Perdido en la ciudad que no ve nevar.
Buenos Aires, 2007. Él aprendía a vivir solo cuando la casualidad lo llevó a abrir viejas heridas que creyó haber cerrado y amores que juró haber olvidado. ¿Hasta dónde somos nosotros mismos?
Cristian volvía a...
Una noche se acostó sin pensarlo mucho. No se despidió de ella, no dijo nada. Ya tenía suficiente preguntándose lo mismo cada noche:
¿Desde cuándo todos los días eran iguales?
La misma luz del baño entraba por la rendija de la puerta del cuarto. Su cama vacía, como todas las noches desde que lo perdió todo. Su mirada en el techo preguntándose qué podría haber sido. Techo que todavía no acostumbraba a llamar familiar. Ni siquiera memorizando todas las manchas de humedad podría decir que ese era su techo. Lejos de casa, en una cama que nunca llamaría suya.
El lunes se acostó como lo hacía el martes, dormiría como lo hizo el miércoles, despertará a la misma hora que el jueves y el viernes, mirando la pared, se quedaría lentamente dormido sin pensar nada más.
Cristian Romero creía que sus días serían todos iguales desde que perdió lo único que consiguió en su vida. Lo que no sabía es que ese era su último viernes igual que los demás.
—Buenas noches, amor, tapate bien que está refrescando. —Esperaba que lo escuche el del otro cuarto, seguro ya dormido. Fue lo último que le dijo a su último viernes mirando el techo y la luz que entraba del baño para «espantar monstruos» y cuentos pasados sin cerrar que no tenían lugar en su semana de agenda.
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¡hola! bienvenidos a otra historia comandada por la capitana alexischoclo, conocida por casi conseguir una cancelación masiva por mi primera obra que parecía no avanzar nunca encima de que los protas se peleaban todo el tiempo.
ajá, la de "arrivederci", la autora de esa historia de dos compañeros de equipo que hablaban dos idiomas distintos, estando completamente incomunicados, y trataban de luchar contra esas adversidades para llevarse bien pero todo termina yendo para otro lado. autora de esa historia soy yo. sigue en mi perfil, pueden pasar a ver. su consulta no molesta.
hoy presentando un nuevo fanfic para pasar el verano alimentando mi esquizofrenia con el cutison, es decir, mis papás, claramente. denle la bienvenida con una guitarra eléctrica bonita a "friday, i'm in love", la canción que alguna vez me ha tenido fantaseando y bailando en la calle, hoy hecha cuento.
¡su paciencia va a ser bienvenida! sólo que en sentido contrario, porque en realidad a veces termino siendo muy molesta con las actualizaciones. (susurros) la última vez actualicé como tres veces por día.
espero que apoyen este fanfic tanto como lo han hecho con el anterior y que disfruten, que la pasen bien, mal, ¡esa es la experiencia completa! pasemos por todas las emociones juntos en este recorrido que después a la salida hay sanguchitos y jugo.
gracias por leer esta introducción y, sin más, los veo en la primera parte.
