30 ♥︎

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Encendí la tina para que se llenara con agua tibia. Le puse unos pétalos de rosa que había comprado en la tienda y encendí las velas aromáticas que siempre tenia. 

Me quite la ropa, trate de arreglarme un poco el cabello y arreglar el poco maquillaje que me quedaba del dia. 

Escuche pasos en el pasillo, esta mujer no sabe seguir instrucciones. 

- ¿Scarlett? 

- Me atrapaste -dijo detrás de la puerta del baño. 

- No sabes seguir instrucciones por eso cerré la puerta con seguro -reí.

- ¿Ya puedo entrar? -me dijo suplicante.

- Dame un minuto -volví a mirarme al espejo, no se porque estaba nerviosa. No era la primera vez que pasaba algo, con algo me refería a sexo. 

Seguía  mirándome  al espejo como si algo estuviera mal, me veía mas hinchada, mas desarreglada, no me sentía  bonita para que me viera así. 

Respiré profundo para quitarle el seguro a la puerta.

- Ya puedes entrar.

Scarlett abrió la puerta, pero no entro al baño.

- ¿Todo bien cariño? -le dije preocupada. 

- Me siento mal por arruinar tu sorpresa. 

- No arruinaste nada -me reí leve- yo fui la que lo arruiné, no me siento atractiva para ti. 

- ¿Qué dices? -entro al baño de manera inmediata- ¿Por qué dices eso, bonita?

- Soy fea -mis ojos se llenaron de lágrimas. No soy lo suficientemente bonita para ti.

Scarlett me atrapó en sus brazos tratando de consolarme, lloraba desconsoladamente y no podía tranquilizarme.

- ¿Quieres darte una ducha y comemos helado y pastel de cumpleaños? -secaba las lágrimas de mi cara. 

- Me parece perfecto -dije riendome un poco- Ya hice la tina para las dos, sorpresa -dije riendome.

- La sorpresa más linda de todas, eres tú -besó mi nariz. 

Scarlett empezó a quitarse la ropa para entrar a bañarnos. 

Me acomodé entre las piernas de Scarlett mientras ella jugaba con la espuma que había en la tina. 

- ¿Cómo te va en la terapia? 

- Creo que me va bien, hay cosas que hay que mejorar, pero la terapeuta piensa que vamos en buen camino -puso un poco de espuma en mi nariz- Hablando de eso, quiere que vayas a una sesión conmigo, dice que puede ayudar.

- Me parece bien -incliné mi cabeza para recostarla en su pecho- todo porque mejores.

- Gracias por celebrar mi cumpleaños, hace muchos años nadie lo hacía.

- ¿Puedo preguntar por qué?

Scarlett respiró profundo.

- No es que no quiera pero, ¿podemos hablar de eso luego? Quiero disfrutar lo que queda de mi cumpleaños contigo y dando gracias por tí. 

Solo tomé su mano y le di pequeños besos.

Me sentía sumamente orgullosa de que utilizara sus palabras para expresar sus sentimientos y no la violencia o tirar cosas al suelo.

Terminamos de ducharnos, me puse una camisa de Scarlett por alguna razón el olor de mi ropa me provocaba náuseas. 

- ¿Quieres dormir? -me acomodé en su pecho.

¿Solo es actuación, no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora