CAPÍTULO VIII

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CAPÍTULO VIII

Eric

Jueves 14 de febrero, 2013.

   Javier había llevado a una muchacha para la cena del día del amor y la amistad, al parecer era su novia. Era alta, con un rostro hermoso y ojos verdes, hablaba de manera muy madura en comparación con Javier, que aún no maduraba, según Eric. La chica en toda la noche no dejaba de observarlo, pero Eric no le daba mucha importancia a esas cosas.

   —¿Y qué piensas estudiar? —le preguntó la madre de Eric a la chica.

   —Periodismo, me gusta mucho esa carrera, me parece muy interesante.

   Eric sonrió, a su edad, ni él ni sus amigos, habían decido qué estudiar todavía y allí estaba la chica de dieciséis años, teniendo sus metas y sueños bien agarrados.

   —¿Y tú qué estudiarás, Javier? —preguntó Eric, viendo cómo el mencionado sonreía descaradamente hacia él.

   —Aún no lo tengo decidido, hermanito —respondió para irritarlo con imitación de voz española—. Es una sorpresa.

   Julio no dejó seguir hablando a Javier, para ponerse a contar chistes malos que todos debían reírse a juro por consideración.

[...]

Sábado 27 de julio, 2013.

   Al parecer la relación de Javier y la chica, no floreció. Eric se encontraba en el centro comercial y por cuestiones de la vida, se había cruzado con la exnovia de Javier; al principio cuando ella lo saludó, no la conoció, sino cuando ella mencionó al engendro del mal.

   —Terminamos hace dos meses —dijo la chica.

   —¿Por qué? —requirió Eric ansioso, para después darse cuenta lo insensible que había sonado—. ¿Se puede saber el por qué? Se veían muy bien juntos.

   —Es que Javier por más inteligente que sea, le falta como emociones... yo sé que es tu hermano...

   —Hermanastro —la corrigió Eric—. ¿A qué te refieres con que le falte emociones?

   —No se ponía celoso por nada del mundo —empezó a enumerar la chica—, no le interesaba lo que me pasara o sentía, y siempre se la pasaba abstraído....

   Para Eric, no era algo nuevo de enterarse, desde que había conocido a Javier siempre había sido así. Aunque le faltó a la chica agregar, que era trastornado, porque a Eric no se le olvidaba cuando lo quiso ahogar en la piscina.

   —Siempre ha sido así —soltó Eric viendo a la chica interesarse en el tema—, o sea, creo que es porque su mamá murió y no la conoció.

   Hablaron un rato más de diferentes cosas, para después reírse y pasar un rato agradable, que los llevo a ir a un motel para calmar sus ganas. Sin pensarlo, Eric se había metido con la ex de Javier, que era una chica bonita pero menor que él; sólo esperaba que el trastornado no sé enterara y mucho menos sus padres, porque la chica era menor de edad.

¡Buenas noches! ¿Qué tal?
Eric, Eric, Eric... ¿Qué has hecho? Jaja
Que Javier no se entere e.e
Nos leemos.

—Claire V. Rose.

Daños Inolvidables 1: Sin Salida (Libro #0.5 Saga Daños)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora