Esto es una Locura. (OC x Genshin Impact)

Capítulo 25: La chica curativa.

Tal como Lisa le dijo el día de ayer, Tabibito fue a quedarse a dormir en la casa de la bruja, si se preguntan por Paimon, la hada se quedó dormida en la sala y dentro de una caja a prueba de sonidos... ¿Qué por qué? No hace falta decirlo.

Lisa: Buenos días cariño~.

Tabibito se despertó en la la cama de Lisa, la cama de la bruja era extremadamente grande, así que no tuvo problemas al quedarse dormido y más en presencia de Lisa.

Tabibito: Buenos días Lisa, ¿Descansaste hoy?

Lisa: Descanso bastante bien cuando estoy contigo, ya deberías de saberlo...

Tabibito: Que bien, lo siento pero tengo que irme al Gremio de Aventureros, Paimon siempre quiere que vaya para cobrar las recompensas.

Lisa: Ohh, que mal... Quería hacer algo está mañana contigo~.

Tabibito: ¿Eh? Sí es algo importante, pues Katheryne puede esperar y los encargos.

Sin siquiera darle tiempo al chico, la mano de Lisa estaba sobre el miembro del aventurero y lo acariciaba por encima de su ropa.

Lisa: Parece que tú amiguito se despertó desde muy temprano~.

Tabibito: Ah eso, sí, ya van varias veces que está despierta y aveces me preguntó porque pasa eso...

Lisa: Es algo muy saludable para tú miembro y solo quería asegurarme si te pasaba, ahora que ya lo sé, me encargaré personalmente de esto~.

Tabibito: ¿Vamos a hacerlo?

Lisa: Claro~.

[...]

Paimon: ¿Te encuentras bien? Has estado sonriendo toda esta mañana desde que salimos de la casa de Lisa.

Tabibito nunca paró de sonreír cuando lo hizo con Lisa en su cama, el sexo con ella era algo maravilloso y le gustaba demasiado.

Tabibito: No es nada Paimon, es solo que Lisa me dió un masaje en mí espalda algo relajante.

Paimon: Ohhhh... ¡Paimon tuvo que dormir en una pequeña caja de cartón! ¡Yo también merezco un masaje!

Tabibito: Podemos pedirle a Lisa que te lo haga y...

Paimon: ¡No! Q-Quise decir, a Paimon ya no le duele nada.

Tabibito: Puedo hacértelo yo mismo sí quieres.

Paimon: ¡Olvida lo que dije! Solo vayamos a reclamar las recompensas.

Llegaron al gremio y el aventurero recibió una bolsa de moras un poco grande, sin embargo aquella bolsa, se le fue arrebatada de su mano de inmediato.

Paimon: ¡Moras! Las extrañé demasiado.

Tabibito: Pero ya tenemos bastantes Moras...

Paimon: ¡Necesitamos más Moras Tabibito!

Tabibito: Está bien pero no necesitas decírmelo en mí oído.

Paimon: Jeje... ¿Qué te parece sí vamos con Barbara para saludarla? No la hemos visto desde hace días.

Tabibito: Me parece bien.

Empezaron a caminar hacia la iglesia, faltaban pocos días para que Tabibito se fuera a Liyue, aunque cada vez que lo pensaba demasiado, se ponía un poco nervioso ya que tendría que conocer a gente nueva, podía decirse que no era alguien tan sociable.

Llegaron a la iglesia y comenzaron a buscar a Barbara, estuvieron varios minutos buscándola pero jamás la encontraron y tuvieron que preguntarle hacia una hermana, al principio Tabibito se acercó con una monja que tenía la piel bastante blanca, pero a Paimon le dió una mala espina y decidieron mejor preguntar por otra.