Volvíamos como otro día cualquiera del instituto, solo que hoy era diferente, parecía un lunes como otro de esos que tanto odiaba, pero este lunes era distinto, mañana no había clase, ni en toda la semana, una extraña fiesta de Londres, pero como no había clase, nos encantaba, llegamos a casa de Laura, siempre iba con ella y volvía del instituto, realmente éramos inseparables, íbamos a todos los sitios juntas, me despedí de ella.
Yo: Acuérdate, hoy a las 5 en mi casa, mi madre y su novio se van, y no quiero estar solita.
Laura: Que si, tranquila, a las 5 estaré allí puntual.
Yo: Vale, allí te esperare.
Nos despedimos con un abrazo y dos besos, yo seguí con el camino hacia mi casa, mi madre, Elena, y su novio, Mario, estarían a punto de irse, y efectivamente, estaba en lo cierto, las maletas ya estaban en el jardín, no se a donde se iban, me dijeron que si quería ir con ellos, pero prefiero quedarme en Londres, y además la próxima semana son los exámenes finales y estamos todos un poco estresados.
Elena: Hola cariño. – Me dio un beso.
Yo: Hola mama, hola Mario.
Mario: Hola.
Yo: ¿Cuándo os vais?
Mario: Ahora mismo enana, así que pórtate bien eh.
Yo: Como siempre, que pensáis que soy.
Mario me miro riéndose, siempre me decían lo mismo, sabían que era responsable, ya me dejaron sola más veces, e incluso más tiempo, y cuando llegaron, no había ninguna queja por parte de los vecinos.
Elena: ¿Va a quedarse Laura verdad?
Yo: Si, a las 5 vendrá, y tranquilos, estaremos bien.
Mario: Os hemos dejado comida preparada, tienes dinero en la habitación, y sabes que si pasa algo, llámanos al móvil.
Yo: Como siempre, iros tranquilos, pasároslo bien en…en…a donde vayáis.
Elena: A Italia cariño, mira que te lo dije.
Yo: Pues eso, a Italia, traerme algún regalito eh.
Elena: Que morro tienes.
Mi madre y Mario se despidieron de mi, subí a mi habitación a dejar la mochila, y a cambiarme de ropa, no iba a estar todo el día con este asqueroso uniforme, baje a la cocina y cogí la comida, me fui al salón y puse la tele, empezó a hacer zapping y no había nada, así que opte por poner MTV con música, cogí mi móvil y empezó a tweetear un poco con mis amigos, de España y de aquí.
Cuando acabe recogí un poco la cocina, y subí a ordenar mi habitación, tenía toda la ropa tirada por el suelo, así que tire la sucia a lavar y la limpia la metí en el vestidor, si un vestidor, tenis tanta ropa que mi madre decidió hacer obras en casa y ponerme un vestidor, a mi me encantaba, coji el portátil y lo baje al salón, y uno de mis Cds de Justin, y lo puse en la mini cadena con la música bastante alta, me gusta Justin Bieber, su música, sus canciones, no me considero believer ni mucho menos, no se toda su vida, no tengo la habitación empapelada con sus fotos, ni nada de eso, tan solo me gusta, estuve haciendo un poco el tonto, imitándole con el mando de la tele, hasta que picaron al timbre.
Laura: Ya estoy aquí, puntual ehh son menos 5.
Yo: Así me gusta jaja, pasa.
Laura: Tienes el nuevo disco de Justin, si se agotaron a los 5 minutos de salir a la venta, no lo pude conseguir.
Yo: Sabes que Mario tiene sus contactos.
Mario trabajaba en una discográfica musical, no conocía a famosos ni nada, tan solo creaba algunos temas y arreglaba la voz de numerosos artistas.
ESTÁS LEYENDO
They don't know about us.
FanfictionClaudia, una chica de 15 años, viviendo en Londres con su madre y el novio de esta, su mejor amiga Laura, y dos chicos que les roban completamente el corazon, esta es mi historia y la de mi mejor amiga.