Nuevos estudiantes, problemas y respuestas

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Christian se despierta y se queda mirando a Jay, este se despierta, sonríe y se sonroja. Christian esboza una sonrisa y le da un tierno beso en la sien.
—Buenos días, novio —musita Christian con una amplia sonrisa.
—Eres un idiota —murmura Jay.
—¿Qué quieres hacer hoy?
—Ir a cotillear a los nuevos estudiantes que se unen a nuestro curso.
—¿Y eso?
—Al parecer son un grupo bastante pintoresco.
—La curiosidad mató al gato.
—¿Tienes miedo a que compitan contra ti?
—Yo soy el mejor —Christian le guiña el ojo y le besa.
—Qué creído te lo tienes.
—¿Por eso estás conmigo no?
—Te odio.
—Nah, te gusto —susurra Christian.
Jay se lanza sobre él, le besa varias veces en el cuello y en los labios.
—Vamos a conocer a los nuevos.
******* ******* *******
Christian y Jay se reúnen con Lisa, Emma y Troy, los cinco recorren los pasillos, bajan diferentes escaleras hasta llegar a la amplia aula de audiovisuales dónde presentarán a los nuevos estudiantes, de diversos cursos.
—Hay más gente de la que me esperaba —murmura Lisa.
—Bienvenidos a Linston —comienza a decir una mujer alta y rubia.
—Ya van a presentar a los nuevos de nuestro curso —murmura Jay.
—Espero que los acojáis con los brazos abiertos y les ayudéis con todas las dudas que tengan.
—Qué tostonazo —bromea Christian.
—Os presento a vuestros nuevos compañeros: Rachel, Iván, Verónica, Raúl, Lucía y Scott —la mujer se hace a un lado para recibir a los cinco jóvenes—. ¡Bienvenidos!
—¡No puede ser! —murmura Christian sorprendido.
Los jóvenes salen al vestíbulo, Christian mira la puerta del aula hasta que sale uno de los chicos.
—¿Christian vienes a desayunar? —Jay se acerca a él.
—Un segundo.
Uno de los nuevos se acerca a Christian y se dan un abrazo, sus amigos se quedan sorprendidos.
—¡Scott! —grita William y se lanza sobre él para abrazarlo.
—No esperaba veros aquí. ¿Seguid juntos?
—Más quisiera Christian —suelta Will.
—He encontrado a alguien mejor —le espeta Christian y Will le mira ofendido.
—A ver lo que te dura, seguro que más daño que a mí, no puedes hacerle.
—Paso de esto —musita Chrisian y se larga de allí cabizbajo.
—¿Christian? —susurra Jay.
—Luego hablamos.
—Yo que tú, me alejaría de él, todo lo que toca, lo rompe —le advierte Will.
—Nadie ha pedido tu consejo Will —le espeta Jay.
—Deberías escucharlo.
Jay se muerdo el labio con fuerza, aguantando la impotencia, aunque al final acaba yéndose de vuelta a los dormitorios.
—¿A qué ha venido eso? —murmura Troy.
—No se va a ir de rositas —susurra Lisa.
—No hagas nada de lo que te puedas arrepentir —la intenta detener Emma.
—¡Will! —grita Lisa.
La joven se planta delante y le abofetea la cara con fuerza dejándole los dedos marcados.
—Si te metes con uno de nosotros, te metes con todos gilipollas.
—No es mi problema que no sepáis el monstruo que tenéis al lado.
—¡Te mato! —grita Lisa y se lanza sobre Will.
Troy y Emma corren a separarla, Lisa le vuelve a golpear en la cara. Sus amigos consiguen separarla.
—¡No eres nadie! ¡Nadie! ¡Para juzgar a Christian! —grita Lisa enfurecida.
—¡Lisa ya! —grita Emma.
—¡Necesito estar sola! —les dice con un tono elevado y sigue caminando por el pasillo.
******* ******* *******
Jay se encierra en la habitación, se tira sobre la cama y rompe a llorar. Ahoga los gritos con la almohada. La puerta se abre y entra Christian, Jay se lanza sobre sus brazos.
—Lo siento —musita Christian—. No debí de haberme ido, y dejarte allí solo.
—¿Por qué Will hace eso?
—No lo sé, hablando con Scott me ha atacado muchísimo y le dije que he conocido a alguien mejor que él.
—¿Lo decías por mí?
—Claro que era por ti, tonto —Christian lo rodea con los brazos y le besa la frente.
—No teníamos que haber ido a conocer a los nuevos.
—Van a dar problemas —musita.
—¿Tú crees?
—Seguro que sí, nosotros los damos y éramos nuevos.
—Y seguimos dando problemas —musista Jay con una sonrisa y le besa.
—Me muero de hambre —susurra Christian.
—Vamos a Paradise a desayunar.
******* ******* *******
Christian y Jay entran en la cafetería, Frannie sale corriendo de la cocina y se les lanza para darles varios besos seguidos.
—¡Mis niños, niños! Me alegro de estar viendoos a todos poco a poco.
—Mamá Frannie eres la mejor —murmura Christian y le besa la mejilla.
—En vuestra mesa están Nora, Judith y Laurent.
—Voy a ir a verles —dice Jay.
—¿Te has declarado ya? —murmura Frannie en cuanto Jay se aleja lo suficiente.
—Sí, anoche en cuanto llegué del viaje con Em y Lisa —masculla sonrojado.
—Me alegro por ti Christian, te mereces ser feliz.
—¿Cómo está Mark?
—Recuperándose, y deseando de volver a ponerse a estudiar para ser policía.
—Lo conseguirá.
—Espero que tú también, me sentiría aliviada si supiese que los dos estaís trabajando juntos.
—Gracias Frannie —masculla Christian—. Fuiste una madre cuando solo era un mocoso y desde que nos volvimos a encontrar sigues tratándome como un hijo.
—Siempre te consideraré un hijo, has pasado por tantas cosas feas, que solo espero que seas feliz.
—Gracias —Christian se limpia las lágrimas disimuladamente.
—Vete a desayunar, en seguida te ponga tú café y tostada.
Christian camina hasta llegar a la mesa con sus amigos, se sienta y les saluda a todos.
—¿Y esas caras?
—Eso mismo he preguntado yo —susurra Jay.
—¿Qué opinas de esto? —Nora suelta en la mesa el móvil con los documentos que fotografió en casa de Max.
—¿De dónde ha salido esto?
—Eso no importa. ¿Qué harías tú?
—Ir a ese centro y pedir ver a Max.
—No podemos, solo familiares.
—Laurent y Nora podrían parecer hermanos de Max.
—¿De verdad piensas que podría colar?
—Por intentarlo no perdéis nada.
—Según Judith están intentando buscar la forma de que Max, no herede.
—Y Frannie tiene la teoría de que Max no es su hijo, de que es adoptado.
—La teoría de Frannie es buena, si Max no fuese hijo biológico, explicaría porque no quieren que herede.
—Lo han metido en un centro psiquiátrico, solo para tener un documento para decir que no puede heredar, es de ser muy hijos de puta.
—Si los padres de Max, no son sus padres, ¿quiénes son?
—Tal vez, eso explicaría porque no quieren que herede, por sus padres biológicos.
—Deberíais ir a ver a Max, Judith y yo investigaremos sobre los auténticos padres de él.
—¿Cómo piensas hacer eso? —Judith le mira sorprendida.
—Su padre tiene que tener algún documento de adopción.
—En su casa no hay nada —musita Judith.
—No estaba hablando de su casa.
—¿Entonces? —Judith le mira sorprendido.
—Estaba hablando del despacho en Linston —contesta Nora.
—Nos vamos a meter en un lío que flipas —musita Laurent.
******* ******* *******
Nora y Laurent llegan al centro psiquiátrico en el que está ingresado Max. La recepcionista les hace un par de preguntas pero consiguen pasarlas con éxito y acepta a que entren a verle. La mujer los llevas por unos pasillos con luces blancas y baldosas amarillo pálido. Suben unas escaleras y bajan otras hasta llegar a un amplio jardín.
—Allí está —la mujer señala a un joven sentado en unas sillas de ruedas contemplando una fuente.
Nora y Laurent aligeran el paso y se acercana Max. La joven se lleva las mano a la boca, sorprendida. Max está completamente ido, se le desliza la baba por la comisura de los labios, apenas puede pronunciar palabra pero sus ojos se abren como platos, parece aliviado de verlos allí y desesperado a la vez.
—Estamos aquí Max —musita Nora—. Vamos a sacarte de aquí.
Los ojos de Max se tornan vidriosos y las lágrimas comienzan a caer.
—Te sacaremos de aquí tío —Laurent le estrecha el hombro con cariño.
Nora se acerca a una mujer que se pasea por el jardín observándolo todo, le pide los papeles de ingreso de Max, para saber por qué está aquí. La mujer asiente y diez minutos después aparecen con los papeles. La joven vuelve con Laurent y Max, susurrando palabras, enfadada.
—¿Qué pone?
—Comportamiento suicida, lo han encerrado aquí aluyendo a que su dificultad para andar fue por un intento de quitarse la vida entre otros.
—¡Qué hijos de puta! —exclama Laurent enfadado.
Nora saca el teléfono, y echa varias fotos a todo el informe de ingreso de Max. Seguidamente le devuelve el informe a la mujer que se lo ha entregado.
—Mierda, Nora —musita Laurent y señala a las ventanas del piso de arriba.
Sharpay está caminando acompañada por la mujer de la recepción.
—Te sacaremos de aquí —musita y le da un beso en la sien a Max.
Nora y Laurent sale corriendo del jardín, en busca de una salida del centro.

EUFORIA [CLIMAX 2] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora