Capítulo 20: Me jodería un millón de veces más solo por ella

31 5 0
                                    

Matthew Adams

Solté un suspiro.

No me gustaba ir caminando al instituto, pero que mas da, mi madre no me deja usar la moto por haberme peleado con el imbécil de Frank, ella no sabe el motivo de la pelea y tampoco se interesó en saber, solo le interesaba el hecho de que su hijo resolvió las cosas de manera primitiva.

La cabellera castaña de cierta chica llamo mi atención, me acerqué sin hacer ruido y la abracé por detrás, su cuerpo se tensó, deje un beso en su cabeza, ella pareció relajarse.

- Matt - dijo antes de girarse.

Sus ojos marrones me miraron con felicidad, era agradable ver que se alegraba de verme, se sentía... Bien.

Mi corazón se aceleró al ver que acercaba su rostro al mio, estampó sus labios sobre los míos, el beso fue lento, pude detallar cada chupón y mordida a la perfección, la sensación que me causaba Melany era jodidamente bien, pero eso me daba miedo, porque ella tenia el poder de destruirme, pero saben algo, valdría la pena ser destruido por ella, porque siempre nos van a hacer daño las personas, solo debemos encontrar por las que valga la pena sufrir y estoy seguro que por ella valdría la pena el dolor, el beso se transformó en uno agresivo, lleno de deseó y pasión, baje mis manos hasta su cintura para sentir su cuerpo contra el mio, nuestras respiraciones se volvieron pesadas y entrecortadas. Nos separamos y una sonrisa se formó en mi rostro, continuamos caminando es silencio.

No sabia que decir o hacer. Sentí su mano entrelazarse con la mía, mi vista se fijó en nuestras mano unidas, luego subió hasta encontrar los hermosos ojos de Melany, que estaba algo sonrojada. En cualquier momento se me saldría el corazón por lo rápido que estaba latiendo.

Esta mujer me va a matar de lo tanto que acelera mi corazón.

Al llegar al instituto las miradas se posaron sobre nosotros y nuestras manos entrelazadas, se podían escuchar murmullos, algunas chicas miraban a Melany de una forma que no me gustó para nada, mire a Mel, se notaba lo incómoda que estaba, la jale hacia mi y pasé mi brazo sobre sus hombros, ella no se lo esperaba, lo supe por la sorpresa que había en su rostro, le sonrío y ella me devuelve el gesto, continuamos caminando hasta llegar a nuestro salón, me separe de ella y me senté en uno de los asientos vacíos.

El salón se llenó y las clases comenzaron, nos les preste atención ya que mi mente estaba en todos lados menos aquí.

Había tenido una fuerte discusión con mi padre, me estaba presionando para elegir una carrera de medicina, no quería estudiar esa carrera y el me estaba presionando demasiado, no lo hace con mala intención, se esta preocupando por mi y lo agradezco, pero tiene que tener ciertos limites.

No fui a la cafetería como de costumbre, no quería estar ahí, por lo que decidí ir al patio del instituto, me senté debajo de un árbol y apoyé mi espalda en el tronco, suspire y cerré los ojos.

- ¡Tienes que decidir! - gritó mi padre.

- ¡Lo sé! ¡necesito tiempo! -

- ¡El tiempo no dura para siempre! ¡tienes que decidir! ¡no quiero tener a un hijo fracasado! ¡si tu no elijes lo que vas a estudiar lo haré yo! -

Me dolió que dijera eso.

- Si no crees en mi, olvida que soy tu hijo -

Y después de eso me fui.

- Cariño, tu padre no lo dijo para lastimarte, solo esta preocupado por tu futuro - me dijo mi madre.

- Mamá, yo soy el único que puede elegir mi futuro, es mi decisión, es mi destino y si ustedes lo hacen por mi, tal vez termine siendo infeliz el resto de mi vida -

Un CambioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora