Capítulo 46

42 4 0
                                    

LIANA.


El brillo del sol deslumbra mis adormecidos ojos, mientras sus rayos calientan mi fría piel "Dicen que el tiempo todo lo cura y todo lo puede, que las heridas llevan tiempo y mucho cuidado, a veces me pregunto si podré llegar a sanar esa gran y profunda herida que tiene mi corazón, que nadie puede ver pero que me causa un dolor agonizante. Honestamente espero que, yéndome lejos, pueda superar todo esto y pueda iniciar de nuevo".

Veo el auto de Theo entrar a la cochera, mi hermano la está pasando tan mal que mantenerme ocupada cuidando de sus bebés es lo mejor que puedo hacer por él y por Marily; ella me dio la fuerza que creí que no tenía para luchar por lo que amo, por lo que siempre quise, ella no tenía por qué creerme ni mucho menos confiar en la palabra de una mentirosa, y aun así hizo todo lo necesario para traerme a esta familia, a mi verdadero hogar.

Quisiera irme ahora mismo, estar en esta casa es un constante sufrimiento; verlo andar por toda la casa, verlo jugar con los bebés, verlo mirarme a un cuándo nadie más lo ve, todo eso esta siendo una agonía. Se siente cómo si caminara sobre pequeños cristales, tan diminutos, pero tan hirientes.

Regreso la vista a los tantos bocetos  que tengo regados por todo el escritorio, la mayoría son dibujos de John, algunos son recientes: otros son de nuestro pasado y los demás son del futuro que imagine a su lado, fantasías que creé para nosotros. Es lamentable que los sueños no se cumplan, que no importe el esfuerzo, que... ¡Maldita sea! Estoy tan cansada de no poner hacer que mi corazón deje de sangrar por un amor que lo atormenta constantemente, tal vez podría sanarlo si él no me amara, pero soy consiente de que me ama tanto como yo lo hago. Ambos sufrimos por no poder dejar de lado eso, por no poder ignorar lo que nuestro corazón constantemente pide, mi mente suplica verlo y mi piel grita ser tocada por él.

Se quedo tan dentro de mi ser, que mis pensamientos le pertenecen, que incluso cuando despierto lo que anhelo es poder verlo.

No puede creer que lo deje entrar tanto, que le di todo de mí de una manera desmedida, trabaje tanto en evitar salir lastima, me esforcé en no compartir mis sentimientos con nadie y termine perdiendo ante él y su coqueta sonrisa. Todo esto pudo ser evitado si no hubiera caído ante sus encantos como si de una ilusa adolescente se tratara.

—Deja de culparte —me enderezo y finjo estar bien.

Continúo pintando y con cuidado de ser vista, escondo los tantos bocetos de John.

—No es culpa mía —sigo detallando el boceto de Sam. Cierra la puerta y de reojo veo como se sienta mi cama —¿Todo está bien? ¿Necesitas algo? —la mano me tiembla de la frustración y sin poder evitarlo, rayo el rostro de mi bella sobrina "¡Maldita sea!"

—No necesitas ocultar tu sentir, sé que John puede ser muy tonto —mi mandíbula se tensa al escuchar sus muy acertadas palabras —Liana, intentar comprenderlo es algo que te causa daño y decepción —borro el rayón y sin querer daño a un más el dibujo.

"¡No puede ser, no puede ser!" Intento arreglarlo, pero todo empieza a verse horrendo. La ira entra haciéndose paso he intento respirar para calmar mi cólera, que sigue en aumento. Se calla y sigo intentado arreglar los errores que cometí, pero nada parece arreglarse, todo se está tornando tan horrendo y sin forma alguna.

Así de mal esta yendo mi vida, no puedo tomar una sola decisión bien, nada puede ser arreglado, todo el boceto esta arruinado, así como mi vida ¿Cómo podré sacar a John de mi corazón? Le pertenezco completamente... Mis muy intensos pensamientos y deseos, mi rebelde y vivo corazón, y sobre todo, mis recuerdos, tengo tantos que no importa los que tenía, solo lo recuerdo a él, solo pienso en él.

REDENCIÓN © (Tercera parte de AMOR).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora