Nos quedamos observándonos, sus ojos azules, se veían más radiantes que nunca, me percato que está caminando hacia mí, su olor entre incienso y menta, la forma de caminar, hace que me quede sin movimiento, sus ojos me han hipnotizado.
—Keyla, quiero que entiendas que por más mujeres que me presenten, te escogería entre todas ellas, eres la razón por la cual mi corazón late que más fuerza, como nunca antes.
Toma mi rostro entre sus manos, y la acaricia suavemente, mientras lo escucho —Miro tu boca y me parece un sueño lejano, quien tuviera tu amor para disfrutar de la recompensa de poder besarlos.
—Desde que nos besamos aquella primera vez, he comprendido que mi corazón ya es solo tuyo y para ti. Sin ti me siento vacía e incompleta, eres tú el encargado de darle sentido a mi vida, ya que sin ti el caos se apoderaría de ella.
Con cuidado quito su mascara, él se queda atento a cada movimiento mío, quita sus mano de mi rostro y toma la máscara, para colocarla en la mesa, se voltea y acerca sus labios a los míos, se sienten tan cálido, rodeo su cuello y rodea mi cintura con sus manos, Sus besos, sus caricias es todo lo que necesitaba, siento que somo uno solo.
Nuestros besos y nuestras caricias, fueron aumentando, por la necesitan tenernos cerca, que sin darme cuenta me encontraba en la cama, el arriba mío, y reacciono de manera rápida y salgo de la cama dejándolo, asustado y a la vez confundido.
—Discúlpame Keyla, creo que fue imprudente de mí, parte pero es que..
—No, no tienes nada de culpa, la del problema soy yo, Balduino, hay cosas que no sabes de mí, que aún no he podido superar.
Se acerca a mí y toma mis mano —Keyla, estas temblando, que sucede?
—no sé cómo explicártelo.
—Puede confiar en mi completamente, me preocupa tu reacción, mi amada, no sabes lo perturbado que me encuentro en estos momento, siento que soy yo el culpado de lo que sientes en estos momentos.
—No eres tú, eres la persona más especial para mí, pero tengo algo que contarte, ven.
Lo invito a sentarnos en la cama,—Balduino, como ya te dije eres la persona más hermosa que he conocido en toda mi vida, pero entendería si después de lo que te voy a contar, te alejes de mí.
—Keyla, que sucede?
—Recuerdas que te comente, que en mi pasado jugaron y me lastimaron mucho?
—Si lo recuerdo
—Cuando estaba en mis estudios, conocí a un joven, de la cual me enamore perdidamente, los primeros meses fueron tranquilos, pero luego fueron un infierno, me alejo de todos, incluso de Matt, llego a golpearme y más de una ocasión me lanzo por las escaleras, yo siempre lo perdonaba, ya que luego de las golpizas, me juraba que no lo volvería hacer. El me pedía la prueba de nuestro amor, quería tener sexo conmigo, pero al sentir temor por él siempre me negaba, pero llego un día a mi apartamento, y...
Tome un poco de silencio, y agache mi rostro, necesitaba valor para decir las siguientes palabras, cuando siento las manos de Balduino apretando las mías.
—Keyla, que te hizo? que más paso?
—El abuso de mí, me tomo a la fuerza
Él se levanta de la cama y camina de manera lenta, y me mira de una manera que nunca había visto—entiendo si ya no quieras verme más.
—Que le hicieron a ese maldito?, lo enviaron a un horca?
—En ese momento llego Matt, le dio una golpiza, y llamaron las autoridades, actualmente está en cárcel
—Sería capaz de viajar a tu época, y cortarle cabeza, a ese maldito.
Se acerca a mí y me abraza muy fuerte y yo correspondo a él.
—Entiendo porque tu carácter!
—Si, luego de eso, he sido más dura con los demás incluso conmigo misma, me afecto tanto que no logre ver a un hombre más allá de un conocido, mi único amigo es Matt, me alejaba de todos, hasta que llegaste tú, y no lo sé porque razón cambias algo en mí.
—Nunca me alejaría de ti, quisiera borrar todos esos malos recuerdos, con caricias, con besos con amor, como momentos especiales, solo déjame amarte, sé que es un momento complicado, pero, ya estoy haciendo todo lo posible por resolver lo.
Escuchamos tomar la puerta, el camino para buscar su mascara, y da el permiso para que puedan entrar.
—Su majestad, ya está todo listo para que la joven Keyla pueda partir al pueblo.
—Muchas gracias Tiberias, pero ordena a otro médico, que vaya en lugar de ella, se quedara conmigo, mañana sin falta podrá ir atender a los aldeanos.
—Pero Balduino... creo que mejor voy..
—Ordeno, que el día de hoy se quede aquí.
—Como usted ordene mí, majestad, me retiro.
—Pero porque?, yo debía ir con los demás?
—Keyla, te cuesta seguir ordenes!, sabes que necesito estar contigo en estos momentos, los aldeanos estarán en buenas manos.
—Pero Balduino,—Hago un gesto de molestia y cruzo mis brazos.
—Te amo, hasta cuando estas enojada, pero debes entenderme
—te entiendo
Se acerca, me abraza fuerte y me dice al oído—Te amo Keyla
—Yo igual, Balduino, como nunca he amado a alguien en mi vida, aunque seas un mandón.
Se ríe, y niega con la cabeza.
—Necesito que me prometas algo?
—Si dime
—Espera, que resuelva todo, y cásate conmigo? quédate conmigo!!, moriría si te vas!, escuche que solo falta unas pocas semana para que regresen. Me muero por vivir contigo, lo que me queda por andar y le pediré a Dios que cambie el tiempo y que lo vuelva eternidad.
—ayyy Dios me ama demasiado, al enviarme junto a ti, con tu ternura y tu luz iluminas mi corazón, Si, contigo es con quien puedo caminar, también con quien me gusta despertar.
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La Fecha del tiempo
Science Fiction"Créeme, valdrá la pena, yo se porque te hago esperar" Esas palabras nunca las olvidaría jamás, luego de terminar sus estudios en medicinas, ella se adentro a los conocimientos de enfermedades poco comunes, gracias a su profesor el Doctor Mclin, per...