The Stripper | ᴘᴊᴍ + ᴊᴊᴋ

Capítulo 13: Regalo, paseo y conversación

Revisé todos sus compromisos y nada, Jungkook se quedaría en la empresa todo el día ¿Podría ser peor mi mala suerte? La noche pasada fue un tanto problemática, nunca en mis planes pensé que estaría al lado de Rose. Después del casi beso con Jungkook, salí un poco distraído del lugar. 

....

—. ¿Está todo bien, Jimin?.— oí la voz de la chica a mi lado.

—. Sí, claro. Solo tengo un poco de dolor de cabeza, ¿Puedes llevarme a casa?.— Recibí una mirada molesta, sé que ella esperaba más aquella noche, pero con Jungkook a pocos metros de mí, era prácticamente imposible pensar en Rose.  Alcé los hombros y tomé el abrigo que había llevado por si acaso.

—. Claro, vamos te llevo a casa.— Miré por última vez la mesa donde estaba Jungkook antes, pero sin señal de él por ahí, ¿Ya se había ido o había salido con algún chico? Kim Seokjin tampoco estaba ahí, seguramente ellos ya no estaban más aquí. 

El camino de vuelta fue en puro silencio, se notaba a kilómetros cuanto aquella noche había sido un fracaso, aunque no tanto, Taehyung y Hoseok salieron ganando aquel día, pues Seulgi y Hyori se mostraron muy buenos partidos mientras que Rose se molestó y se quejó desde el momento en que puso sus ojos en Jungkook. ¿Será que ella sentía alguna cosa diferente en nosotros?

—. Hemos llegado.— Dijo deteniendo el auto enfrente de mi edificio. 

—. Gracias por la noche, me gustó.— Mentí, o bueno, no del todo, ver a Jungkook habia sido maravilloso. 

—. ¿Te gustó? Creo que fue algo irritante, pero puedes entenderme, ¿Verdad? Algo en mí no le gusta ese hombre.—

—. ¿Jungkook? No entiendo, es una buena persona.—

—. Contigo, ¿No es así? Lo que me parece muy extraño, él solo es un hombre inútil y arrogante.— 

—. No, lo digo porque apenas lo conocemos. Además, no deberías hablar de él así.—

—. No tengo miedo de él, Jimin. Apenas llegó y estropeó todo, ¿Recuerdas las horas absurdas que pasaste trabajando en la hoja de balances?.—

—. Rose de verdad. Estoy muriendo de dolor de cabeza, y no quiero hablar de trabajo ahora.— Hable irritado. 

—. Discúlpame, fui una tonta. Sé que la noche no fue de las mejores, pero podemos mejorarla.— Mire sus ojos, que por cierto eran lindos, pero no eran los que yo quería mirar ahora. Baje mi cabeza, pensando en la forma más educada de decirle que por hoy ya había sido suficiente. Sin embargo noté como se acercó más a mí, tocando levemente mi barbilla, haciéndome mirarla nuevamente. 

—. Eres muy guapo, Jimin.— 

—. Gracias, pero me tengo que ir. Nos vemos mañana.— Salí del carro sin más.

....

—. Te quiero en mi oficina en dos minutos.— Escuche la voz ronca de Jungkook, haciendo estremecer todo mi cuerpo. Eleve la vista y solo lo vi entrando a su oficina, estaba rezando a Dios para que no recordara nada de la noche anterior. Agarre mi agenda, y ajustando mis lentes en mi rostro, camine lentamente hacia a su oficina. 

—. Señor Jeon.— Se movió quedando frente a mí, mirándome con sus ojos marrones brillantes, me sentía débil todas las veces que lo miraba. Me di cuenta que su mirada recorrió todo mi cuerpo, haciéndome tragar en seco, vi su expresión tensa. Jungkook cerró los ojos con fuerza, negando con la cabeza.