ¿Que voy a hacer?-el hizo una línea recta con sus labios.

+No lo se cariño, si supiera te lo diría-acaricie su cintura con mis manos-en parte me siento culpable-alcé mi mirada para verlo y sus ojos estaba aguados.

-¿Por qué?-el me miro.

+Por gustar de ti-yo suspire y lo abrace-Si no hubiéramos salido, nada de esto estuviera pasando-el se rompió a llorar y yo lo abrace acariciando su espalda.

-Seokjin, no es tu culpa ¿Ok?-lo tome de las mejillas-no llores amor-le di un casto beso que lo hizo sonrojar.

+¿Has hablado con Taehyung?-suspire.

La verdad era, que Tae no me estaba dando muchos detalles, al parecer no le placía contarme si Abby estaba bien.

Diciendo la vaga escusa de "Namjoon, déjala sola", es mi hija, no la voy a dejar sola y él no es nadie para decirme que hacer.

Soy su padre, y nadie es mejor que yo para saber que es lo que ella necesita.

(...)

Las manos de Taehyung estaba en mi cintura y la acariciaban levemente.

Estábamos acostados en mi cama, eran las 2 de la madrugada y Jimin y Mónica estaba en su quinto sueño.

Ambos estábamos despiertos y sus ojos estaba conectados con los míos; yo acariciaba su mandíbula y dibujaba con mi dedo índice círculos imaginarios en su cuello y clavicula.

La primera vez que bese a Tae, me dio una leve fiebre, mi padre pensó que el oxígeno no estaba siendo limpiado correctamente.

Así que Tae se negó a besarme, desde esa vez no lo había hecho más.

Había sido mi primer beso, y deseaba tener otro, volver a sentir esos esponjosos y partidos labios.

Lo había notado, el labio de Taehyung se partían mucho, y cada rato lo veía usando mis bálsamos en sus labios.

No besarlo y probar sus labios me estaba volviendo loca, deseaba y anhelaba esos labios.

Y esa noche no fue la excepción. Tae sabía que yo quería besarlo, pero el, no quería hacerme daño.

Así que se está resistiendo mucho, cosa que no me gustaba.

Acerque mis labios a los suyos, cerré mis ojos cuando casi siento sus labios y lo que toque fue su mano.

Miss. Kim//Terminada//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora