Capítulo 16

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MINJEON

- ¿Algo que quieras decir en tu defensa? - hablé sentada desde la puerta de mi habitación.

- Perdón, no fue mi intención que nos sacarán de la clase - mencioné con la cabeza agachada.

- Bien, como el culpable acepta la responsabilidad de sus actos, se procederá a dar el veredicto.

- Piedad, por favor.

- El castigo será... - me puse de pie - un mes sin postre en la cena.

- ¡¿Qué?! - levanté mi rostro asustado - este juego ya no me está gustando.

- ja ja ja, es broma, tendrás que conducir todo el camino de regreso a casa.

- El camino fue muy largo - me queje cruzándome de brazos - ¿Qué fue lo que yo hice para merecer un castigo?

- Soobin, no puedes andar coqueteando conmigo, incluso si es solamente por molestar, sabes que puedo sonrojarme fácilmente y luego causa malos entendidos.

- Pero...

- Ok, ok, te perdono.

- Yo iba a decir que me gusta hacerte sonrojar, no pensaba disculparme por eso - le dedique una gran sonrisa - ahí está otra vez ese lindo rojo que adorna tus mejillas.

- ¡Basta! - tapé mi cara con mis manos.

- Iré a comprar gomitas, ¿Quieres que te traiga algo de regreso?, o ¿Quieres ir conmigo?

- No gracias prefiero quedarme aquí, me duelen las piernas.

- Está bien, ve a descansar, te avisaré cuando sea hora de cenar.

- Ok, gracias.

SOOBIN

Entre al lugar y compré mis gomitas y unos chocolates, al salir pude observar al otro lado una tienda de recuerdos, me dio curiosidad por saber que había entonces entre.

- Buenas tardes, bienvenido, puede observar y si le gusta algo no dude en comprarlo.

- Claro, muchas gracias.

Camine por los pasillos observando a los dos lados, mi mirada se dirigió al frente y pude notar una mesa llena de peluches, uno de ellos llamo mi atención, camine rápido y con una sonrisa en mi cara tomé el peluche entre mis manos, era una bonita oveja gris con un lazo rosa en la cabeza y zapatos del mismo color, era realmente linda.

"Si le gusta algo no dude en comprarlo", esa frase vino de inmediato a mi cabeza.

- Tú te vas conmigo - le hablé a la oveja, si alguien me mirara seguro pensaría que estoy loco - serás el regalo perfecto.

Camine feliz hasta llegar con la empleada para pagar por mi compra, ella lo puso en una bolsa y me entrego una tarjeta junto con un bolígrafo.

- Supongo que es un regalo.

- ¿Cómo lo supo?

- Usted tiene una voz fuerte - reí.

- Oh, lo siento - me disculpé un poco avergonzado.

- Escriba en la tarjeta algo para la persona a quién se lo quiera regalar.

- ¡Claro!

Llegué muy emocionado sosteniendo la bolsa de regalo en mis manos, pensaba entrar y guardarlo para dárselo después, pero no contaba con que Minjeon estaría sentada en la sala mirando su celular.

- ¡Llegaste! - bajé mi mirada a sus manos - ¿Qué es eso?

- ¿Eso? - escondí el regalo detrás de mi espalda, tratando de ser discreto, obviamente no funcionó.

- ¿La loca volvió a molestarte y ahora te regala cosas?

Minjeon se levantó muy enojada y camino hacia la entrada en donde yo estaba parado, estaba haciendo todo tan rápido que apenas y me dio tiempo de hablar antes de que termine de atarse las zapatillas y salir del lugar.

- ¡No!, no es nada de eso - sostuve la parte de atrás de su suéter para detenerla.

- ¿No?, ¿Entonces? - me di la vuelta confundida y ya más calmada.

- Esto - levanté la bolsa - esto... son mis gomitas - sonreí tratando de verme sincero, aún no me sentía listo para darle mi obsequio, mucho menos después de lo que dijo antes de ir a comprarlo.

- ¿Gomitas en una bolsa de regalo tan grande?

- Eso ya es asunto de la tienda - levanté mis hombros.

Ella me miro no muy convencida, pero supongo que funcionó, ya que volvió a su sitio sin mencionar nada más.

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SOOBIN

Hoy era nuestro último día aquí, me divertí mucho estos días, las actividades de hoy también fueron entretenidas, luego de aprender a sembrar y cuidar algunas plantas, fuimos con la maestra a recolectar algunas frutas, nos ayudaron guardando en cartones todo lo que pudimos tomar para que podamos llevarlo a casa y en el camino a dejarlo en el auto, la otra maestra nos detuvo un momento para entregar los dulces que no acabamos de hacer ayer, ya que mandó a Minjeon a descansar y a mí a cuidarla.

- No quiero irme - susurré parado frente a la puerta con el número 9.

- Fue divertido, es la primera vez que disfruto tanto de un viaje.

- Supongo que es hora de regresar - mi mirada choco con la de ella.

- Vamos - cargué mi mochila - ¿Llevas todo?

- Sí, me aseguré de no dejar nada antes de salir.

Dejamos las cosas en el auto y caminamos a la casa principal para poder cancelar lo que faltaba por pagar, los empleados como siempre fueron muy amables.

- Alguien me llama - miré mi celular - Soobin, te espero afuera - le entregué mi tarjeta de crédito y salí del lugar.

- Está bien.

- Entonces pagará con tarjeta ¿verdad?

- Sí - se la entregué y ella procedió a realizar el cobro para devolverme la tarjeta.

- Listo, espero hayan disfrutado de su viaje, tengan cuidado en el regreso a casa.

- Muchas gracias a ustedes también.

Hice una reverencia y me di la vuelta para salir, sin embargo, la voz de la chica me detuvo.

- Espere, olvida esto.

Me entrego un sobre el cual abrí para ver qué había en su interior, al sacar lo que estaba adentro me di cuenta de que eran fotos.

- Nuestro servicio incluye fotos tomadas por el personal mientras hacían las actividades que escogieron.

Mire y es cierto, eran fotos nuestras, en ellas estábamos mirando las estrellas, sentados frente a la fogata, riendo mientras subíamos a la montaña, sentados frente al río, Minjeon atándose las zapatillas, incluso tomaron una foto de cuando nos caímos ja ja, había muchas fotos de nosotros en estos tres días.

- Si le parece, puede dejar una de ellas en nuestra pared, como varias de las personas que nos visitan.

- Me parece genial - sonreí.

La chica me paso un bolígrafo, de entre todas las fotos escogí una en la que Minjeon esta de puntillas intentando alcanzar una fruta, mientras yo estaba a lado levantando mi mano fácilmente tomándola, por alguna razón me pareció tierno.

- Que lindo, por fin alguien que escribe algo con verdaderos sentimientos en la foto, la mayoría cree que queremos que pongan cosas como "El lugar y su servicio es excelente", me gusta mil veces más lo que tú pusiste en la tuya.

Yo simplemente sonreí un poco sonrojado.

Salí del lugar mientras que la fotografía se quedó en la parte alta de la pared decorada por la frase "Me pareces tierna, empiezo a sentirme de alguna forma raro mientras estoy junto a ti, pero esa sensación me encanta o tal vez me encantas tú".

Máscara ( Soobin y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora