Darian, Simon y Jack despertaron dentro de una habitación fría y con poca ventilación. Los tres se sentían desorbitados y no comprendían lo que les había ocurrido. Darian y Simon no recordaban absolutamente nada mientras que a Jack le venían recuerdos de lo que Martínez le había hecho en cuento entró al apartamento de Harper.
—¿Dónde estamos? —inquirió Simon observando su alrededor—. Jack, ¿dónde está Harper?
—Martínez —Respondió—. Debió llevársela en cuanto me dejó inconsciente.
—Mierda —dijo Darian. Era la primera vez que la chica decía un insulto—. Debemos hacer algo. Hay que salir de aquí —Darian se acercó a la única puerta de metal pesado y comenzó a golpearla con sus manos—. ¡Malditos bastardos! ¡Sáquennos de aquí! ¡Martínez!
La puerta se abrió y de ella salió un hombre de máscara negra que tomaba a Sky con fuerza del antebrazo mientras ella se resistía. El adulto la arrojó al suelo dentro de la habitación. Se cerró la puerta bajo llave y Jack fue de inmediato hacía la morena. Sky se recargó en la desgastada pared con ayuda de Jack debido a que no podía recargar el brazo izquierdo con fuerza. Pues la herida de bala le causaba bastante dolor.
—¿Quién te hirió?
—Ya no importa —Jadeó—. Al menos Kate y mi hermano lograron escapar.
—¿Hacia dónde? —Jack desgarró la orilla de su playera para después vendar el brazo de la muchacha. Apretó con fuerza para que la sangre dejase de salir—. ¿A dónde fueron?
—Fueron por armas y transporte a la ruta 48 —Miró fugazmente a los tres adolescentes—. Ayer alguien entró al remolque y se llevó el reloj junto con las coordenadas. Campbell y Kate quieren ejecutar el plan de Luke lo más pronto posible.
—¿Por qué estamos aquí? Se supone que Howel ya no se acercaría a nosotros —Simon levantó sus gafas del suelo. Se dirigió a Jack—. ¿Acaso los vieron salir del hospital? A Harper y a ti.
Jack negó.
—Tyler —susurró. La mirada café de Simon y Sky y la verde de Jack se enfocaron en la pelirroja—. Debió haber sido él.
—¿De qué estás hablando? —Indagó Simon. Darian siguió en silencio y meditando si debía decir la verdad acerca del joven detective. De cualquier forma, aunque no quisiera hacerlo, ya tenía la atención de sus amigos—. ¿Darian?
—Tyler está del lado de Howel —Simon y Sky se quedaron boquiabiertos. Jack apretó los dientes—. Engañó a Harper para que fuese a la fábrica abandonada y después dispararle.
—¿Desde hace cuánto sabes eso? —Preguntó Jack con los puños cerrados y dando pasos lentos, pero seguros—. ¿Por qué no nos lo dijiste?
—Harper me lo confesó anoche. Al parecer Tyler la amenazó con hacernos daño si decía la verdad —Miró a Sky—. Estoy segura de que fue él quien entró a tu remolque para robarse el reloj y las coordenadas. Debió haberse enterado de alguna forma.
—Todo este show debe estar planeado por él y Howel —comentó Sky—. No somos los únicos que están aquí. Escuché la voz de Harry antes de entrar. No lo vi, pero sé que era él.
—Estamos perdidos —dijo Simon.
—No —contestó el pelinegro—. Saldremos de aquí a salvo. Y asesinaré a Tyler por traicionarnos de esta manera. Lo voy a matar.
XXX
Después de enganchar las cadenas que sujetaban sus manos y pies, Martínez retiró el saco apestoso de la cabeza de Harper para que la luz blanca de la habitación la cegara por unos instantes. Al recuperar la visión, Harper se percató de que Martínez estaba de pie en una de las esquinas del cuarto con los brazos cruzados y el ceño fruncido.
Millones de preguntas invadieron su mente. Intentó hablar, pero la mordaza que tenía dentro de la boca le impedía expresarse con claridad. De pronto se abrió el único portón presente por las espaldas de Harper. La muchacha no tuvo que girar en dirección al portón ya que la persona que entraba se posicionó frente a ella con superioridad. El rostro de Martínez se tensó y Harper tuvo que alzar la cabeza para mirar al adulto a la cara. No fue difícil para ella deducir que al fin tenía frente a frente a Howel.
—¿Por qué estás molesta? ¿Martínez no te trajo aquí de la mejor manera? ¡Oh, ya sé! No te avisó que iría por ti —Asintió—. Eso debe ser. No te trato como la princesa que eres, ¿verdad? Descuida, niña —Se hincó para retirar la mordaza de Harper—. Ya no se repetirá nunca más.
—¿Dónde está Jack? —Indagó en cuanto tuvo libre la boca. También sintió un dolor punzante al costado de su abdomen—. ¿Qué le hiciste? ¡Maldito idiota!
—No tienes derecho a llamarme así a menos que quieras quedarte sin amigos —A Harper se le erizó la piel por completo—. Sí, niña. Tengo a tus amigos. Y me extraña que solo preguntes por Jack —Soltó una risita—. Fue bastante fácil atrapar a la pelirroja y al hijo prodigo de los noticieros. La chica morena con tatuajes en el hombro fue menos fácil para mis hombres, pero al final lo lograron, con los cadáveres de Kate y Campbell por detrás, pero lo hicieron —Harper intentó levantarse, pero Howel le dio una patada en el hombro para obligarla a quedarse en el suelo otra vez—. Tranquila. Sé que sus muertes no te duelen tanto a comparación con la del rubio, si estuviese muerto, claro —Se paseaba alrededor de la muchacha con demasiada prepotencia y sus manos en los bolsillos del pantalón—. Porque no creas que no estoy enterado de que, entre todos tus amiguitos entrometidos, él es el que más te importa —Bufó—. Bendito sea ese trágico amor adolescente que tuvieron. Nada como el primer amor, ¿no es así, Harper?
—Déjalos ir. Estás molesto conmigo. A la persona que quieres es a mí. A ellos hazlos a un lado, Howel. No tienen la culpa de toda esta mierda. Si los dejas ir, te prometo que no dirán nada.
—A juzgar por tu rostro y tu mirada desorbitada, puedo deducir que no tienes ni puta idea de por qué estás aquí.
—Vas a matarme. Lo sé. Harás lo que Tyler no pudo completar. Pondrás tu arma sobre mi frente, jalarás del gatillo y me asesinarás igual a como lo hiciste con mi hermano.
Howel intentaba descifrar a la muchacha. Intentaba descifrar por qué razón se quería sacrificar por los demás. Pero no tardó mucho en reconocer que aquella característica era lo que representaba a los hermanos Lougthy. Ambos eran capaces de dar su propia vida para el bien de otros. Un acto valiente y a la vez lleno de credulidad. Howel aceptaba que era admirable la fuerza de voluntad que poseían ambos para aceptar su destino. Harper no titubeaba aunque se estuviese cagando de miedo. Y no lo hacía porque se negaba a verse débil frente al adulto. Igual que Luke hacía siempre que ambos se encontraban frente a frente.
—Ese bastardo me mintió respecto a tu muerte, pero no hay de qué preocuparse porque ya ha recibido su merecido —Sonrió—. Sin embargo, antes de su castigo, me confesó la estupidez que tú y los demás hicieron. Esas coordenadas. Luke. Tú —Tensó su mandíbula—. Creo que ahora sabes de lo que hablo.
—No...
Howel se aproximó con brusquedad y apretujó las mejillas de Harper con su mano mientras la acercaba a su rostro lleno de enfado.
—¡No digas que no tenías idea! ¡Han estado planeando acabar conmigo desde siempre! ¡¿Creíste que no me iba a enterar de tu estúpido plan?! Ni tan estúpido porque lograste hacerme enojar. Lograste hacerme cruzar la línea —Soltó las mejillas de Harper. A la muchacha le comenzaron a doler por la presión que el adulto había infringido en su agarre—. Tráelo.
Martínez salió de la habitación y tres segundos después volvió a entrar con uno de sus hombres. Ambos sostenían a Harry mientras avanzaban, eran como sus pilares de apoyo debido a que el pobre chico ni siquiera podía mantenerse en pie. Estaba cabizbajo, sus pies se arrastraban en la acera al igual que las cadenas en sus tobillos, sus manos colgaban y de su boca salían finos hilos de sangre.
Se veía en las peores condiciones.
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Secretos y Mentiras -Nada será igual- [COMPLETA] ✓
Ficção CientíficaCuando el hijo pródigo de la familia Lougthy muere, una nube negra de culpa y dolor invade el corazón de todos. En especial el de Harper Lougthy, hermana menor de Luke, pues ella presenció el accidente de auto en el que falleció su hermano. Todos te...