Demasiado calor

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Me encontraba en el balcón de mi habitación este daba a la entrada de la mansión habían pasado varios días desde mi llegada los suficientes para darme cuenta de todo lo que pasaba detrás de esa enorme puerta 

Al día siguiente de mi llegada me quitaron mi teléfono y me dieron otro de ultimo modelo borraron todos mis contactos disque que por seguridad al menos me dejaron mis fotos

Sofia me miraba con desprecio no la culpo después de todo como se supone que una amanté trate a la prometida de la persona que esta enamorada. Lograba presenciar como estaba detrás de Khaos y el solo la ignoraba bajo mi mirada pero sabia que luego en las noches ella estaba de vuelta bajo sus sabanas.

Por dios nada es más fácil que lidiar con un hombre extranjero ponle a una latina al frente y quedará embobado

Hablando de Khaos que cara de orto que tiene durante todo el día hasta me da miedo de hablarle porque siento que me va a gritar

Cuando tiene ganas sonríe a veces lo admito esa sonrisa era encantadora ahora entendía porque tenia tantas amantes 

Era atractivo su apariencia reflejaba poder y autonomía su cabello y sus ojos esa cara de malo y la pistola en su cintura me ponía mal 

Si no tuviera autocontrol...

Dos camionetas negras salen del garaje esperando en la puerta principal que de ella salió Khaos acompañado por dos hombreas mas ambos cargaban bolsas negras que juraba que en su interior habían armas y suministros de balas. El levanto su vista y cuando me vio sonrió antes de entrar la camioneta 

Entre a la habitación nuevamente recostándome en la cama no había dormido bien desde mi llegada pasaba las noches en insomnio caí en sueño profundo.

3 horas después

Me despertó el movimiento en el pasillo y las voces alarmadas revise el reloj de mi celular marcaba las 20:00 pm 

Me levante descalza saliendo de mi cuarto viendo a Sofia, Rosa y Marcos peleando al frente de la habitación de Khaos

— Que sucede — pregunte acercándome a ellos

Ante mi presencia se quedaron en silencio, levante mi ceja esperando una respuesta

— El señor tiene mas confianza en mi yo debería entrar — alego Sofia 

— Entiende mujer que el no te quiere cerca — le contesto Marcos

— ¡Que mierda sucede! —grite

— El señor esta herido, no admitió que el médico lo revisara alguien tiene que suturar su herida—hablo la mujer —Y yo se, asique yo debería entrar

— La señorita también sabe primeros auxilios debería atender ella al señor —alego Belén

Rosa me miro expectante y suspiro con preocupación

— Talvez el no te haga nada, Marcos dale el botiquín

Sofia gruño de furia molesta y sus ojos se posaron en mi mirándome de arriba abajo

— Yo soy más cercana al señor

— Dámelo lo haré yo —afirme

Suspire antes de entrar a la habitación

Khaos estaba sentado a los pies de la cama con un vaso de whisky en su mano, sus ojos se posaron mi su mirada fría me hizo estremecer, mis ojos vagaron por su figura deteniéndose en la venda de su pecho

— Esperaba a otra persona —hablo

Me miraba fijamente y pude sentir mis mejillas calentarse

— No la dejaron pasar

El se enderezó y me hizo una seña para que me acercara, hice caso omiso 

— No tengo anestesia, asique te va a doler —informe

—Solo hazlo

Me arrodille bajo su mirada saque los materiales y retire su venda con cuidado viendo la cantidad de sangre que corría

Me puse unos guantes, pose mis manos en su abdomen trabajado y empecé suturar su herida el hacía muecas pero no soltaba los normales jadeos de dolor

Cuando acabe tire los apósitos y los guantes

— Ten buena noche Khaos

— Descansa y gracias

Antes de salir el tomo mi muñeca y me acerco a el estaba a centímetros de sus labios su respiración era pesada y además estaba casi desnudo me estaba poniendo nerviosa

— Que sucede?—susurre

Trate de alejarme pero el me apretó al muñeca con fuerza, acerco su mano a mi mejilla y deslizo su pulgar acariciando mi piel

Su aliento caliente estaba tan cerca, podia sentir sus músculos tensarse al sostenerme, el calor se presente en mi cuerpo, mi corazon latía con fuerza sobre mi pecho trate de desviar la mirada viendo al suelo notando un libro no pude ver el titulo pero cuando Khaos me soltó

Sonreí a boca cerrada y salí corriendo de su habitación

Afuera me detuvo Sofia, sus ojos me miraron con extrañes al notar el sonrojo fuerte en mis mejillas

—¿El esta bien?—pregunto preocupada

Asentí ante su pregunta

— Si estas tan preocupada entra a verlo —dije

— Cállate no me digas que hacer no creas que as ganado lo recuperare no te preocupes  dijo entre dientes

— No puedo permitirlo los hombres también sufren aunque no lo demuestren—respondí

— Es bueno soñar pero no demasiado te afectara el cerebro— Susurre contra su oído—Descansa

Me retire a mi cuarto el sueño se me había pasado asique me puse a leer 

Hasta que escuche un ruido en la planta baja...

The red kingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora