Christian se despereza en la cama, Jay duerme abrazado a él, con la mano por encima de su cintura. Los rayos del Sol invaden la intimidad de los jóvenes. Christian estira el brazo hacia la mesita hasta coger su teléfono. La pantalla se ilumina mostrando diferentes notificaciones de diversas aplicaciones y varios mensajes. Toca con la yema del dedo la pantalla del móvil y entra en el mensaje de Lisa.
<<Espero que estés disfrutando de tus vacaciones con tú príncipe azul, gracias por dejarme en Linston sola, aburrida en mitad del verano, eres un amor>>.
<< ¡Eres una dramática! Solo me he ido cuatro días; ¡y ya han pasado dos! >>
—Buenos días —masculla Jay.
Christian deja el teléfono sobre la mesita. Esboza una sonrisa, se inclina hacia la frente de Jay y le besa con ternura. Él esboza una sonrisa.
—Buenos días —Christian le vuelve a besar, esta vez en la mejilla y seguidamente en los labios.
—Necesito ducharme y un café.
—Puedo encargarme de ambas —Christian se muerde el labio mientras acaricia el pecho del muchacho.
—Vayamos a la ducha —responde Jay y le besa con pasión.******* ******* *******
Lisa se deja caer sobre la cama, se queda mirando el techo. Echa de menos a Christian, es verano y quiere hacer planes con su mejor amigo. Por suerte solo quedan dos días para que vuelva de su escapada romántica con Jay. El problema es buscar como mantenerse ocupada durante las próximas cuarenta y ocho horas.
Se incorpora, coge su teléfono de la cama y sale por la puerta. Recorre el pasillo hasta llegar a las escaleras principales. En el vestíbulo se encuentra con Archie y Emma.
—¿Qué tal llevas el verano?
—Mal. Todos se han ido de vacaciones con sus parejas.
—Es normal Lis —Emma esboza una sonrisa.
—¿Dónde iba a estar mejor Christian que conmigo? —pone los ojos en blanco.
—Se me ocurren un par de planes —masculla Archie.
—Está bien, Jay le puede dar algo que yo no puedo.
—¿Y si vamos a la piscina?
—Me apunto —asiente Archie.
—Acepto, es eso o morirme de aburrimiento —dramatiza Lisa.
En la piscina, se queda bajo la sombra del árbol de la esquina. Archie y Lisa hablan sobre la belleza desmesurada del socorrista y de lo mucho que le marca el bañador. Emma pone los ojos en blanco mientras le da un sorbo a su refresco de limón.
—Estoy por fingir que me ahogo para que venga a sacarme de la piscina y me rodé con esos brazos.
—Vaya pivón —masculla Archie.
—Necesitáis echar un polvo urgentemente.
—Con el socorrista me valdría —sonríe Lisa.
—Seguro que es gay.
—Mejor para mí —Archie se muerde el labio.
—¡Chicas! —grita Troy.
Los tres alzan sus brazos al cielo y le saludan. El joven acompañado por Tarek se acerca, colocan sus toallas y se sientan sobre ellas.
—¿Qué tal vuestro verano?
—Meh.
—Bueeeno.
—Caluroso.
—Wow —Troy esboza una sonrisa—. Cuánta efusividad.
—Lo que os hace falta es ir a una buena fiesta, con gente en bañador, cañón de la espuma y mucho alcohol.
—Qué bien suena —masculla Lisa.
—Pride dará una, han alquilado un recinto con piscina, va a ser increíble.
—Yo no podré ir —masculla Tarek cabizbajo.
—¿Y eso? —Lisa pone cara de extrañada.
Todos la miran con una expresión que dice << la estás cagando >>.
—¡Joder! Lo siento Tarek, soy imbécil.
—No te preocupes —le dedica una sonrisa tranquilizadora.
—¡Vamos a bañarnos! —grita Emma y sale corriendo hacia la piscina.
Archie y Troy la siguen.
—De verdad que lo siento muchísimo Tar —murmura Lisa.
—No te preocupes.
—Oye, Kyle lo está gestionando como puede, y Christian consiguió alejarse de esa vida.
—Casi muero Lis..
—Lo sé, pero no lo has hecho. Sigues aquí, con nosotras.
—Tengo miedo de cagarla —Tarek traga saliva para contener las lágrimas—. De caer de nuevo.
—No estás solo, y siempre podrás pedir ayuda.
—Christian me ayuda mucho. No para de preguntarme, de hablarme y de proponerme planes, le echo de menos.
—Yo también. Pero mientras vuelve, nos tenemos el uno al otro y al resto del grupo.
—¡Lisa! ¡Tarek! ¿A qué estáis esperando? —grita Emma desde la piscina.
—¡A qué te ahogues! —grita Lisa entre risas dirigiéndose hacia el resto.
Tarek la acompaña. Se queda sentado en el borde con las piernas introducidas en el agua.
Troy se acerca nadando, le besa la rodilla, se apoya en su muslo. Se miran y ambos sonríen.
—Te quiero —susurra Tarek sonrojado.
—Y yo —Troy sonríe y le hace burla.
Lisa y Emma se salpican agua la una a la otra, Archie habla con un chico rubio. Troy y Tarek se unen a la guerra de agua contra las chicas. Se salpican durante un buen rato. Durante unos minutos el tiempo se detiene, solo están ellos, jugando como si volviesen a ser niños.
—Tras esta pelea que claramente hemos ganado nosotras —Lisa se apoya en el torso de Tarek—. Me ha entrado un hambre terrible.
—Discrepo en eso de que habéis ganado vosotras, pero estoy de acuerdo con lo del hambre.
—¿Dónde podemos comer?
—A lo mejor en el chiringuito de aquí hacen algo rico —sugiere Emma.
—Me apetece una súper hamburguesa.
—Joder Lisa —se ríe Troy.
—Yo veo lo de la hamburguesa y le sumo unas patatas —asiente Tarek mientras se relame.
—Os recuerdo que no hay ningún McDonald's cerca —responde Emma tajante.
Lisa y Tarek fingen ponerse a llorar.
—Pidamos algo de chiringuito —sugiere Archie.
—Vayamos a ver que tienen —dice Troy.
—Nosotros os esperamos aquí —dice Lisa entristecida—. Solos, tristes y desolados.
—¡Dramática!
—Espero que al menos tengamos una heladería cerca.
—¡Yo sé dónde hay una! —exclama Tarek—. Sus helados están de muerte.
—¡Quiero ir, llévame!
—Después de comer. Allí podemos tomarnos un café y el helado.
—Tarek... creo que te amo —Lisa rompe a reír.
El iPhone de la joven empieza a sonar. Es un FaceTime de Christian. Lisa lo coge emocionada.
—¡Hola princesa! —grita Christian desde el otro lado del teléfono.
—¡Hola, mi amor! —vocifera Lisa.
—¿Estás en la piscina sin mí?
Lisa se gira para dejar de tener la piscina de fondo.
—¿Y tú en la playa sin mí?
Christian se gira para dejar de tener el mar a sus espaldas.
Ambos se miran y rompe a reír a carcajadas.
—Sois tal para cual —dice Jay sonriendo.
—¡Amor, mira con quién estoy! —grita Lisa emocionada y se sienta al lado de Tarek.
—¡Pero bueno! —chilla Christian emocionado.
—¡Hola! —sonríe Tarek.
—Tarek, huye de Lisa, corre ahora que todavía eres libre.
—Demasiado tarde, ya he caído en sus garras.
—Oye, que soy una princesa no una bestia.
—¿Sí? —Christian arquea una ceja—. No estoy muy seguro de eso.
—¡Christian! —grita Lisa.
—Esa es la bestia que conozco —se ríe a carcajadas.
—¿Para esto me llamas? ¿Para insultarme?
—Te llamo porque no puedo vivir sin ti.
—Pelotero —Lisa le hace burla.
—Bueno voy al grano que sino Jay se me enfada.
—¡Mentiroso! —grita Jay de fondo—. ¡Si estoy leyendo!
—Te llamaba para decirte que no vuelvo —sonríe mostrando todos sus dientes.
—¡QUÉ! —gritan Tarek y Lisa al unísono.
Christian da un respingo.
—Vaya, si que me echáis de menos.
—Para nada —masculla Tarek.
—Más quisieras —le espeta Lisa.
—Lo que vosotros digáis —Christian pone los ojos en blanco—. He pensado que como mañana volvemos, podíamos irnos todos a ver las playas de Linston.
—¿Todos?
—Sí, podemos decirlo por el grupo, que venga quién quiera.
—Me gusta la idea —comenta Tarek.
—Yo me apunto —asiente Lisa.
—¡Genial! Coméntaselo al resto, tengo que dejarte, me llama Juud. Te amo, un beso.
—Te amo —sonríe Lisa.******* ******* *******
Christian esboza una sonrisa al ver a Judith en la pantalla de su teléfono. Está junto a Sylvie, en la playa.
—¡Qué tal Juud! —dice sin dejar de sonreír.
—Tienes que venir a estas playas, te encantarían.
—Son increíbles —añade Sylvie.
—¡Holaaa! —grita Jay.
—Justo estaba hablando con Lis, de ir a las playas de Linston con el resto, bueno con quién quiera venir.
—Seguro que Laurent se apunta, ¿seguro qué podrás soportarlo?
—Dejad de odiarle, es un buen tío —le defiende Jay.
—No le escuches, le ha dado mucho el Sol en la cabeza.
Judith se ríe.
—¿Cuándo volvéis vosotras?
—Esta noche. No quiero volver bueno quiero para ver a algunos y volverme.
—Para verme a mí —sonríe Christian.
—No eres tan especial y no eres al único que quiero ver.
—¿Y vosotros?
—Mañana por la mañana salimos de aquí, llegaremos para comer.
—Puedo reservar en algún sitio chic, conozco bastantes —sonríe Sylvie.
—Cómo se nota que tiene pasta —bromea Christian.
Sylvie esboza una sonrisa.
—Pero sí, por mi haz la reserva. Puede decirlo por el grupo, bueno por el otro grupo.
—¿Tenéis un subgrupo? —Jay hace una mueca de sorpresa.
—Os queremos mucho pero no a todos por igual —Christian se muerde el labio para aguantar la risa.
—Pues lo comento por el otro, seguro que vienen todos y quedaremos mal con el resto.
—Seguro que tienen mazo planes.
—Que les den, dijimos que el verano es para disfrutar.
—¡Exacto!
—Tengo que irme Chris, voy a comer. Nos vemos mañana, un beso.
—Un beso guapas.
Jay deja el libro, se acerca a la mochila y coge su camisa. Christian se acerca y le besa la mejilla.
—Voy a dar una vuelta.
—¿Qué te pasa?
—Nada.
—¿Es por el comentario de Laurent?
—Sí, es mi amigo Christian.
—Un amigo que al principio te rechazó, luego se aprovechó de tu amnesia y por último entro en un chantaje para sacarme de quicio.
—Eso es un golpe bajo.
—Laurent si que es bajo. Y estoy harto de que lo defiendas a todas horas, ¿alguna vez te pondrás de mi parte?
—¡Estoy aquí! ¿No? Eso tiene que significar algo.
—Significaría algo si no te pusieras como te pones cada vez que alguien menciona al maldito Laurent.
—Él tenía razón —se pasa las manos por la cara.
—¿Perdona qué? ¿Has hablado con Laurent?
—Me dijo que no viniera a este viaje contigo.
—¿Por eso dudabas?
Jay guarda silencio.
—Es increíble Jay. ¿Esto va a ser siempre así? ¿Con Laurent de por medio? —los ojos de Christian se vuelven vidriosos—. Da igual, no contestes. Voy a dar una vuelta.
—Christian...
Él no le escucha, sigue caminando en línea recta mientras las lágrimas se deslizan por sus mejillas.
ESTÁS LEYENDO
EUFORIA [CLIMAX 2]
Novela JuvenilSecuela de CLIMAX. La historia de nuestros protagonistas continúa; nuevas amistades, nuevas parejas, más amor, más compañeros, más placer.