incluso siendo reconocido, nada es fácil - julian alvarez (PAUSADA)

Hi Manchester

El café por suerte se bebió rápido al igual que cómo pasó la hora de la escala.
Me despedí de Charles y quedamos en seguir en contacto pero de todas formas aunque yo le pusiera toda la onda, me ponía un poco mal que Charles se sienta así y yo no pueda hacer nada.

Pero tampoco voy a arriesgar todo por un hombre que te pinta todo de rosas para pasar una noche.

Embarqué otra vez y viajé sola (gracias a Dios) donde pude acostarme a dormir un ratito, ya que al rato me desperté por varias notificaciones de WhatsApp.

Amor❤️
QUE BUENO
mejor si venís ahora
es tan aburrido vivir sin vos
calculo que ya estás por llegar

buen día
ya estoy llegando al aeropuerto

ya salgo a buscartee

nono
tranqui
ya me están esperando
prefiero que vayas haciendo el desayuno
en 20 estoy por casa
wtf que raro es decirle casa a un lugar donde todavía no pasé la noche

Jajajaja bueno dale
te amoooo

yo más ❤️

Mientras desembarcaba, estaba pensando en como iba a explicarle a Julián el contexto de las fotos que se estaban viralizando por Internet. No me había dicho nada por mensaje, pero seguramente fue porque recién abría los ojos.

Esperé un par de minutos luego de recibir mis dos valijas y al salir, ya me estaba esperando el chofer que contratamos con Julián durante estos meses.

Yo podía manejarme sola y tampoco me gustaba que la gente trabajara para mí y mi familia, pero en este momento la situación no era tan favorable para que me vean manejando por Manchester cuando justo mi ex se acaba de instalar en la ciudad.

Patricia seguía con nosotros y la relación era muy buena, siempre nos acompañaba a todos lados cuando era necesario pero en los planes familiares, ella era una más con nosotros. No era una simple niñera para nosotros.

Después de mucho tráfico y remeras celestes por cafeterías en la ciudad; Louis, el chofer, se detuvo en la entrada de un barrio privado, en donde muestra su carnet y lo dejan pasar.

Ya estaba en casa.

— ¡Mami! — grita Bautista corriendo hacia mí, haciendo que lo alce al recibir un gran abrazo de su parte y un poco de mal aliento cuando me dejó besos por toda la cara — Te extrañé mucho — confiesa sin separarse.

Y tampoco quería que se separara. Sentí que parte de mí se fue con él y no quería estar lejos de él nunca más.

— Yo también — lo miro con amor mientras sigue a upa mío — Parece que creciste un montón — me río al saber que estaba sonando exagerada.

— Que maricona que sos — opina Julián en joda.

— ¿Maricona? — pregunta Bautista — Si vos ayer te pusiste a llorar porque extrañabas a mamá — confiesa el menor defendiéndola.

— ¿Cómo vas a contar eso? — susurra Julián acercándose a Bautista para comenzar a hacerle cosquillas, escuchando las risas del menor por toda la casa.

(...)

Mientras estábamos desayunando, Patricia nos dijo que se iba a correr por el barrio ya que siempre hacía eso también en su rutina en Argentina, por lo que éramos Bautista, Julián y yo. Ese día por la tarde iba a ser la presentación de bienvenida de Julián en el City, por lo que la charla en la mesa y la televisión era sobre eso.