Capítulo 12: Necesitamos más.

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Paimon: Vaya, la conversación se ha puesto un giro incómodo.

Tabibito: ¿Hice algo malo en decirle superior a Diluc?

Después de lo ocurrido con Amber, nuevamente nos encontramos en la taberna de Diluc, sin embargo no sé esperaban para nada que la Gran Maestra Intendente Jean estuviera con ellos. Después de haber eludido ese tema tan incómodo, Jean supo dónde podría estar la Lira Sagrada que robaron los Fatui, querían el poder divino y la misma razón por la que la robaron era por ese medio qué se obtenía el poder del arconte Anemo.

Ante de partir hacía el escondite de los Fatui, Diluc le entrego una especie de disfraz que no era más que una simple máscara que cubría el rostro del aventurero.

[...]

Jean: Y bien, ¿Crees que con eso podrás empezar a trabajar?

Venti: Hmm, la verdad es que no creo que funcione, cómo pueden ver, la Lira Sagrada tiene miles años de historia y su poder Anemo se ha agotado y bajo estas condiciones, ni siquiera valdría para tocar música en la taberna de Diluc.

Diluc: Muchos bardos pelearán por tocar en el escenario de mí taberna, no hagas suposiciones así.

Paimon: ¿En serio tiene que discutir ahora señor Diluc?

Paimon miró a Diluc para luego, mirar a Venti enojada.

Paimon: ¡Y tú bardo! ¡¿Solo tomaste la Lira Sagrada para tocar ante un montón de borrachos!?

Venti: ¡Ehe!

Paimon: ¡Ehe te nandayo!

Tabibito sonrió al oír esas palabras tan divertidas de Paimon, eso sí que le sonó chistoso para el.

Venti: En fin, no podemos invocar a Dvalin con esto, la Lira en sí misma está bien pero las cuerdas... ¡Es tú momento de brillar forastero!

Tabibito: ¿Yo? No tengo idea de arreglar instrumentos.

Venti: No te preocupes, no está rota es solo que la intensidad de su poder Anemo ha disminuido considerablemente.

Tabibito: ¿Funcionará sí saco la lágrima cristalizada de Dvalin?

Venti: Sí, intenta usarlo sobre la lira.

Tabibito sacó la lágrima de su bolsillo y se adelantó con la Lira Sagrada y a Venti quien la sostenía, introdujo la lágrima en las cuerdas de la lira, haciendo que estás mismas se prendieran de color.

Venti: ¡Funcionó, tal como pensaba!

Jean: Este brillo rejuvenecedor...

Tabibito: ¿Acaso se está elogiando a usted misma?

Jean: E-Estoy hablando de la Lira Sagrada, Tabibito...

Venti: Gracias a que Tabibito purifico el cristal, la lira ya no perderá más poder Anemo pero está lejos de estar completo y sería genial sí pudiéramos conseguir más lágrimas.

Tabibito: Puedo ayudarte sí quieres Venti.

Venti: Gracias forastero, Dvalin ya debe estar llorando... Sufriendo a solas en un lugar desierto.

Jean: Dvalin...

Paimon: Pobrecito...

Jean: No sé sí el aventure... El Caballero Honorario podrá hacerlo solo, los demás Caballeros de Favonius te acompañaremos y cuándo tengas la lágrima cristalizada, te dejaremos a cargo de la purificación.

Tabibito: Está bien.

Venti: ¡Oh, compañeros de trabajo que se ayudan mutuamente y emprenden juntos una aventura! Parecen una pareja los dos... ¡Es fascinante!

Venti sonrió ante los demás, parece ser que el bardo había dado en el blanco cuando vió a Jean con un leve sonrojo, Tabibito y Diluc no entendían nada así que lo dejaron pasar pero para el aventurero... Se memorizo la palabra "pareja" para buscarla después.

Venti: Podría componer una canción de amor sobre el forastero y la Gran Maestra Intendente...

Paimon: ¿Eso es lo único que harás? ¿Cantar?

Venti: ¿Que clase de bardo sería sino?

Paimon: Grr... ¡Paimon lo ha estado pensando en un par de días y te mereces un apodo horrible!

Tabibito: ¿Qué tal ese que le dijiste aquella vez en Levantamiento?

Paimon: ¡Decidido! ¡Paimon te llamará de ahora en adelante "el bardo de pacotilla"!

Venti: ¿Oh? No sabía que me odiabas tanto Tabibito.

Tabibito: ¿Odiarte? Por supuesto que no, me caes muy bien con todo esto lo que hemos vivido.

[...]

Tabibito y Paimon estaban en las calles de Mondstadt caminando hacía la entrada principal de la ciudad, tras lo de la taberna, Jean ordenó ir todos juntos parar recuperar las lágrimas que estaban en tres diferentes templos.

El dúo inseparable se detuvieron casi al llegar a la entrada sino fuera porque una voz le llamó al aventurero.

???: ¡Viajero!

Tabibito se fijó en la chica, está estaba en un edificio en una pequeña "oficina" fuera del edificio.

???: Nos volvemos a encontrar, ávido aventurero.

Tabibito: Lo siento, ¿Platique contigo alguna vez?

???: En realidad, nunca hemos platicado pero he oído que eres un Caballero de Favonius muy importante... ¿Cómo vas con tus aventuras?

Tabibito: Me agrada bastante ir de aventura.

???: Ese es el espíritu, ¡Sigue así!

Tabibito: ¿Podría saber tú nombre?

Katheryne: Oh sí, ¡Me llamo Katheryne y soy la recepcionista del Gremio de Aventureros!

Tabibito: Buenos días Katheryne, me llamo Tabibito pero puedes decirme cómo quieras...

Katheryne: No hace falta las presentaciones Tabibito, ya todos te conocen...

Tabibito: Perdón.

Katheryne: No importa, parece que ahora tienes la suficiente una gran experiencia en tú haber... ¿Te gustaría formar parte del Gremio de Aventureros?

Paimon: ¿Gremio de Aventureros?

Así la recepcionista del lugar les explico a ambos que consistía el gremio y que habría maravillosas recompensas sí cumplían los encargos que daban en el gremio, lo cual hizo que la pequeña hada aceptará inmediatamente unirse pero el aventurero dijo que lo pensaría en unos días sobre sí unirse o no porque en ese instante, Jean y Diluc ya estaban esperándolo para ir a los templos dónde estaban las lágrimas de Dvalin.

Fin del capítulo 12.

De acuerdo esto último no lo escribí por la flojera que tenía xd

Era demasiado y además no nos extenderemos mucho en esta parte de la historia porque ya todos nos la conocemos.

Esto es una Locura. (OC x Genshin Impact) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora