The Stripper | ᴘᴊᴍ + ᴊᴊᴋ

Capítulo 18: Un buen día

¿Conocen esa sensación de cuando estás durmiendo y te despiertas con una energía diferente? ¿Una buena energía? Así es como desperté hoy, estirándome en la enorme cama de mi habitación sintiendo todos los músculos de mi cuerpo muy relajados. Abrí los ojos con cierta dificultad y mirando alrededor de la habitación lujosa en donde había sido hospedado, la casa de los Jeon era digna de envidia, todo en ella era muy bonita, e incluso lujosa pero todavía se podía sentir un ambiente acogedor.

Rodé sobre la cama un montón de veces sintiendo el dulce olor que emanaban las sabanas. Hasta que Jungkook entro en mis pensamientos. No podía imaginarme lo difícil que estaba siendo para él enfrentarse a la enfermedad de su padre. De lo poco que sé, el Alzheimer era incurable, y no hace más que empeorar con el tiempo. Para mi Jungwoo era muy joven para tener algo así, pero desafortunadamente, la enfermedad no elegía por edad o género.

A pesar de le enfermedad, Jungwoo se veía feliz, siempre con una sonrisa en la cara. Haneul y Soyeon parecían estar conformes viviendo con la enfermedad. Solamente para Jungkook era más complicado, y no podía juzgarlo. Ayer por la noche lo dejo realmente muy frágil como para dejarlo, solo recuerdo la tristeza en su mirada y el brillo de sus ojos cuando me miró, fue desgarrador verlo así. Pero lo que realmente me sorprendió fue cuando me pidió un abrazo. ¿Me consideraba Jungkook un amigo? Pensaba que tal vez aquello solo pasó porque él estaba en su peor momento

No, Jungkook no era así, él siempre se mostraba como una persona totalmente decidida y sincera. Imaginarlo de otra manera era algo difícil para mí. Pero entonces, ¿Qué esperaba él de mí? Puede que nada, solo una amistad. Estaba claro que Jungkook había caído a los pies de Jihyun, o mejor dicho a mis pies. Pero así no era como lo quería. Yo lo quería a él, quería sentir su afecto, quería ser amado. Pero estaba claro que a ese nivel no había llegado. Jihyun conquistó a Jungkook con su cuerpo, con deseo, ¿Y yo? ¿Qué es lo que he hecho yo? Nada, no había conquistado nada en Jungkook siendo solamente Jimin.

Me levanté de la cama dejando todas esas ideas de lado. Pensar en todas esas cosas solo me confundía. Así que había tomado una decisión. Haré de este fin de semana algo especial, no me preocuparía por Jihyun, o por el hecho de que él es mi jefe. Seriamos simplemente Jungkook y Jimin, nada más.

Después de un baño caliente, me puse unos pantalones rotos en las rodillas, y una blusa gris que dejaba una parte de mis hombros al descubierto. Mi cabello se encontraba en suaves y ligeras ondas. Me miré en el espejo una última vez antes de dejar la habitación, ahora todos deberían estar en la mesa para el desayuno. Descendí las escaleras sin hacer ruido, oí unas carcajadas viniendo de afuera las cuales adiviné que eran de Jungwoo y Soyeon. No estaban en el comedor, ví a través del gran ventanal que estaban sentados afuera tomando el desayuno. Me acerqué a ellos lentamente a la mesa donde todos estaban reunidos.

—. Digamos que creo que él no lo es, pero debería serlo, él es muy guapo.— Oí como Jungwoo le decía a Jungkook. ¿Acaso ellos estaban hablando de mí? Jungkook dejó escapar una carcajada,
lanzando un pequeño trozo de pan a su padre.

—. Jugar con la comida es un pecado, buenos días a todos.— Dije mientras me acercaba a la mesa. Todos me miraron rápidamente, dejándome avergonzado. Jungkook me miró de la cabeza a los pies como si estuviera analizando todo detalle de mí.

—. ¡Buenos días, Jimin!.— Soyeon dijo animadamente.

—. ¿Ves Jungkook? Jimin es incluso religioso.—

—. ¡Papá!.— Jungkook le dio un codazo y entonces me miro.

—. Buenos días, MinMin, siéntate con nosotros.— Jungkook dijo sonriendo. ¿MinMin? ¿Me había ganado un apodo de Jungkook?