Coherencia.

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Para cuando Vicente vio a María, esta estaba corriendo detrás de la ambulancia junto con Sergio, no podía ser verdad que esa noche existiera más caos del que ya se desataba adentro, Adán y Víctor fueron donde los organizadores para excusar a Alana, Sergio siguió en la ambulancia y María se topó con Vicente quien no tenía sentido de la coherencia en ese momento.

-¿Fue Logan?- dijo en cuanto ambos subieron a la camioneta con intenciones de ir al hospital

-¿Qué?- María se quedó fría en ese momento

-Me lo dijo María, fuiste con él, de todas las personas ¡Fuiste con él!- golpeo el volante furioso

-Vicente no es...-

-¡Porque no podemos tener un puta momento de paz!- volvió a gritar haciéndola encogerse en su haciendo- ni dos horas nos dura, ¡Ni dos putas horas!-

-Yo no sabía...-

-¡Claro que no lo sabias! ¿Crees que yo quería que tú supieras todo eso? ¡Por supuesto que no! Pero te metes María, te metes en todo, esa maldita sangre en tus venas no te deja pasar nada-

Eso era todo, si, estaba muy segura de que lo amaba, y de que había hecho mal al meter a Logan en eso, pero no se quedaría en ese auto a ver cómo le gritoneaba como un niño berrinchudo. No podía mas, tenía razón, la paz no estaba hecha para ellos, y si era así, seguramente era una señal para dejarse de lado.

María bajo de la camioneta aun con los gritos de Vicente detrás, corrió tanto como pudo hasta llegar a la avenida y poder encontrar un taxi. Vio a Vicente tirar la texana al suelo furioso, estaba fuera de la coherencia, y esta vez ella no estaba dispuesta a liderar con todo aquello.

Cuando llego al hospital se concentró en una sola cosa, en su prima, se había desplomado al final del rodeo y todo parecía desplomarse con ella. Al entrar la mirada de Sergio le lleno de angustia, no pudo ni responder lo que le decía, estaba en shock negando, solo negando. Y entonces lo supo.

Alana estaba embarazada...

Lo que paso después de eso fue un caos, todos los que esa noche estuvieron presentes acordaron guardar silencio, Alana parecía fuera de sí, mirando la nada sosteniendo su estómago como si no pudiera creerlo. María intentaba hacerla sentir mejor, decirle que todo estaría bien, pero la verdad era que muy probablemente todo se iría a la mierda.

Todos ellos regresaron juntos a La Ilusión, en cuanto Alba vio llegar a toda esa gente junta estuvo segura de que algo estaba mal, Sergio caminaba lentamente como si cada paso le doliera. María y Adán caminaban al lado de Alana quien parecía una hoja seca y Víctor y Vicente discutían aun dentro de la camioneta. ¿Qué había pasado? Incluso Sofía y Adolfo llegaban con ellos.

-¿Qué paso?- Alba tomo a Vicente por sorpresa al día siguiente en la cocina

-El rodeo fue una mierda, descalificaron a Alana-

-Eso no es lo que te estoy preguntando, todos traen cara de que se los está llevando la mierda y Sofía ni si quiera quería hablar, eso está muy raro- su tía volvió a cerrarse delante de él

-Mira Tía, estoy bastante nervioso y aunque no lo crea tengo mis propios problemas-

-¿Qué sucede con María?- se quedó frio antes de poder escapar de la cocina- Magdalena me ha dicho todo, ¿Qué hiciste Vicente?- y recargándose en la puerta dio un largo sorbo a su café

-Todo se me está yendo de las manos tía, todo, y parece que no puedo ser un hombre decente ni por un minuto-

-Nunca fuiste uno- dijo Alana levantando los hombros- pero siempre lo fuiste alrededor de ella, no fuiste un desgraciado aun cuando pudiste y sé muy bien cómo has pasado estos años intentando sacarla de tu vida-

Las FloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora