La hermana de Messi se enamora de un delantero de River, pero luego recuerda que está a nada de casarse con su novio. ¿Qué pasará en la vida de TN? ¿Por cuantos obstáculos deberá pasar para conseguir su felicidad? ¿Estos obstáculos harán que ambos j...
El resto del día fue tranquilo y me recomendaron que me quede haciendo reposo toda la tarde, aunque me hice la boluda y a la noche fui al partido de Brasil igual. Esa noche la pasamos con los Álvarez, ya que nos habían invitado a cenar y accedimos a la invitación, a pesar de que Julián no estaba presente porque tenía que cumplir con la concentración en el hotel en el que se hospedaban, quitando el hecho de que lo dejaron salir por urgencia hoy al mediodía por lo que me había pasado. No obstante, Agustín, mi cuñado, había comprado una entrada para ir a ver el partido de Brasil y nos había tocado en el mismo sector, por lo que coordinamos en ir los tres juntos; Agus, Bauti y yo.
agualvarez3
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carolinamessi
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Ver a otra selección jugar después de ver que nosotros perdimos el primer partido, era algo un poco extraño.
Si bien ya había visto un partido de Brasil durante un Mundial, era otra cosa tener que verlo sabiendo que podían ser un próximo objetivo a vencer en un futuro. Brasil es una selección que siempre es candidata.
— ¡Dale Ney! — le grita Bautista al brasileño cuando se acercaba a un extremo de la cancha para hacer un tiro de esquina.
Y lo hace espectacular, pero no se le dió. Iba a ser un gol olímpico, pero el arquero serbio desvió la pelota evitando el gol de Neymar.
— ¡UHHH! — se escucha en el Lusail.
— Caaasii — habla Agustín.
— Iba a ser buenisimo — opina Bautista optimista.
Pocos minutos después, Raphinha se acomoda y patea la pelota hacia el arco con toda sus fuerzas, pero el arquero lo ataja sin problemas.
Brasil sufría por los goles que se estaban perdiendo. Terminando así, 0 a 0, el primer tiempo.
Mientras esperábamos a que comenzara el segundo tiempo, me fui a comprar unos snacks para comer, cruzándome con algunos hinchas que me pidieron fotos, las cuales acepté sin problema; y al regresar a mi asiento, comenzamos a charlar con Agustín sobre las fiestas, el partido contra México, entre otras cosas, y también nos sacamos fotos los tres y las enviamos al grupo de la familia.
