Estaban volviendo al hotel a eso de las ocho de la noche. Habían estado todo el día en la playa, entre los seis la pasaron hermoso. Se metieron al mar unas cuantas veces, tomaron sol, se cagaron de risa, vieron el atardecer e incluso jugaron un partidito tres contra tres. Aunque las chicas eran bastante de madera comparadas con los jugadores de elite, pudieron pasarla bien. Obviamente ganó el equipo de Gonzalo, Valentina y Enzo, porque tenían la ventaja de tener dos profesionales, dejando a Julián, Mar y Karina en segundo lugar.
Lo que Martina no entendía, era por qué después de ese día hermoso, Julián se encontraba con tal cara de orto.
De repente la última hora en la playa, después del partido, cuando volvió de comprar un licuado de frutilla, Julián estaba con la cara larga y asilado del resto. El final de la velada lo pasó sin decir más de dos palabras y no le interesaba meterse en las conversaciones del grupo.
No sabía que había pasado, ninguno de los chicos entendió el cambio drástico que había tomado, pero tampoco nadie preguntó. Cuándo Julián se enojaba, era mejor darle su espacio hasta que se sienta cómodo de querer hablar. El tema es que se había puesto así de la nada y nadie sabía que le había sucedido.
Mar estuvo varias veces a punto de preguntarle que le pasaba, pero al ver su cara de pocos amigos se le iban las ganas. Más que nada después de que Enzo le haya hecho una broma liviana respecto y él le haya contestado con una cara tan inexpresiva, que dejó al resto en un silencio incómodo.
-Amiga... -dijo Enzo abrazando a Mar por los hombros cuando entraron al ascensor.
Cuando se ponía así era porque quería algo, Martina ya lo conocía.
-¿Qué querés?
Enzo le sonrío y la apretó contra su costado con cariño.
-Quería ofrecerte mi cama para dormir.
-Desubicado, tu novia está enfrente nuestro. -Mar bromeó y Valen los miró con una sonrisa.
Julián estaba en un rincón esperando a llegar a su piso y la otra pareja estaba en su mundo.
-Dale tarada, quiero estar un rato con Valen. Mis sábanas las cambiaron y aparte tenés buena compañía. -dijo lo último con sarcasmo, mirando a su mejor amigo por el espejo.
Martina puso los ojos en blanco, le ponía de mal humor como se había puesto Julián, así que quería aprovechar la ocasión para hablar a solas con él. Presentía que su estado de ánimo tenía algo que ver con ella, o con Emilia quizás.
-Bueno, vayan. Pero después de comer vemos...
Enzo, Valentina y Karina (que se quedaba en ese piso también) bajaron al llegar al sexto y el ascensor siguió su rumbo al décimo.
Martina sintió incomodidad en esos cuatro pisos restantes. Le sonrío a Gonzalo cuando cruzó miradas y lo miró a Julián de reojo. ¿Qué carajo le pasaba?
Se bajaron los tres al llegar al diez y Gonzalo les dijo que los vería luego en la cena.
Martina lo siguió a Julián su habitación y entró cuando él dejó la puerta abierta después de entrar.
Ya harta de su actitud, cerró la puerta detrás de ella y habló.-¿Se puede saber que te pasa?
Julián la miró frente a su cama y frunció el ceño.
-¿A mí?
-Si a vos. -dijo ella, apoyándose en la puerta blanca.
Julián se tiró en su cama, boca arriba, dejando los pies apoyados en el suelo y miró el techo.
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Trátame suavemente | Julián Álvarez
Romantiek¿Qué pɑsɑ cuɑndo te enɑmorɑs de tu ɑmigo con derechos? "Pᥲrᥱᥴίᥲ qᥙᥱ todo ᥲ mι ᥲᥣrᥱdᥱdor ᥣᥱ hᥲbίᥲ ᥲgᥲrrᥲdo ᥱᥣ gᥙstιto ᥲ dᥱsmoroᥒᥲrsᥱ" Julián Álvarez fanfic. Para mayores de +18 años. Publicada: 16/12/2022 Terminada: 13/05/2023 #1 en julianalvare...