Capitulo 35.

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Ava Wick.

Estoy cerca de la cafetería en la que he quedado con Cam. No pude evitar sentirme mal por lo que le han hecho a su padre por lo que tengo algo que el necesita para que su mente encuentre un poco de tranquilidad o un poco de desesperación. Un arma de dos filos.

Sentada en la banca de madera, con el frio viento azotando en mi rostro observo la llegada de Cam. Tan pulcro que me resulta inevitable no observarlo por más tiempo del que me había permitido.

Sigue surtiendo el mismo efecto. Como si de pronto toda la oscuridad se fuera a la mierda y llegara el con una vela encendida para calmar a mis demonios.

Sé que le es imposible reconocerme, pero aun así, clava su vista en mi para después entrar con furia contenida hacia la cafetería.

Rio por lo debajo y después de seis minutos me levanto de la banca para entrar y sentarme en una mesa que se encuentra alejada de la de Cam. Un punto estratégico para lo que tengo en mente.

Toco el botón de mi abrigo e inmediatamente empieza a timbrar hasta que Cam contesta.

-No sé qué tipo de juego estas tramando, pero la paciencia no va a jugar a mi favor dentro de poco.

-Después de ordenar, y terminar de comer, dirígete a los baños.- Contesto y cuelgo.

Al pasar de varios minutos el pedido de Cam llega. El picotea un poco para después levantarse lentamente y caminar tranquilo hacia el aseo. Me doy palmaditas en la espalda mentalmente porque lo hace perfecto. Si yo no supiera que se va a encontrar conmigo dentro de poco, ni por la mente me pasaría que está tramando algo.

Me levanto de mi lugar y me dirijo a donde se encuentra Cam. Al momento de girar la perilla de la puerta mis instintos se ponen alerta, algo no está bien y me preparo para pelear en cualquier momento.

Y si. Cam me golpea como si su vida dependiera de ello.

Afortunadamente he reaccionado rápido. Se la impotencia que debe sentir. Sé que piensa que pude descargarse conmigo porque me ve como una persona cubierta de acero que no se puede romper. Pero mi ego no puede ser sometido a tal tortura de ser menospreciado, por lo que ahora Cam se encuentra en el piso, aullando de dolor.

-Tengo la información que te interesa. Si no te calmas, te voy a dar una mierda.- Siseo entre dientes.

Después de varios minutos Cam deja de forcejear y decido dejarlo libre.

Se pone de pie y desarruga con sus manos su traje gris.

Me observa detenidamente, de arriba abajo, como si tratara de descifrar el propio misterio del universo.

Saco una carpeta del fondo de mi abrigo y se la entrego.

El la toma y ve su contenido con los ojos sobresaltados. Es momento de irme. Al menos por ahora. Sé que me va a necesitar y en honor a lo valiente que él fue al quedarse conmigo, hare lo mismo.

Salgo de los aseos sin que se dé cuenta. Pago lo que he pedido para consumir y salgo de la cafetería a seguir construyendo la derrota de aquellos que me arrebataron a Sara.

Tengo todo lo necesario. A simple vista lo que había obtenido del computador de Marshall era pura mierda. Pero solo bastaba con escarbar un poco más y ahora lo tengo. Nombres, direcciones, pruebas de su culpabilidad. Aun quedan cosas que son más difíciles de obtener, todo esta tan revuelto como si de una telaraña se tratara. Pero sé que lo que me espera al final de toda esta mierda será algo grande. Algo a lo que mis instintos piden que huya, pero esta vez decido ignorarlos y seguir con el plan.

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