La hermana de Messi se enamora de un delantero de River, pero luego recuerda que está a nada de casarse con su novio. ¿Qué pasará en la vida de TN? ¿Por cuantos obstáculos deberá pasar para conseguir su felicidad? ¿Estos obstáculos harán que ambos j...
— Hola disculpe, nos acaban de robar el auto acá en dos cuadras — Lucas hace una maniobra rara con el brazo indicandole al de seguridad en donde le robaron el auto a Enzo — ¿Puede llamar a la policía o hacer algo? — pregunta desesperado.
— ¿Bebieron alcohol? — el hombre de seguridad lo ignora.
Todos estábamos viendo la secuencia desde la cámara de seguridad, dentro del salón; nos estábamos cagando de risa.
Afuera estaba Lucas con Enzo.
— Disculpa, no se si entendiste... Me acaban de robar el auto — le contesta Enzo a Sergio, el hombre de seguridad. Ambos le estaban haciendo una joda a Lucas.
Detrás de todo esto, un amigo de Enzo se hizo pasar por un chorro, robándole el auto y dejándolo a cinco cuadras del salón.
— Para un cachito — Sergio hace una pausa — ¿Ustedes no son los que juegan en River? — pregunta comenzando a emocionarse.
— Si — suspira Enzo actuando — Si queres nos sacamos una foto, pero te estoy pidiendo un favor — suplica.
Todos nos quedamos perplejos por la actuación de Enzo, pensamos que se iba a cagar de risa, pero se la estaba re bancando.
— Por favor — Sergio finge dejar de ser profesional y comienza a sacarse selfies con ambos.
Lucas se quería matar.
— ¿Podes llamar a la policía? — pide quejándose. — No tengo señal acá.
— Mira pibe, lo único que puedo hacer es que entren al salón, tomen un poco de agua y te recupero el auto en menos de una hora — responde Sergio suspirando.
— ¿Cómo? — pregunta Enzo haciéndose el que no entendía.
Yo miro el reloj y y eran las 00:00hs. Ya era el cumpleaños del Chino.
— Nos está boludeando, boludo — Lucas rueda los ojos — Dejá, este boludo no va a hacer nada — se aleja.
— Estoy para unos tragos — Enzo entra al salón corriendo, dejándolo solo a Lucas en la entrada.
Claramente iba a entrar.
— ¡Ya viene! — susurra Enzo apareciendo con nosotros. Todos hicimos silencio y nos quedamos esperando a que entre.
— ¿Chino o Lucas? — pregunta la mamá susurrando.
— ¡Chino! — respondo rápido.
Las puertas se abrieron y las luces se prendieron. — ¡Feliz cumpleaños, Chino! — todos gritamos dándole una gran sorpresa.
— ¡Carolina! — Lucas se abalanza al verme — ¡Hija de puta! — me abraza fuertemente.
Los abrazos de Lucas eran los más confortantes que existían. Pude abrazar a mi mejor amigo después de tantos meses, lo había extrañado demasiado. Todo lo malo dejó de sentirse malo.
carolinamessi
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.