Capitulo 12. Primer dia de escuela - parte 2

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Tomé una respiración profunda y sofoqué mi ataque de risa con pequeñas risitas.

-Está bien, entremos. Necesito sacar mi mochila de mi casillero de todos modos- Sam miró a su alrededor sorprendida al notar que no tenía mi mochila conmigo.

-¿Qué tan temprano llegaste aquí?- Preguntó mientras caminábamos hacia el edificio. Me encogí de hombros y sostuve la puerta abierta para Sam mientras nos acercábamos.

-Alrededor de 45 minutos antes de comenzar la escuela- Le dije. Ella me miró sorprendida.

-¿Por qué tan temprano?- Me reí.

-Te lo dije. Quería llegar aquí antes que la multitud- Sam asintió recordando que le dije eso.

-Oh sí- Caminamos por el pasillo, maniobrando para esquivar a las personas que entraban y salían, intentando llegar a nuestros casilleros. Llegamos a nuestros casilleros unos minutos más tarde. El de Sam estaba a solo tres casilleros del mío, así que no estábamos demasiado lejos el uno del otro.

-Entonces, ¿te está gustando Amity Park hasta ahora?- Preguntó, vaciando su casillero.

Sonreí con calma mientras sacaba mi mochila.

-Bastante bien hasta ahora. Yo...- Corté mi oración cuando sentí algo pinchando en la parte de atrás de mi cabeza. Se sentía como si tuviera ojos observándome, quemando mi espalda. Me enderecé instantáneamente y escaneé alrededor de la multitud con cautela, miré cada rostro.

Finalmente descubrí lo que activó mi alarma interna y solo contuve un gemido. Al final del pasillo, marchando directamente hacia mí, no era otro que Dash Baxter. Suspiré suavemente, sabiendo lo que estaba por venir.

-Oye, ¿quién es el nuevo fenómeno aquí?- Dash se burló cuando se detuvo a tres pies de mí. El atleta rubio tenía los brazos cruzados sobre el pecho, tratando de parecer intimidante. Lamentablemente para él, no estaba funcionando en mí. He vivido en la Zona Fantasma durante los últimos dos años, he visto cosas más intimidantes que él.

Principalmente mi mentor, Clockwork.

Puse una sonrisa tranquila, tratando de actuar y parecer lo más cortés posible.

-Daniel Time. Pero puedes llamarme Dan. ¿Y a quién, si puedo preguntar, te refieres? - Dije con una voz tranquila que también contenía una nota peligrosa. - ¿te refieres a mí? ¿O a esta encantadora joven que está a mi lado? - Hice un gesto a Sam, quien comenzó a sonrojarse furiosamente. - Porque puedo asegurarte, Dashiel Baxter, que no somos más raros que tú.

Dash, y todos en el pasillo, estaban en un silencio sepulcral. Los ojos de Dash estaban muy abiertos por la conmoción ante mi respuesta, o tal vez fue el hecho de que lo llamé por su nombre completo lo que lo sorprendió. No importaba, se sentía bien decir eso.

Tuve que esperar un momento antes de que Dash explotara sobre mí.

-¡Cómo me llamaste, pequeño idiota!- Gritó, dando un paso adelante, una vez más haciendo un intento fallido de tratar de asustarme.

Continué sonriéndole tranquilamente.

-Me escuchó, Sr. Baxter. ¿Qué nos hace diferentes a usted? ¿Y qué si la señorita Manson aquí es gótica y el Sr. Foley ama la tecnología? ¿Qué hace la diferencia entre ellos y usted siendo un atleta? ¿O la señorita Sánchez que está obsesionada con su belleza? Todos somos diferentes, señor Baxter.- Le dije con una inclinación divertida de mi cabeza.

Todos me miraron estupefactos. Incluso Sam me miraba con sorpresa y leve diversión. Sonreí y cerré mi casillero con calma, el sonido de hacer clic en su lugar hizo que casi todos se sobresaltaran. Pero todavía nadie se movió por su lugar.

El aprendiz del Maestro del TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora