Mar
-Amiga, están hace rato tocando la puerta. -le digo a Valen cuando me atiende el teléfono.
Se escucha el barullo de la joda de Nacho de fondo juntarse con los golpes que daban en la puerta de la casa de Valentina.
Empezaron a tocar el timbre hace cinco minutos y no le di bola esperando que no sea nadie importante. Pero cuando empezaron a tocar sin parar la llamé a Valen para ver si estaba esperando a alguien o algo.
-Es Julián, boluda. Abrile. -me dijo Valen riéndose de no se qué. ¿Cómo que Julián?
-¿Cómo que Julián? -le pregunté.
Fruncí el ceño porque se escuchaba como el orto y me levanté de la cama de Valen con ganas de morirme.
-No te escucho nada, gorda. Después me contas. -Valen parecía ya estar en pedo y la conversación no daba para más, así que le corté después de decirle chau.
Me acerco a la puerta que no paraba de sonar y abro. Que pibe intenso.
-¿Por qué no abrías? -me pregunta entrando de una.
-Porque estaba muriendo en la cama pensando que iban a entrar a robar. -le digo con el ceño fruncido.
Uno se siente como el orto, quiere estar tranquilo y pasan estas cosas.
-¿Cómo que te estabas muriendo? -pregunta preocupado.
Pongo los ojos en blanco y me vuelvo a la habitación de Valen. Me tiró en la cama y me tapo con las colchas. Me siento como el orto y quiero morir. ¿Por qué me tengo que sentir así?
-¿Qué hacés acá? -le pregunté cuando entro a la habitación.
-Valen me dijo que te sentías como el culo. -dijo mirándome apoyado en el marco de la puerta.
Recién ahora caigo que tengo un aspecto deplorable y el amor de mí vida me estaba viendo así. Bueno, me siento mal, no tengo tiempo para pensar en esas cosas.
-Si, no sé que onda. A la tardecita me empezó a doler la cabeza y esperé hasta último momento que se me pase pero se volvió peor. Son esos dolores que te dan náuseas ¿Viste?
El apreta los labios y se acerca, sentándose al lado de donde estoy acostada.
-¿Te tomaste la fiebre? -pone la mano en mi frente y yo cierro los ojos-. Estás calentita.
-Valen me tomó antes de irse y tenía 37,3.
-Te voy a tomar de vuelta, perame que busco el termómetro.
-Lo dejó acá.
Lo agarré de la mesita de luz y me lo puse en la axila. No me interesaba mucho el resultado, solo quería dormir y esperar que se me pase durmiendo.
Le iba a preguntar otra vez por qué no estaba en el cumple de nuestro amigo pero volvió a hablar.
-¿Ya tomaste algo?
-Ibuprofeno o tafirol, algo así, pero todavía no hizo nada.
-Te voy a traer pañitos fríos.
Antes de que le diga nada se levantó y se fue de la habitación.
Me incorporé en la cama cuando sonó el termómetro y me pude ver en el espejo que está al lado de la cama de Valen. Estaba horrible. Con el pijama improvisado y el maquillaje fallido que se me había corrido todo. Cuando me siento mal a veces lloro porque odio sentirme mal y no poder hacer nada al respecto. Así que lloré y se me corrió todo el delineador que tanto me costó hacerme para salir. Todo al pedo, ni siquiera sé conservó para que Julián me vea más o menos decente.
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Trátame suavemente | Julián Álvarez
Romantizm¿Qué pɑsɑ cuɑndo te enɑmorɑs de tu ɑmigo con derechos? "Pᥲrᥱᥴίᥲ qᥙᥱ todo ᥲ mι ᥲᥣrᥱdᥱdor ᥣᥱ hᥲbίᥲ ᥲgᥲrrᥲdo ᥱᥣ gᥙstιto ᥲ dᥱsmoroᥒᥲrsᥱ" Julián Álvarez fanfic. Para mayores de +18 años. Publicada: 16/12/2022 Terminada: 13/05/2023 #1 en julianalvare...