Al salir del edificio me dirijo inmediatamente al estacionamiento para subirme a mi bebe color rojo. Necesito arreglar el contratiempo con Erick lo más pronto posible. Sé que Daniel tiene que ver en esto por el altercado de esta madrugada. Pero no soporto me mucha gente me toque y él bien lo sabe. Lo hizo para molestar y lo logró. Por eso reaccione como lo hice.
Conduzco hasta el edificio en donde se encuentran las oficinas de nosotros. Prepárate Daniel, porque es muy peligroso jugar conmigo.
Me bajo del coche y entro al edificio. Es un lugar con 10 pisos y muy moderno. Hay personas con todo tipo de fintas. Desde trajes hechos a la medida, hasta vestuarios de vagabundos. Obviamente todos somos agentes que están en diferentes misiones.
Entro al ascensor y justo cuando las puertas se abren sale Daniel con una sonrisa estúpida en la cara.
Al verme se sorprende pero no deja de sonreír.
-Ava, que sorpresa. ¿Qué te trae por aquí?- Dice mientras se acerca sigilosamente hacia mí.
-Vengo a hablar con Erick.- Digo a la vez que le hecho una mirada asesina, intento esquivarlo para subirme al elevador pero él me detiene poniendo su asquerosa mano en mi codo, inmediatamente me suelto de su agarre de un jalón y lo amenazo con la mirada.- Escúchame bien maldito bastardo.- Y me acerco a él.- Sé que tienes algo que ver en que me hayan quitado días para completar mi misión. Así que te exijo que hables con Erick y retires las malditas estupideces que le dijiste.- Estoy empezando a enojarme de verdad.
Tiéntame Daniel, vamos, hazlo y acabaras en una cama de hospital si bien te va.
-Me vas a escuchar tú a mí, perra. Cometiste un error al agredirme en tu departamento. Aquí yo tengo más poder que tú, así que no me vengas a exigir nada. Enfócate en completar tu trabajo y a tiempo. Sabes qué consecuencias traería que no lo hicieras.- Dice mientras aparece una sonrisa burlona en su estúpida cara, se yergue y se cruza de brazos. Sé que intenta intimidarme. Pero he pasado por muchas cosas para que eso suceda.
-No me vengas con amenazas. Intenta ponerte en mi camino de nuevo y te aseguro que...
-¿Qué es lo que me aseguras? La que no se debe atrever a amenazarme eres tú.- Dice gritando, su cara se torna de color rojo por lo enfurecido que esta y me agarra del cuello a la vez que me estampa contra la pared, lo que hace que el aire de mis pulmones se salga y mi visión se desenfoque. Espero 3 segundos a reponerme.
Le doy un puñetazo en las pelotas y mis manos vuelan a su agarre en mi cuello a la vez que giro mi cuerpo para dejar espacio y poder respirar. Estampo mi codo en su cara y él se dobla un poco. La oportunidad perfecta. Le pongo un puñetazo en la cara con todo mi orgullo. Sé que esto dejara marcas en mis manos pero me importa poco. Siento la adrenalina correr por mis venas y el enojo nublándome la mente.
Él se recompone lo más rápido que puede y se abalanza sobre mí. Su cuerpo es muy pesado lo que hace que me estampe contra el piso. Es su oportunidad perfecta, se pone encima de mí y me propicia un golpe en mi ojo derecho.
Tengo un espacio libre y busco mi arma que siempre está en mi espalda. Pero maldita sorpresa. No esta. Al instante recuerdo que la deje en el departamento y maldigo mil veces.
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DISPARA
ActionKhalil Gibran dijo: "El infierno no está en el remordimiento, está en el corazón vacío"; y no importa si me encuentro en el lado del remordimiento o del vacío, estoy en el infierno, haciendo lo que mejor se me ha dado en los ultimo 5 años, sobrevivi...