Capítulo 24: The Burst

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Matthew Adams

- ¿Que harás esta noche? - pregunta Víctor.

- No tengo planeado nada - dije lanzando la pelota al aire para luego atraparla.

- ¿Y Melany? -

- Fue a visitar a su abuela, por lo cual no podré verla -

- ¿Quieres ir al bar de siempre? -

- De acuerdo -

- Podríamos tocar como lo hacíamos antes, tal vez y hasta tengas admiradoras - se burla.

- No hemos tocado en años, dudo que podamos hacerlo bien -

Víctor se levanta del suelo.

- Vamos a practicar entonces - dice.

- Víctor... -

- Toquemos este viernes y si a las personas no les gusta no lo haremos de nuevo y no volveré a insistir -

- Vale - dije, me levanto del suelo y nos adentramos a su casa, caminamos hasta llegar a una habitación, al entrar veo algunos instrumentos, una batería, una guitarra eléctrica, un micrófono y un bajo.

- ¿Quien va a tocar el bajo? - le pregunto.

- ¿En serio lo preguntas? - me mira incrédulo.

- Solo llámalo -

Mi amigo sonríe, saca su celular y llama a el tercer integrante de nuestra antigua banda.

En menos de cinco minutos llega nuestro tercer integrante.

- ¡Volvió The Burst! - grita Daniel emocionado.

- No volvió The Burst, solo tocaremos esta noche y ya - le explico.

- Cállate, ¡The Burst! -

Pongo los ojo en blanco.

Me acerco a la guitarra, la conecto al altavoz, muevo mis deseos sobre esta, Víctor toca la batería siguiendo mi ritmo y finalmente se nos une Daniel tocando el bajo. La melodía al principio es normal, pero después de unos segundos subimos el nivel.

Nos dejamos llevar y sin darnos cuenta ya estaba por anochecer.

- Demonios, es muy tarde - dice Daniel - me tengo que ir, adiós ¡The Burst por siempre! - grita y se va.

- Yo también tengo que irme - le digo a Víctor.

- Tocaremos el viernes, no lo olvides -

Asiento y me voy.

Salgo de su casa y comienzo a caminar, mi celular vibra y lo tomo.

- ¿Hola? -

- Ahm... Hola, espero no haberte con mi llamada -

- Mel, no importa lo que este haciendo, siempre tendré tiempo para ti -

Se queda en silencio y estoy seguro de que esta sonrojada.

- Matt... ¿tu crees que soy... Una mala influencia? -

Mi ceño se frunce.

- No, no lo eres ¿por que preguntas eso? -

- Lo que pasa es que los vecina de mi abuela le han dicho que creen que no soy una buena persona, que soy una mala influencia para sus hijo, que... -

- Melany, deja de pensé en el "que dirá" y concéntrate en el "quien soy realmente", tus vecinos no saben quien eres, solo tu sabes lo que eres en verdad -

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